¿LEGALIDAD Y DERECHOS HUMANOS

EN LA CUBA DE LOS HERMANOS CASTRO?

Parte 3

 

 

Padres de joven asesinado reclaman justicia

Acerca de la golpiza a Ana Luisa Rubio:

una reflexión obligada.

Dr. Jeovany Jiménez Vega

13 de septiembre de 2013

 

Ana Luisa Rubio, actriz censurada y disidente habanera, recibió al final de la tarde del pasado viernes 6 de septiembre una golpiza frente a su casa que le provocó múltiples heridas contusas en el rostro, la cabeza y el resto del cuerpo. Pocos minutos después recibía yo, en Artemisa, su llamada telefónica: me llegó su voz aterrorizada que intentaba contarnos, pero que apenas atinaba a dar algún detalle. Ana Luisa recibió enseguida la solidaria visita de varios amigos y esa noche fue acompañada por Antonio Rodiles y su esposa Ailer al cuerpo de guardia del hospital Manuel Fajardo, donde recibió asistencia médica y le fue redactado el correspondiente certificado de lesiones. Ese mismo día quedaba hecha la pertinente denuncia ante la policía, por enésima vez, para levantar cargos contra los agresores.

 

Imposibilitado de viajar en aquel momento –el transporte a esa hora hacia La Habana es virtualmente inexistente– y como estuve de guardia durante 24 horas el sábado, sólo pude visitarla en la mañana del domingo. No fue hasta que constaté la amplia equimosis traumática alrededor de su ojo izquierdo, en la comisura labial de ese lado, aun edematosa, así como en otros lugares de su cuerpo, que me percaté de la envergadura de la agresión. Entonces Ana me contó que esa tarde algunos niños, señuelos inocentes, insistían en tocar sospechosa e insistentemente el timbre de su casa –lo cual, asegura, entraba en congruencia con toda una historia de provocaciones que viene sufriendo desde hace años, y que ha denunciado una docena de veces sin que las autoridades policiales hayan hecho nada– y que, al requerirlos, una vecina desproporcionadamente descompuesta se le abalanzó en zafarrancho de combate, acto seguido le secundó una desconocida y en segundos tuvo encima varios hombres, también desconocidos, que se sumaron a la golpiza. El modus operandi lo dice todo. Las imágenes hablan por sí solas. La impunidad que de seguro vendrá se encargará de confirmar todas las sospechas.

 

Ahora, la obligada reflexión de este cubano que no fue testigo presencial de estos hechos y que intenta analizar el asunto lo más objetivamente posible. Para no ponernos suspicaces: supongamos que se tratara del inaudito caso en que una vecina, auténticamente indignada, fuera secundada inexplicablemente con tanta saña por varios desconocidos, hombres y mujeres incluidos, ¿no estaríamos ante un caso de agresión contra la persona, reconocido como un delito en el Código Penal vigente y por tanto punible? Entonces ¿no deberían actuar enérgicamente las autoridades para hacer valer la ley, detener a la principal agresora –que vive a pocas puertas de Ana Luisa– y dilucidar culpables? Sinceramente, presiento que esa es una remotísima posibilidad si tomamos en cuenta que la agresión se consumó sobre una mujer que a pesar de su naturaleza vulnerable se ha atrevido a desafiar a un poder absoluto. Tengo la completa certeza de que si, en caso contrario, la agredida hubiera sido aquella “intransigente revolucionaria” sin importar razones ya estuviera Ana Luisa lista para sentencia. Pero en este caso sucede algo que no puede soslayarse: casualmente varios días antes –insisto, casualmente, para no ponerme demasiado suspicaz– en la tarde del pasado 24 de agosto, Ana había hecho un acto unipersonal y público de protesta en la Plaza de la Revolución y ya eso sí que explicaría muchas cosas.

 

Así lo veo: mientras sea este un país donde no exista división de poderes y la Fiscalía permita abusos semejantes; un país donde la autoridad policial, lejos de velar por la seguridad de la persona, se congenie en complicidad con los represores; mientras sea este un país sin una prensa comprometida, capaz de sumergirse en catarsis estériles, pero que jamás arriesga el dedo sobre la llaga ardiente; mientras la Seguridad del Estado y el Partido Comunista se arroguen la potestad de organizar los tristemente célebres mítines de repudio y las infames golpizas –denigrantes, no para las presuntas víctimas, sino para quienes las perpetran; mientras la libertad de opinión y de asociación nos sean constantemente vulnerados y el miedo corroa la dignidad del hombre; mientras haya cobardes capaces de ensañarse sobre el desamparo de mujeres como Ana Luisa nada, absolutamente nada en este sufrido país habrá cambiado.

 

 

 

¿Por qué el Partido Comunista controla las iglesias?

Lilianne Ruiz

14 de agosto de 2013

 

“Mientras exista la Oficina de Asuntos Religiosos del Comité Central del Partido Comunista, para monitorear el trabajo pastoral, no podrá hablarse de libertad religiosa en Cuba”. Así declaró a Cubanet el pastor Mario Félix Lleonart, de la Iglesia Bautista de Taguayabón, en la provincia de Villa Clara.

 

La ausencia de una ley de cultos ofrece oportunidad a la Oficina de Asuntos Religiosos de controlar a las iglesias, conduciéndolas hacia los fines políticos del partido único. De existir una ley de cultos, las iglesias contarían con un ámbito legal de deberes y derechos. Podrían ser legalizadas todas aquellas agrupaciones religiosas que no atentan contra la sociedad en la que viven, pero cuyo mensaje de resistencia, no violenta, podría echar por tierra los pilares ideológicos de la dictadura.

 

El monitoreo de la Oficina de Asuntos Religiosos se traduce en un control riguroso de aquellos que han sido escogidos, o colocados, como líderes de las instituciones religiosas reconocidas legalmente, y en mantener un estrecho contacto con ellos. “Ante cualquier cuestión que ellos consideren que deban presionar a una denominación religiosa, rápidamente llamarán a ese líder. Lo coaccionan, lo chantajean, lo manipulan, según la reacción de éste”, comentó el pastor Lleonart.

 

“Muchos entran en franco contubernio con esta Oficina, y sobreviene un divorcio entre esos guías religiosos y el pueblo de esa denominación. Sacan provecho y negocio de todas las prebendas que le puede dar el gobierno, mientras el pueblo padece toda suerte de carencias y falta de libertades”, agregó.

 

El buen pastor

 

Lleonart es activista de derechos humanos y desde su cuenta de Twitter fue el primero en dar a conocer la golpiza policial en Santa Clara, que causó la muerte al opositor político Juan Wilfredo Soto, en el año 2011.

 

Todo indica que la cuenta de alrededor de 27 mil dólares, del Seminario Bautista de Santa Clara, congelada por el Estado, es utilizada como medio de coacción, entre otras razones por seguir teniendo al pastor LLeonart y a su esposa en el claustro de profesores y al Reverendo Homero Carbonell de rector. Estas figuras activas dentro de la perseguida y auténtica Sociedad Civil no son del gusto de la Oficina de Asuntos Religiosos. Por lo tanto, presionan para que salgan de esa zona de influencia.

 

Esta cuenta bancaria es el resultado de la generosidad de otras iglesias bautistas en los Estados Unidos, pero que no comulgan con el gobierno cubano. “Tal vez si esas iglesias que han ofrecido el donativo vinieran a decir Liberen a los 5, o le diesen al régimen lo que éste quisiera, pues entonces si mantendrían buenas relaciones, pero no es el caso”.

 

La Convención Bautista de Cuba Occidental, fundada en 1905, no se somete a los intereses del gobierno. La iglesia de Santa Clara, que forma parte de dicha Convención, abrió esa cuenta en el Banco Financiero Internacional (BFI), lo que supone que el dinero podía ser empleado. Hasta un día en que el gobierno declaró que, por “sanciones políticas”, sería congelada. El BFI respondió lo siguiente cuando se le preguntó por qué el dinero no era operable: “Son orientaciones del partido, de la Habana, de la Oficina de Asuntos Religiosos”.

 

Cuando el Consejo Latinoamericano de Iglesias (CLAI) celebró su séptima Asamblea, hace pocos meses, en la Habana, el gobierno hizo el paripé de que había descongelado la cuenta del Seminario. Pero fue una farsa como comenta el pastor:

 

“No se ha podido sacar un solo centavo. Mandaron a decir a través del BFI que la cuenta iba a ser operable pero solo para asuntos de construcción, o sea, quieren decir a la iglesia para qué tiene que usar su dinero, y que para sacar cada centavo debía justificar si era para ladrillo o si era para cemento. Aun así, no se ha podido sacar un centavo, esperando una firma que nunca llegó”.

 

La Seguridad del Estado, en la persona de uno de sus agentes, le expresó en una oportunidad al pastor Lleonart que “no se le daría un tratamiento como pastor, sino como a un contrarrevolucionario”.

 

Otro agente le declaró durante una detención que existían muy buenas referencias sobre él en la comunidad y que le recomendaba que se concentrara en su trabajo pastoral en Taguayabón, que no tenía por qué estar yendo a Santa Clara a visitar a “esos negros”, aludiendo a los líderes opositores de la provincia que en su mayoría son de raza negra, como Guillermo Fariñas, Jorge Luis García Pérez (Antúnez) y Damaris Moya Portieles.

 

“Este agente de la Seguridad del Estado se tomó la libertad de orientarme lo que debo hacer en mi trabajo pastoral, presentándolo como divorciado totalmente de mi realidad social. Su orientación es la misma que la de la Oficina de Asuntos Religiosos que, tal vez no con las palabras que él utilizó, pero sí con prebendas, manipulando derechos, le pide a los pastores en Cuba que estén tranquilos, que se dediquen a cantar, a orar, a dar sus sermones dentro de cuatro paredes. Que contribuyan a que el pueblo esté tranquilo, y que se enajene de esa realidad que hay afuera”, dice el pastor Lleonart.

 

En el año 2009, la prestigiosa revista Christianity Today, escogió para la portada de su edición del mes de julio una fotografía de Lleonart acompañada por una frase suya: “Aquí estoy, paliando el dolor de mi pueblo”.

 

El pasado7 de julio, el servicio religioso fue interrumpido por un hombre aquejado de desórdenes mentales. Mientras era obligado a salir de la iglesia, gritó amenazas de muerte contra el pastor. La familia del demente asiste regularmente a la iglesia y contó cómo lo recluyeron durante 12 días, pero fue devuelto a la casa sin tratamiento médico, en peor estado que como se lo llevaron y manteniendo las amenazas contra el pastor y la familia de éste.

 

“No es mi vida lo que más me preocupa, sino la de mi familia. Espero y confío en Dios, en que no pase absolutamente nada. Pero para mí la prueba de que la Seguridad del Estado sí está involucrada es que cuando yo di a conocer esto, que además todo el pueblo lo sabe, e incluso lo di a conocer en Twitter, las autoridades no han hecho absolutamente nada. Han dado a entender que ese asunto no les interesa.”

 

 

La reforma migratoria es una farsa

Manuel Castro Rodríguez

13 de agosto de 2013

 

Hoy, le envié un correo a la senadora Lucía Topolansky para que su esposo, el presidente José Mujica, interpusiese sus buenos oficios ante los hermanos Fidel y Raúl Castro, que le impiden a la cubana Blanca Reyes visitar a su padre enfermo en Cuba. Lo mismo hice con la expresidenta Michelle Bachelet.

 

El progenitor de Blanca Reyes tiene 93 años. “La reforma migratoria es una farsa. Yo no he matado a nadie”, se quejó la fundadora de las Damas de Blanco.

 

Mi padre tiene 93 años y está muy enfermo. Yo quería verlo antes que muriera”, explicó Blanca Reyes.

 

Están leyendo bien, el régimen de los hermanos Castro le impide la entrada a su patria a Blanca Reyes, representante en Europa de las Damas de Banco, cuyo padre, de 93 años, está muy enfermo en Sancti Spíritus.

 

Blanca Reyes había solicitado el permiso de entrada el pasado 22 de julio ante el Consulado General de Cuba en Madrid.

 

Hoy, un funcionario consular le comunicó brevemente la decisión del régimen de los hermanos Castro: “denegado”.

 

 

La vida para los discapacitados en Cuba

sigue igual… o peor

Yusimí Rodríguez López

7 de agosto de 2013

 

Tengo miedo de andar por la Habana Vieja. No por los policías que podrían pedirme el carné o por los cubanos que podrían tomarme por una turista, sino por los inválidos, tullidos, mutilados que empiezan a volverse parte del paisaje a lo largo de la calle Obispo.

 

No temo por lo que pudieran hacerme; no veo en sus ojos (en los ojos de los que pueden ver) rabia, ira, ganas de vengarse del mundo. Lo que temo es acostumbrarme, que de tanto verlos, de tanta imposibilidad de hacer algo, se me haga un cayo en el alma y deje de dolerme.

 

Más que miedo es vergüenza lo que siento, no por algo que he hecho, sino por lo que no puedo hacer.

 

Algunos recordarán a Jorge Luis Moreira, mi entrevistado de Este gobierno se preocupa por la gente (III). Nació con una malformación congénita que lo ha hecho vivir en una silla de ruedas y padece, además, diabetes e incontinencia.

 

Pero el no está postrado en su casa, con la boca abierta como un pichón, esperando que le echen la comida. Ese es un lujo que ni los impedidos pueden darse en este país.

 

Lo conocí en la calle Mercaderes, tiene licencia para vender víveres en una carretilla, aunque ahora no puede usarla y los productos están caros, debe ir muy lejos a buscarlos. Pero va a la Habana Vieja a vender periódicos, y si algún turista se conduele ante su situación y decide darle algo de dinero…

 

En aquella entrevista, Jorge me contó que la policía se lo ha llevado detenido por asedio al turismo. Me habría resultado inverosímil que ningún policía detuviera a alguien en sus condiciones, si no hubiese sido testigo días antes cuando uno de nuestros agentes de la seguridad y el orden se llevaba a un señor al que le faltaba una pierna y andaba en silla de ruedas.

 

He vuelto a ver a Jorge la semana pasada, en la misma calle Mercaderes donde lo vi por primera vez y donde he vuelto a encontrarlo un par de veces. Su vida sigue igual: una pensión de 135 pesos que no alcanza ni para mal comer; cuando algún turista se acerca a darle dinero, los guías lo disuaden, asegurando que nuestro gobierno proporciona a los discapacitados todo lo que necesitan y estos mendigan (aunque Jorge no es un mendigo) porque quieren. Cuando aparece la policía, otros que no tienen licencia para vender nada, pero sí un buen par de piernas saludables, logran escapar; a él se lo llevan.

 

¿Qué esperaba yo cuando publiqué su entrevista? ¿Qué esperaba él? ¿Qué podía cambiar? Le di treinta centavos CUC que llevaba en el bolsillo, más para aliviar mi conciencia que su miseria. De todas formas, fue como una aspirina contra un cáncer. No será menos miserable por mis treinta centavos (unos seis pesos en moneda nacional), ni he podido dejar de pensar en él desde esa tarde.

 

¿Es culpa del gobierno que Jorge haya nacido con una malformación congénita? No solo sería estúpido culpar al gobierno; hay personas como Jorge, o en peores condiciones que Jorge, en todas partes del mundo.

 

A Jorge no le alcanza su pensión de la misma forma que no le alcanza la pensión a los jubilados, cuyo merecido descanso tras años de trabajo, consiste en inventar nuevas formas de subsistencia (y son afortunados de poder inventarlas). A Jorge no le alcanza su pensión, como no le alcanza el sueldo a los trabajadores, que ven en los jubilados sus futuros.

 

Los jubilados buscan la forma de vender jabitas, periódicos, se convierten en mensajeros del gas o espiritistas que leen las cartas y las palmas de las manos. «Luchan», y pagan sus impuestos y sus licencias, ahora que hay licencia para todo, hasta para dejarse fotografiar. ¿Qué pueden hacer Jorge y otros como él, excepto depender de la caridad ajena?

 

Por años, nuestro gobierno promovió el internacionalismo, la ayuda solidaria a países que hubiesen sufrido un desastre o que estuvieran más necesitados que el nuestro. Se han destinado recursos, personal médico y técnicos cubanos, formados con el presupuesto estatal, para aliviar la situación las personas en otras tierras.

 

¿Por qué impedir que estos cubanos discapacitados reciban la solidaridad de los turistas o de nosotros, sus compatriotas, ya que el gobierno no puede cubrir todas sus necesidades?

 

¿Pero será esta la solución, que los discapacitados vivan de la mendicidad? ¿Y si a algún sesudo se le ocurre establecer una licencia para que los mendigos paguen impuestos?

 

Sigo sintiendo que algo está mal, que la mendicidad no debe ser la solución para estas personas. ¿A la vez, si el costo de la vida en Cuba hace que las pensiones que reciben del Estado sean insuficientes, qué derecho hay de impedir que se busquen la vida en la forma que pueda hacerlo?

 

No he sabido de ningún discapacitado que haya asaltado a alguien, en pleno día, en la calle Obispo. Me resulta difícil imaginar a una ciega o a un individuo sin piernas arrebatándole la cartera a alguien.

 

A Jorge le asaltan nuevas preocupaciones desde que lo entrevisté en febrero. Dice que hay rumores de que el Estado entregará todos los establecimientos estatales de venta de productos agrícolas a los trabajadores por cuenta propia. Aquí la gente, por experiencia, ha aprendido a dar crédito a los rumores que se riegan en las calles, por descabellados que suenen. Sobre todo si se trata de algo que puede empeorar su situación.

 

Jorge se pregunta de antemano, y ojalá innecesariamente, cómo va a comer si solo puede comprar los productos agrícolas y los cárnicos a los trabajadores por cuenta propia. No puedo hacer otra cosa que mirarlo impotente, avergonzada y convencida de que la próxima vez que lo encuentre las cosas no habrán mejorado para él.

 

 

Sindicalismo por cuenta propia

Yoani Sánchez

4 de agosto de 2013

 

La Oficina Nacional de la Administración Tributaria (ONAT) abre sus puertas y hay decenas de personas aguardando desde muy temprano. Una empleada explica a gritos dónde debe ubicarse la cola para cada trámite, aunque pasados breves minutos la confusión volverá a reinar. En un buró, sin un ordenador, otra funcionaria escribe a mano los detalles de cada caso atendido. La pared tras sus espaldas está manchada de humedad, el calor es insoportable y a cada rato alguien la interrumpe para pedirle unas planillas. Una institución que recauda anualmente millones de pesos en impuestos, sigue con los pies de barro de la precariedad material y la mala organización. Locales congestionados, trámites interminables y falta de información, son sólo algunos de los problemas que lastran su gestión.

 

Sin embargo, los tropiezos no terminan ahí. La inexistencia de mercados mayoristas estables y con productos diversificados, frenan también al sector privado. Los inspectores llueven sobre las cafeterías, restaurantes y demás negocios autónomos. La huelga o cualquier demostración pública para que se reduzcan los gravámenes, siguen terminantemente prohibidas. De los cuentapropistas se espera que contribuyamos al presupuesto nacional, pero no que nos comportemos como ciudadanos dispuestos a reclamar. El único sindicato permitido, la Central de trabajadores de Cuba (CTC) intenta absorbernos en sus encorsetadas estructuras. Pagar una mensualidad, participar en esos congresos donde poco se logra y desfilar apoyando al mismo gobierno que despide a miles de empleados; a eso quieren reducir nuestras acciones colectivas. ¿Por qué no se crea y legaliza una organización propia, no manejada de forma gubernamental? Una entidad que no sea polea de transmisión desde el poder hacia los trabajadores, sino a la inversa.

 

Lamentablemente la mayoría de los cuentapropistas no repara en que la independencia salarial y productiva, tiene que venir aparejada con la soberanía sindical. Muchos temen que al menor atisbo de exigencia se les retire la licencia o se tomen otras medidas contra ellos. Por eso callan y aceptan las ineficiencias de la ONAT, la incapacidad de importar materias primas desde el extranjero, los excesos de los inspectores y otros tantos obstáculos. Tampoco las organizaciones de la emergente sociedad civil han logrado capitalizar las necesidades de este sector y ayudarlo a alcanzar representatividad. La necesaria alianza entre grupos sociales que comparten inconformidades y demandas, no acaba de concretarse. Así que nuestras reivindicaciones laborales siguen postergadas, entre el miedo de algunos y el descuido de otros.

 

 

Damas de Blanco piden la intercesión

del arzobispo de Santiago para detener las agresiones

 

DDC | Santiago de Cuba | 4 Ago 2013 - 6:21 pm.

 

Las mujeres describen golpizas, fracturas de costillas, partiduras de cabeza, fisuras en las muñecas y pinchazos en las manos.

 

Las Damas de Blanco pidieron la mediación del arzobispo de Santiago de Cuba, Dionisio García Ibáñez, para intentar que el régimen detenga las acciones represivas contra ellas.

 

Las mujeres le pidieron que “interceda ante las autoridades del gobierno de Raúl Castro”, quien se había comprometido con la Iglesia —a través del cardenal Jaime Ortega y Alamino— a “no tomar acciones agresivas contra las Damas de Blanco”.

 

“Confiamos en su buenos oficios y en el tradicional humanismo de la Iglesia con todos los que sufren injusticias”, dice una carta a la que tuvo acceso DIARIO DE CUBA.

 

Las Damas explicaron al arzobispo primado de la Isla que, “solo por ejercer su libertad religiosa”, son “víctimas de maltratos crueles por parte de la policia política”.

 

Describieron recientes sucesos represivos contra mujeres en Cárdenas y Colón, provincia de Matanzas, durante tres domingos consecutivos.

 

Después de asistir a misa, más de una veintena de Damas de Blanco y activistas de derechos humanos fueron “atropellados” por turbas paramilitares y agentes del Departamento de Seguridad de Estado.

 

“Fueron sometidos a tratos crueles e inhumanos, golpizas, fracturas de costillas, partiduras de cabeza, fisuras en las muñecas, pinchazos en las manos”, expusieron las mujeres en la carta al prelado.

 

Contra Leticia Ramos Herrería “se descargaron golpes por el rostro, la boca, espalda, las extremidades, el abdomen”. Además, “la pincharon con una aguja en tres lugares de la mano derecha”.

 

“Una de las golpeadoras fue la policía Yuli, que además le dijo: 'soy la que te dará el tiro cuando llegue la orden'”, relata la misiva.

 

Las Damas de Blanco dijeron confiar en la “capacidad intelectual” del prelado “para valorar en su justa medida agresiones como esta”.

 

García Ibáñez preside la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, pero el “teléfono rojo” con Raúl Castro está en manos del cardenal Ortega. Sin embargo, las relaciones del arzobispo de La Habana con las Damas de Blanco son cada vez peores.

 

El nombre del arzobispo de Santiago suena entre los posibles sucesores de Ortega y Alamino en la capital.

 

Matanzas: Sigue la presión

 

Este domingo, Radio Martí informó que el padre Rolando Lauzurique habría presionado a algunas Damas de Blanco para que abandonaran la Iglesia Parroquial de la Purísima Concepción, de Cárdenas, tras finalizar la misa dominical.

 

El padre nos echó de la iglesia (…) nos dijo que, por favor, saliéramos de la iglesia, que tenía que cerrar las puertas, con las turbas afuera”, denunció Leticia Ramos Herrería.

 

La mujer le dijo que cualquier cosa que le pasara a las Damas de Blanco “iba a caer sobre su conciencia, porque esa era la casa de Dios (...), la casa de los oprimidos, de los humillados y de los pobres”.

 

Afortunadamente, las turbas organizadas por la Seguridad del Estado, que se encontraban apostadas en las afueras de la iglesia, no agredieron, esta vez, a las Damas de Blanco que consiguieron abandonar el templo.

Otros cinco cubanos son declarados

presos de conciencia por Amnistía Internacional

2 de agosto de 2013

 

Amnistía Internacional declaró presos de conciencia a Emilio Planas Robert, Rafael Matos Montes de Oca, Alexeis Vargas Martín, Vianco Vargas Martín y Django Vargas Martín.

 

Vianco Vargas Martín y Django Vargas Martín son menores de edad, presidente Mujica.

 

Cuba: Government critics jailed for speaking out

http://www.amnesty.org/en/library/asset/AMR25/006/2013/en/54365c2d-6bf4-4bc5-b040-50a58d95f46e/amr250062013en.html

 

UA: 205/13 Index: AMR 25/006/2013 Cuba Date: 2 August 2013

 

URGENT ACTION

 

GOVERNMENT CRITICS JAILED FOR SPEAKING OUT

 

Two government critics are serving prison sentences in Cuba on politically motivated charges, following summary trials. Amnesty International considers them prisoners of conscience, detained solely for peacefully exercising their right to freedom of expression.

 

Emilio Planas Robert and Rafael Matos Montes de Oca were arrested in the city of Guantánamo in Guantánamo Province on 23 and 27 September 2012 respectively by Cuban police and officials from the Department of State Security. The men, who are both members of the Patriotic Union of Cuba (Unión Patriótica de Cuba, UNPACU) were charged with “dangerousness” (peligrosidad), a pre-emptive measure defined as the “special proclivity of a person to commit crimes”. Behaviour such as drunkenness, drug-addiction and “antisocial behaviour” is criminalized under this legislation. However, it is also used as a pretext to imprison political dissidents, independent journalists and government critics. Emilio Planas Robert was sentenced to three-and-a-half years' imprisonment and Rafael Matos Montes de Oca to two-and-a-half years following summary trials on 5 and 15 October 2012 respectively.

 

The authorities had accused them of putting up posters in Guantánamo city with “anti-government” slogans such as “down with Fidel” (abajo Fidel) and “down with hunger” (abajo la hambre). According to their families, no incriminating material was found at their houses and none was presented at their trials.

 

Amnesty International believes these sentences are politically motivated, relating to the two men's peaceful exercise of their right to freedom of expression, and that it is intended to send a message of intimidation to other government critics, particularly other members of UNPACU. Therefore the organization considers them prisoners of conscience.

 

Please write immediately in Spanish or your own language:

 

Calling on the authorities to release Rafael Matos Montes de Oca and Emilio Planas Robert immediately and unconditionally, as they are prisoners of conscience, detained solely for peacefully exercising their right to freedom of expression calling on them to eliminate from the Criminal Code provisions regarding “dangerousness" and repeal all legislation which unduly limits freedom of expression and association.

 

PLEASE SEND APPEALS BEFORE 13 SEPTEMBER 2013 TO:

 

 

Head of State and Government

 

Raúl Castro Ruz

 

Presidente de la República de Cuba

 

La Habana, Cuba

 

Fax: +41 22 758 9431 (Cuba office in Geneva); +1 212 779 1697 (via Cuban Mission to UN)

 

Email: cuba@un.int (c/o Cuban Mission to UN)

 

Salutation: Your Excellency

 

Attorney General

 

Dr. Darío Delgado Cura

 

Fiscal General de la República, Fiscalía General de la República, Amistad 552, e/Monte y Estrella, Centro Habana,

 

La Habana, Cuba

 

Salutation: Dear Attorney General

 

And copies to:

 

Interior Minister

 

General Abelardo Coloma Ibarra

 

Ministro del Interior y Prisiones

 

Ministerio del Interior, Plaza de la Revolución, La Habana, Cuba

 

Fax: +1 212 779 1697 (via Cuban Mission to UN)

 

Email: correominint@mn.mn.co.cu

 

Salutation: Your Excellency

 

Also send copies to diplomatic representatives accredited to your country. Please insert local diplomatic addresses below:

 

Please check with your section office if sending appeals after the above date.

 

 

URGENT ACTION

 

GOVERNMENT CRITICS JAILED FOR SPEAKING OUT

ADditional Information

 

Article 72 of the Cuban Criminal Code, "The Dangerous State", reads: "The dangerous state is considered to be the special proclivity of a person to commit crimes as demonstrated by behaviour that manifestly contradicts the norms of socialist morals." (Se considera estado peligroso la especial proclividad en que se halla una persona para cometer delitos, demostrada por la conducta que observa en contradicción manifiesta con las normas de la moral socialista).

 

Both Rafael Matos Montes de Oca and Emilio Planas Robert were sentenced to security measures for those deemed to be likely to commit a crime in the future (medidas de seguridad predelictivas). Articles 78 to 84 of the Criminal Code describe the types of measure that can be taken, which include re-educative measures lasting from between one and four years. The person is to be interned in a "specialized work or study establishment" (un establecimiento especializado de trabajo o de estudio) or sent to "a work collective" (colectivo de trabajo). There is no mention of imprisonment.

 

Article 75 of the Criminal Code states that an "Official Warning" (Advertencia Oficial) will be given by the relevant police authority, to prevent those concerned from carrying out socially dangerous or criminal activities (será objeto de advertencia por la autoridad policíaca competente, en prevención de que incurre en actividades socialmente peligrosas o delictivas). The warning is to be issued as a legal document (acta) expressly stating the reasons for it, as well as what the person concerned has to say about it, and must be signed by both parties. According to their families, neither Rafael Matos Montes de Oca nor Emilio Planas Robert reportedly ever received any warning from the authorities, written or oral.

 

Rafael Matos Montes de Oca’s wife was only told of his trial when it was already underway, and was only able to attend the closing stages – she had been in the process of hiring a lawyer at the time. Emilio Planas Robert’s family were not informed of his trial and he was also not represented by a lawyer. Both trials reportedly lasted less than two hours.

 

The accusations made by the Public Prosecutor during Rafael Matos Montes de Oca’s trial were reportedly that he did not work, did not have good relations with his neighbours, drank alcohol, wandered the streets at night and associated with counter-revolutionary elements. Emilio Planas Robert was apparently accused of being antisocial and meeting with counter-revolutionary elements.

 

Both men are imprisoned in the Guantánamo Provincial Prison (prisión provincial de Guantánamo).

 

The Patriotic Union of Cuba is a civil society organization which advocates for greater civil liberties on the island.

 

Name: Rafael Matos Montes de Oca and Emilio Planas Robert

 

Gender m/f: both m

 

UA: 205/13 Index: AMR 25/006/2013 Issue Date: 2 August 2013

Estado de Sats inauguró el pasado viernes 12 de julio, en La Habana: Cafésatso. Fue con la presencia del poeta Rafael Alcides y estuvo dedicado al escritor disidente Ángel Santiesteban, quien desde el pasado 28 de febrero cumple prisión tras un juicio amañado.

Véase la farsa judicial montada por la tiranía cubana en contra del laureado escritor Ángel Santiesteban

Haga clic aquí

Activista de UNPACU agredido a machetazos

brinda su testimonio

ONU: El gobierno cubano debería asumir

que en el país existen

la explotación sexual y la prostitución

por causas económicas

29 de julio de 2013

 

Cuba debería asumir que en el país existe la explotación sexual y la prostitución y que éstas tienen causas económicas, por lo que tendría que tratar de erradicarlas, manifestó este lunes el Comité por la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres de Naciones Unidas.

 

El Comité tiene por objetivo velar porque los Estados miembros de la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Violencia contra las Mujeres -de la que Cuba es parte- acaben con la discriminación política, económica, social, cultural y civil contra las féminas.


El Comité está profundamente preocupado porque el Estado Parte no reconoce la existencia de la explotación de la prostitución”, se expresa en las conclusiones sobre Cuba.

 

Además, el Comité está también preocupado por la falta de esfuerzos para evitar la explotación de la prostitución y acabar con sus causas estructurales, así como la falta de protección y servicios disponibles para las víctimas de esa explotación”, como programas de rehabilitación y asistencia básica como refugios.


Esta advertencia del Comité aparece tras la respuesta aportada por el régimen de los hermanos Castro durante el análisis de su caso, en el que aseguró que “el fenómeno de la prostitución no tiene causas estructurales en Cuba, ya que fueron eliminadas tras el triunfo de la Revolución”.

 

Las autoridades cubanas contestaron al Comité que la prostitución en Cuba “constituye una elección personal de las mujeres y hombres que buscan en el ejercicio de la prostitución una vía para acceder a determinados bienes de consumo que propicien un nivel de vida superior al del resto de la población trabajadora y, en algunos casos, emigrar al exterior”.


Por otra parte, el Comité solicita que cuando se autoricen excepcionalmente matrimonios entre cónyuges menores de 18 años, el enlace sea con el acuerdo explícito de los dos contrayentes, y sobre todo, que ambos tengan como mínimo 16 años.

 

Hasta la fecha, para poder llevar a cabo este tipo de matrimonio excepcional, el varón debe tener como mínimo 16 años, pero la mujer sólo necesita ser mayor de 14.

Otro de los aspectos tratados por el Comité es la falta de educación no sexista existente en el país, por lo que se solicita que se implementen planes transversales para que haya una educación de la paridad y la igualdad entre sexos.

El Comité hace hincapié en que esto es necesario, sobre todo, en las áreas rurales, donde las mujeres están más sometidas y tienen menor acceso a asesoramiento y ayuda.
 

En el mismo sentido, le sugiere al gobierno cubano a que modifique su código laboral para que incluya disposiciones que contemplen el principio de igual pago por igual remuneración, así como medidas para evitar el acoso sexual en el medio del trabajo

Prostitución infantil en Cuba

James McTurk, el anciano de Toronto que se convirtió en el primer canadiense condenado por delitos sexuales cometidos contra niños en Cuba, después de declararse culpable de seis cargos, entre ellos el de turismo sexual, informó el diario Toronto Star. McTurk admitió sus delitos contra niñas, incluso de tres años, durante una breve comparecencia en una corte de Toronto.

Si de ‘conducta impropia’ se trata…

Miriam Celaya

26 de julio de 2013

  

El Gobierno hace campaña por la ‘pérdida de valores éticos y morales’ en la sociedad. ¿Pero qué hay de la grosería de entrar en arreglos armamentistas con la dictadura norcoreana?

 

El título alude a un memorable documental que, con seguridad, muchos cubanos de todas partes hemos visto, basado en el descarnado testimonio de quienes sufrieron la arbitrariedad y el terror implantados por el castrismo en la purga desatada unos cuarenta años atrás. Conducta impropia fue una ilegal figura delictiva establecida por el régimen castrista en las décadas del 60 y el 70 del pasado siglo para reprimir lo que oficialmente se consideraran desviaciones sexuales (homosexualidad, “blandenguería”), diversionismo ideológico o todo aquello que pudiesen interpretar las autoridades como políticamente incorrecto. Bajo esa etiqueta fueron presos, defenestrados, enviados a campos de trabajos forzados o sencillamente pasados al insilio, numerosos intelectuales, artistas y gente común y corriente.

 

En su mayoría las víctimas anónimas de esa cacería que se erigió como política de Estado fueron hombres, por cometer el grave delito de usar melenas largas, pantalones demasiado estrechos, no incorporarse a las “zafras del pueblo” o preferir cierto tipo de música, entre otros. Nadie escapaba del riguroso escrutinio de la Inquisición verde olivo y de sus celosos comisarios; cualquiera podía caer en desgracia ante los rígidos parámetros revolucionarios.

 

Con el tiempo, la represión se mantuvo, pero cambiaron los métodos. Algo de lo que antes fuera condenado pasó a ser tolerado y actualmente los esquemáticos guerrilleros se han visto obligados a asumir nuevas poses y hasta a aceptar ciertas diferencias. Sin pedir disculpas por los daños causados, sin admitir aquella persecución sin precedentes ni el atentado contra derechos elementales de las personas libres, ahora ese mismo gobierno simula estar al frente de la defensa de esos derechos, y para demostrarlo promueve campañas, realiza eventos y hasta organiza marchas y festivales.

 

Sin embargo, a raíz del discurso pronunciado por el general-presidente en la reciente sesión de la Asamblea Nacional, en el que anunció una cruzada contra la grosería y las indisciplinas sociales y señaló la “pérdida de valores éticos y morales” que se ha enraizado en la sociedad, vuelven a correr aires de censura por nuestras calles. Algunas personas aseguran que ya se están aplicando multas a quienes profieran “malas palabras” o mantengan actitudes groseras en lugares públicos, que suban a los ómnibus por la puerta de atrás o no paguen su pasaje, que escandalicen y molesten a los vecinos, que arrojen basuras y escombros en la vía, etc. Lo cual, en principio, no estaría del todo mal si no se tratara en realidad de una campaña más, si hubiese algún cubano libre de todos estos pecados como para multar a los pecadores, o si al aplicar las medidas no se incurriese, a la vez, en la vulneración de otros derechos ciudadanos.

 

Por ejemplo, días atrás un adolescente habanero, que aquí llamaré Daniel, residente en el municipio Cerro, regresaba a su casa después de su acto de graduación de enseñanza secundaria. Con el desparpajo y la peculiar idea de libertad propios de su edad, sintiéndose ya sin compromisos con la escuela y bajo el sol inclemente del verano, había subido, doblándolas hasta sus rodillas, las perneras de su feo y ya desvaído pantalón de uniforme amarillo, y traía la camisa medio abierta por fuera del fajín. Despreocupado, caminaba concentrado en la música de los audífonos atronando en sus oídos, por eso lo tomó de sorpresa un hombre que lo detuvo bruscamente en plena vía y, lleno de autoridad, tras exigirle apagar la música y sacarse los audífonos, le ordenó bajarse inmediatamente las perneras del pantalón.

 

De momento, Daniel dudó si el sujeto estaría en su pleno juicio, así que le preguntó quién era y por qué debería hacer lo que le ordenaba. El individuo entonces se identificó, no por su nombre y apellidos, sino como “inspector de menores”, lo acusó de estar usando incorrectamente el uniforme, “un símbolo de la Patria que le había entregado la Revolución” y que por esa causa sus padres podían ser multados y él retenido en un “centro de atención a jóvenes con conductas inadecuadas”.

 

Sin dejarse impresionar demasiado, Daniel le explicó que ya ese no era su uniforme porque, de hecho, estaba regresando de su graduación de secundaria, así que no tendría que usarlo más; que ya iba para su casa y tenía mucho calor después de permanecer largo rato parado al sol en el patio de la escuela oyendo los obligados discursos antes de obtener su diploma, y que él tenía entendido que los símbolos patrios eran la bandera cubana, el escudo nacional y el himno de Bayamo, y no un viejo pantalón que —para más señas— no se lo había dado ninguna revolución sino que se lo había comprado su madre a sobreprecio en el mercado subterráneo, cuando ya no le sirvió más el que “le tocaba por el cupón” en el curso anterior. El hombre persistió en sus amenazas, le exigió su carné de identidad y hasta trató de retener a Daniel por el brazo, ante lo cual el adolescente se sacudió y, ya seriamente asustado, echó a correr hasta su casa.

 

El hecho, rigurosamente cierto, se basa en el testimonio directo del jovencito y de su familia. Pero en realidad, lo importante aquí no es dirimir simplemente si Daniel actuaba de manera correcta o no. Durante muchos años ha sido costumbre entre nuestros adolescentes que se gradúan de diferentes niveles de enseñanza realizar esta especie de rito de paso en el que se desacraliza el viejo uniforme, considerado por ellos —y por generaciones anteriores, ya no tan jóvenes— un símbolo del control que ejercían las instituciones educacionales sobre sus vidas. Es apenas un inocente acto de rebeldía propio de esas etapas de la vida que se traduce en disímiles formas de expresión: desde hacerse estampar sobre las camisas las firmas de los compañeros de clases hasta la rotura intencional del uniforme en tiras que dejan colgar sobre sus cuerpos, sin mayores consecuencias.

 

De lo que se trata aquí, en esencia, es de que ningún funcionario o agente del Gobierno puede tener la autoridad de coaccionar a un menor, sea en privado o en la vía pública, trasgrediendo tanto el derecho de ese adolescente como el de sus padres y demás familiares adultos. La gravedad del hecho es que, con otros matices y en otro escenario, aquí se repiten la impunidad oficial y la indefensión ciudadana, a contrapelo de los supuestos “cambios” que pregona el Gobierno, lo que debería disparar de inmediato las alarmas en la sociedad.

 

Y ya que de multas y de castigos se trata, el Gobierno no está en condiciones de tensar la cuerda. Es a los cubanos a quienes correspondería analizar por estos días qué medidas tomar por la incalificable grosería gubernamental de entrar en arreglos armamentistas con esa otra dictadura del planeta, la norcoreana, engañando al pueblo cubano y ofendiendo al mundo civilizado y a las organizaciones internacionales de las cuales somos miembros. Castro II debe explicar esta y otras muchas violaciones que delatan la falta de valores éticos y morales del Gobierno antes de pretender aplicar medidas coercitivas sobre sus “gobernados”.

 

Habría que incluir también en el análisis la responsabilidad directa de medio siglo de abuso totalitario en la pérdida de ética y de valores morales de la sociedad, sin mencionar la violación sistemática de los derechos ciudadanos a lo largo de todo ese tiempo. Lástima que este mismo gobierno nos haya privado también, con la supresión de las instituciones cívicas, de las herramientas con las cuales pedirle cuentas y hacerle obedecer. Sin dudas, ya está siendo hora del inicio de verdaderas reformas en Cuba, comenzando por las políticas.

Una abuela sin justicia

Lilianne Ruiz

16 de julio de 2013

 

“¿Usted me va a decir que el Estado tiene más derecho sobre mis nietos que yo, que los he criado desde que nacieron?” —fue la respuesta de Reina Ruiz Pérez al fiscal, el día en que pretendía presentar su caso de adopción ante el Tribunal Provincial de La Habana.

 

Más tarde, frustrada por el desamparo, advirtió al representante de la autoridad de su deseo de hacer una protesta pública y terminó detenida por enésima vez en su vida.

 

El fiscal había espetado que “tras el fallecimiento de la madre, la patria potestad pasa al padre. De no quererlos el padre, (los niños) pasan al Estado”.

 

En el año 2010, luego de la muerte de su hija, comenzó el litigio de la mencionada abuela por la custodia legal de sus nietos; puesto que los padres de ambos menores no tienen objeción alguna en ceder la custodia a la abuela materna, y en la práctica tampoco se hacen cargo de ellos.

 

“Los niños viven conmigo desde que nacieron, pero ningún trámite legal de mis nietos yo lo puedo llevar a cabo” —señala Ruiz Pérez.

 

Los Tribunales cubanos “le han negado (a la abuela) el acceso a la justicia”, apunta la abogada de Cubalex, Laritza Diversent, consultada al respecto: “En Cuba la adopción se tramita a través de un expediente de jurisdicción voluntaria; eso significa que se trata de un asunto de interés particular. En esos casos la ley de procedimiento autoriza a ir sin representación letrada. En otras palabras, las abuelas están autorizadas de forma legal a adoptar a sus nietos”.

 

Ruiz Pérez nos narra además que desde los años 90, en que comenzó a militar en la oposición no violenta a la dictadura del Estado en Cuba, ha debido enfrentar muchos abusos, entre los que se cuenta haber sido encarcelada sin juicio en la prisión de mujeres, conocida como “Manto Negro”; además de innumerables detenciones en estaciones de Policía para impedir sus actividades de protesta. Muchas de estas detenciones ocurrieron a la vista de sus tres hijos, y al menos una vez fue conducida a la Estación de Policía en compañía de la más pequeña de sus hijas.

 

“Yo iba a la Unidad de Calabazar hasta cuatro veces en la semana”—cuenta la abuela. “Una vez me encerraron en la oficina del jefe de la Unidad con la niña más chiquita, hasta que llegó la oficial de “Atención a Menores” buscando al jefe de la Unidad. Cuando abrió la puerta vio a la niña durmiendo sobre mis piernas y se escandalizó porque no eran todavía las 8 de la mañana, cosa que delataba que habíamos pasado la noche allí encerradas”.

 

Con un largo historial de acoso y persecuciones políticas, a sus 53 años, Reina Ruiz Pérez ha obtenido la visa para residir en los Estados Unidos como refugiada. El problema radica en que, a los efectos, el Estado cubano no le ha permitido hasta el momento asumir la representación legal de sus nietos; siendo ella, en la práctica, la única en asumir el cuidado de los menores, que viven en su casa desde que nacieron, adonde les llega la pensión —por haber sido la mamá difunta una trabajadora del Estado— consistente en 100 pesos cubanos para cada niño (equivalente a 4 dólares al mes).

 

Este impedimento legal significa que los niños no han podido obtener la documentación para viajar con ella a los Estados Unidos.

 

Ruiz Pérez, tras contratar un abogado no pudo realizar la adopción; como consta en el expediente del caso: “el proceso contratado el día 29 de agosto de 2012 será archivado definitivamente”. Luego, siguiendo las recomendaciones ofrecidas por Cubalex, —centro de información legal— amparada en los artículos de la ley que la autorizan, se presentó con un escrito ante los Tribunales para activar ella misma el procedimiento de adopción, pero el Tribunal igualmente le negó realizar el procedimiento.

 

En la última visita que le hizo la Seguridad del Estado a la señora Ruiz Pérez, los agentes que se presentaron como “de Inmigración” le expresaron que venían a “preocuparse” por la situación de los niños, y alegaron que no era el gobierno cubano el que los tiene “parados”, sino “tu gobierno norteamericano que no les quiere dar la visa”.

 

Pero no sólo la policía política ha expresado ese argumento.

 

Según consta también en el expediente del caso, la presidenta del Tribunal de Boyeros “trató a Ruiz Pérez en forma despectiva” y le expresó que “la culpa de que los americanos no los dejaran irse no era de ella, y que allí no se aceptaba ninguna adopción”.

 

Cabe preguntarse cuál es el objetivo al negar a la abuela en cuestión hacer el procedimiento de adopción como está establecido.

 

De mantenerse esta situación el Estado cubano estaría violando la Convención de los Derechos del Niño, que exige considerar siempre el interés superior de los menores.

Rumbo al caos

Alejandro Armengol

4 de julio de 2013

 

Cuba continúa atravesando una situación difícil y el impulso bajo el cual el mandato de Raúl Castro inició una serie de reformas limitadas ha desaparecido. Aferrarse a la ilusión de que el régimen pueda sucumbir en un futuro cercano es apostar por la fantasía. No es así. El proyecto revolucionario está agotado, pero los mecanismos de supervivencia permanecen. Sin embargo, este afán de sobrevivir está generando un caos y una violencia que atenta no solo contra la población en la isla sino hace dudar sobre un mejor destino para la nación.

 

Cuba sigue siendo una excepción. Se mantiene como ejemplo de lo que no se termina. Su esencia es la indefinición, que ha mantenido a lo largo de la historia: ese llegar último o primero para no estar nunca a tiempo. No es siquiera la negación de la negación. Es una afirmación a medias. No se cae, no se levanta.

 

Cualquier estudioso del marxismo que trate de analizar el proceso revolucionario cubano descubre que se enfrenta a una cronología de vaivenes, donde los conceptos de ortodoxia, revisionismo, fidelidad a los principios del internacionalismo proletario, centralismo democrático, desarrollo económico y otros se mezclan en un ajiaco condimentado según la astucia, primero de Fidel Castro y ahora de su hermano.

 

No se puede negar que en la isla existiera por años una estructura social y económica —copiada con mayor o menor atención de acuerdo al momento— similar al modelo socialista soviético. Tampoco se puede desconocer la adopción de una ideología marxista-leninista y el establecimiento del Partido Comunista de Cuba (PCC) como órgano rector del país. Todo esto posibilita el análisis y la discusión de lo que podría llamarse el “socialismo cubano”.

 

Sin embargo, este análisis es sólo un aspecto necesario a la hora de comprender una realidad simple y compleja a la vez.

 

Como en la música popular cubana: la melodía es pegajosa y fácil de repetir, pero el problema es con el ritmo, que por momentos se construye a partir de sucesiones de notas a contratiempo, síncopa en la música y el habla. También en la política: la Guantanamera como nuestra definición mejor.

 

Siguen aumentando las demostraciones que evidencian que una parte de la población cubana está dispuesta a realizar actos violentos ―o no sabe controlar sus pasiones e instintos― y reacciona ante los estímulos más simples. Son los que se prestan a participar en actos de repudio, donde son guiados y controlados por un grupo de agentes represivos. No alcanzan siquiera el grado de profesionales de la violencia: son simplemente matones de ocasión.

 

Tras la desaparición de los Castro, de este estrato de la población cubana saldrán los pandilleros, extorsionistas, abusadores y hasta asesinos que muy probablemente servirán para suplir la demanda de delincuentes y personas violentas, a ser empleados por los diversos grupos dedicados a las actividades ilegales que se teme florezcan en la Isla.

 

No es un florecimiento de hechos delictivos el único peligro que acecha, respecto a estos seres sin escrúpulos que en la actualidad encuentran satisfacción y provecho en participar en los actos de represión.

 

El problema principal es la existencia de un grupo poblacional acostumbrado a vivir bajo un régimen totalitario, que de pronto va a encontrarse incapaz de vivir en libertad, con las responsabilidades que este hecho atañe. Esos que golpean hoy serán los inadaptados de mañana.

 

Enfrentar la necesidad urgente de crear los medios que posibiliten los cambios, para que el cubano devenga en un individuo capaz de enfrentar los retos y beneficios de un Estado democrático y una sociedad civil, es tan apremiante como discutir las bases económicas y políticas de la nación del futuro. Conocer cómo piensan y actúan, las personas que por demasiado tiempo han sobrevivido en un país en ruinas, abarca un universo más amplio que las discusiones políticas.

 

Lo que se ha estado fraguando durante los últimos años en Cuba es un escenario extremadamente volátil, que hasta ahora el gobierno de la isla ha logrado controlar con represión y promesas.

 

Todo ello lleva a un aumento de las posibilidades de un estallido social. De producirse esta fragmentación violenta ―y con independencia del resultado de la misma― el uso del caos y la fuerza como solución de los problemas se convertiría en un patrón de conducta adoptado por una parte de la población de la isla, que limitaría o impediría el avance social.

La ley y la trampa de ETECSA

Walfrido López R.

4 de julio de 2013

 

Desde hace varias noches no puedo pegar los ojos y solo doy vueltas en la cama. La causa principal es mi visita, hace un par de semana atrás, a varios locales de ETECSA para probar y evaluar su nuevo servicio NAUTA para conectarse a INTERNET. He publicado un par de post anteriormente pero es evidente que no han sido suficientes para yo poder dormir tranquilo. Una de las causas es que después de analizar  con más tiempo los procedimientos 2.1.1 y 2.1.2 publicados en el post “Evaluación PNI de los servicios INTERNET NAUTA de ETECSA en Cuba”, y relacionados ambos con la privacidad y tratamiento de datos personales de los clientes, tengo la sospecha que la empresa ETECSA estaría violando las nuevas leyes cubanas de comercialización del servicio de acceso a INTERNET con NAUTA. El fundamento de mí sospecha se basa en que después de volver estudiar más detalladamente las nuevas resoluciones No. 197/2013 del Ministerio de Comunicaciones y No. 182/2013 del Ministerio de Finanzas y Precios, dictadas para regular todo lo relacionado con el nuevo servicio NAUTA, descubro que en ninguna parte de los textos se plantea que durante el proceso de comercialización de tarjetas temporales de NAUTA se le pida al cliente la identificación personal para que este pueda acceder al al servicio, entregar los datos personales, y mucho menos que los datos entregados sean almacenado en algún soporte por parte de ETECSA o terceros. Y esto sería muy preocupante no solo porque ETECSA estaría violando las leyes cubanas, sino también porque el monopolio de las comunicaciones en Cuba tiene un oscuro pasado y un sucio presente relacionado con la mala protección de los datos personales e invasión de la privacidad de sus clientes.

 

Muchos cubanos conocen que en años recientes han existido varias fugas de información confidencial de miles de clientes ETECSA sin que la empresa nunca asumiera su responsabilidad corporativa en un comunicado, diera explicaciones públicas de esta violación de seguridad, o procurara alguna compensación a los usuarios afectados por los datos personales filtrados. Los datos expuestos sirvieron para que informáticos inescrupulosos crearan aplicaciones de “Guías no oficiales de ETECSA” en sus versiones para Windows, IOS (iPhones) y Androi (Samsung, LG, HTC, Sony, etc). Estas aplicaciones son fáciles de conseguir en Revolico o en el mercado underground porque se venden por 1 CUC (1 USD) en muchos de los negocios privados de reparación de celulares que florecen por toda la isla.

 

Por otra parte, es conocida dentro de Cuba y en todo el mundo la estrecha colaboración de ETECSA con el Ministerio del Interior (MININT) para la represión a opositores y disidentes. Tal vez el caso más documentado fue la escandalosa operación Voto de Silencio ejecutada por el MININT durante la visita del Papa Benedicto XVI a Cuba entre el 26 y el 28 de marzo del 2012. Durante esa semana la empresa ETECSA desvió a números telefónicos del MININT las comunicaciones privadas de blogueros y periodistas independientes, abogados, activistas sociales y pro Derechos Humanos, y otros miembros de la sociedad civil. Esa colaboración ha sido fuerte durante los veinte años que ha existido ETECSA, pero en los últimos tiempos se ha estrechado mucho más, sobre todo desde enero del 2011 cuando sus accionistas italianos de TELECOM le vendieron su parte a RAFIN S.A. por 700 millones de dólares, pasando a ser el gobierno cubano el dueño del 100% de las acciones de ETECSA. Tal alto es el grado de colaboración de ETECSA con la represión, que muchos comentan que la empresa estatal socialista hoy tiene la triste función de ser el brazo tecnológico del MININT, y tienen razón. Es fácil comprobarlo si paseas por la ciudad y te fijas que sus postes telefónicos sirven para la instalación de decenas de miles de cámaras domos de vigilancia. Pero muchos no saben porque no ven más allá o no conocen la otra historia oculta de ETECSA: desde sus oficinas se realizan escuchas telefónicas, arbitrarios cortes de comunicación, sus autos sirven para trasladar personal militar y paramilitar durante operativos de represión y seguimiento, las antenas de su empresa de servicios móviles CUBACEL sirven para la triangulación, localización y seguimiento de “objetivos”, y desde sus servidores se realiza la intersección, revisión y censura de mensajes SMS de muchos miembros de la sociedad civil. Estas operaciones son ejecutadas por ETECSA, el MININT y otros órganos de represión sin orden judicial porque muchas veces el gobierno cubano invoca la “amenaza al orden establecido” o el “peligro de seguridad nacional”, dejando de esta manera totalmente indefensa a la sociedad civil al no existir herramientas judiciales con las que se pueda enfrentar en tribunales a la maquinaria gubernamental, el MININT o ETECSA.

 

He tratado de explicar, y lo seguiré haciendo una y mil veces en privado o tantos espacios públicos tanto como sea  posible, que cada persona es la máxima responsable del cuidado y protección de sus datos personales en INTERNET u otras plataformas informáticas. Es por eso que todos los miembros de la sociedad civil cubana deben estar conscientes que muchas vidas, familias y proyectos por una futura Cuba democrática pueden peligrar o truncarse si por descuido, incapacidad o desconocimiento informático se filtra alguna información que se debería tener bajo absoluto control. Todos estamos de acuerdo del alto nivel de empoderamiento que puede alcanzar la sociedad civil a través del acceso a INTERNET y las nuevas tecnologías, pero es necesario que también todos los involucrados en este importante tema estén consientes del alto riesgo que implica trabajar con ellas. Es bueno también ser realistas y tener conciencia que el MININT, la seguridad del estado y los servicios de inteligencia cubanos tienen todos los conocimientos, la tecnología, los softwares, los medios materiales y los recursos humanos necesarios para estudiar la información que dejan nuestras trazas en las oficinas gubernamentales o en cualquiera de los cibercafés estatales de acceso a INTERNET, y aprovecharse de cualquier vulnerabilidad para acceder a nuestros servicios de email y usuarios de redes sociales. Por eso es necesario que cada uno de nosotros sea consciente de este peligro y maneje lo mejor posible este riego. Para lograr ese objetivo es necesario que cada uno de nosotros estudie, se supere y se actualizarse de forma periódica con las noticias actualizadas sobre el manejo de los equipos informáticos, la ofimática, la seguridad de la información, la navegación en INTERNET y las más novedosas tecnologías de la información.

 

Después de leer este post y otros relacionados, en verdad… ¿Vas a conectarte a INTERNET a revisar tu servicio de email, publicar en tu blog y acceder a Facebook o Twitter desde una computadora ubicada en un cibercafé de NAUTA ETECSA?

 

PD: Por lo actual y trascendental del tema relacionado con la violación de la privacidad de las comunicaciones personales en Cuba, le recuerdo a todos los factores involucrados en cualquier infracción de este tipo lo que plantea la CONSTITUCIÓN DE LA REPUBLICA DE CUBA sobre este importante tema:

 

Artículo 57o.- La correspondencia es inviolable. Solo puede ser ocupada, abierta y examinada en los casos previstos por la ley. Se guardara secreto de los asuntos ajenos al hecho que motivare el examen.

El mismo principio se observará con respecto a las comunicaciones cablegráficas, telegráficas y telefónicas.

 

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NAUTA navega por el mal camino de ETECSA

Cuba y el “modelo cubano” de INTERNET

Crece poder de jueces municipales

René Gómez Manzano

1 de julio de 2013

 

El pasado 25 de junio fue publicado el Decreto-Ley 310, que modifica determinados artículos del Código Penal y de la Ley de Procedimiento Penal. La nueva disposición deberá entrar en vigor el primero de octubre próximo. Lo anterior pudieron saberlo quienes tienen acceso a internet, pues todavía no ha salido a la venta el correspondiente número de la Gaceta Oficial.

 

Lo primero que habría que recalcar es que estos cambios no constituyen la reforma general de la ley de represión criminal, sobre la cual se ha venido hablando desde hace años. Así lo plantea el único Por Cuanto del Decreto-Ley, donde se aclara que éste se dicta “a reserva del trabajo que se ejecuta de manera integral en el estudio de la legislación penal”.

 

Como jurista, opino que la modificación más importante es la que se le hace a los artículos 8 y 9 del código de trámites de lo criminal: De acuerdo con lo ahora dispuesto, los delitos sancionables con penas de entre tres y ocho años de privación de libertad dejarán de ser conocidos por los tribunales provinciales para pasar a los municipales.

 

Resultan muy ilustrativos los cambios que a lo largo del tiempo ha introducido el régimen castrista en este tema. Los antiguos juzgados correccionales, que eran los encargados de la represión de menor nivel, estaban facultados para imponer castigos de hasta sólo seis meses de prisión, o multas no mayores de 180 cuotas.

 

Ya bajo el régimen castrista, esos órganos judiciales unipersonales fueron reemplazados por otros de carácter colegiado: los tribunales municipales, a los que se autorizó de inicio a conocer de los delitos sancionables hasta con nueve meses. Después, ese límite se aumentó a un año. Más tarde, a tres. Y ahora se les acrecienta la competencia hasta los ocho años.

 

Resulta conveniente aclarar que el hecho de limitar los jueces correccionales al conocimiento de las infracciones penales leves tenía su justificación: Como es lógico, se trataba de los funcionarios judiciales más jóvenes y de menor experiencia. Al restringir sus atribuciones, se reducían los peligros de que ocasionaran perjuicios con cualquier decisión incorrecta.

 

Este razonamiento sigue siendo válido. Sin embargo, el régimen comunista, ante el aumento exponencial de los delitos que se cometen, ha hecho caso omiso de este aspecto de la cuestión, y —como queda dicho— ha aumentado —¡nada menos que 16 veces!— la duración de las sanciones de privación de libertad que esos jueces inferiores pueden imponer.

 

De manera análoga, se ha ampliado una potestad de la policía: la de, en vez de someter un caso al tribunal municipal, aplicar una multa administrativa. Antes, esto sólo podía hacerse cuando la sanción imponible era de hasta un año de prisión; ahora se ha ampliado este límite hasta los tres años. No obstante, en estos nuevos casos, “se requiere la aprobación del Fiscal”.

 

La otra modificación importante es que si el tribunal juzgador considera que la pena prevista en el Código para la modalidad agravada de un delito, aun en su límite mínimo, es demasiado severa, puede fijar un castigo enmarcado en la modalidad básica del mismo delito. Esta regla ya regía, pero en virtud de una instrucción judicial. Ahora adquiere rango de ley.

 

Hasta aquí, los cambios más sustanciales introducidos por el Decreto-Ley 310. Hay otras modificaciones, pero que son más bien de detalle. Por ejemplo, se dispone que las decisiones que afecten a los ciudadanos presos sean tomadas no por el tribunal sancionador, sino por el que corresponde al centro penitenciario en que se encuentren.

De manera análoga, en los casos de reos no privados de libertad, se establece que las disposiciones que modifiquen su status legal también dejen de ser tomadas por el órgano jurisdiccional que los condenó; esa función las asumirá el tribunal correspondiente a su domicilio.

 

Hay algunas otras innovaciones secundarias: Se aumenta de cinco a diez días el término para establecer el recurso de apelación contra las sentencias que dicten los tribunales municipales en casos sancionables con más de un año de cárcel. Se faculta a estos mismos tribunales para ejecutar las sanciones “que no conlleven internamiento”.

 

Si se me pidiera calificar estas reformas, las describiría como contradictorias. Por una parte, hay medidas que tienden a reducir el alarmante número de encarcelados (como la que amplía las posibilidades para imponer multas administrativas). Por la otra, preocupa que los tribunales municipales puedan imponer sanciones de hasta ocho años de prisión. Deberemos mantenernos atentos a la práctica en la aplicación de estas nuevas disposiciones.

Aduana humilla a opositores que regresan

Leonardo Calvo Cárdenas

1 de julio de 2013

 

Activistas del Comité de Ciudadanos por la Integración Racial (CIR) y el Proyecto Nuevo País, que recorrieron ciudades de los Estados Unidos, en visita de trabajo, fueron víctimas –tanto a la salida como a la entrada de Cuba– de la arbitrariedad de la Aduana General de la República.

 

Por orientación expresa de la policía política, los opositores Manuel Cuesta Morúa, Juan Antonio Madrazo Luna y quien escribe recibimos un trato humillante, que incluyó la retención ilegal de objetos personales.

 

En Cuba solo se pueden escuchar referencias negativas y testimonios casi increíbles sobre los desmanes y atropellos que estos funcionarios públicos cometen contra los ciudadanos. Una larga saga de corrupción descarnada, latrocinios y abusos contra pasajeros y clientes han hecho rodar por el piso el prestigio y la imagen de esta institución, encargada de salvaguardar valores importantes para el Estado y la sociedad en las fronteras de la nación.

 

Cada cubano que debe enfrentarse a esto está consciente de que puede ser objeto del maltrato o escamoteo de los funcionarios. Casi al borde del infarto quedó un señor cuando se enteró de que con solo el diez por ciento de los ochocientos dólares que pagó “por detrás” hubiera logrado evitado la incómoda revisión.

 

Muchos cubanos que han regresado pueden dar cuenta de las prácticas abusivas de estos funcionarios, que por otro lado tratan a los visitantes foráneos con respeto y normalidad.

 

Con nosotros se ensañan con decomisos arbitrarios, o, en su defecto, la petición descarada de regalos (léase extorsión).

 

Son muchos los oficiales que, a lo largo de muchos años, han pasado directamente a la prisión, pero la corrupción y el abuso continúan. La supuesta justicia no elimina las causas del problema.

 

Los trabajadores de la Aduana, al igual que todos los cubanos, son muy mal pagados.

 

También, como es de esperar, los oficiales de frontera funcionan como instrumento de la policía política.

 

Activistas del CIR y Nuevo País debieron interponer recursos de reclamación por pertenencias retenidas, por orden de la policía política. Después de varias muestras de inconsecuencia profesional, las fuertes denuncias aconsejaron a las autoridades devolver objetos personales.


Los demás activistas que nos acompañaron a recoger nuestras pertenencias, fueron testigos del malestar generalizado de muchos otros pasajeros, que se quejaban abiertamente por la manera en que habían sido despojados de sus propiedades.

 

Ese día, varios oficiales de la policía política, disfrazados de aduaneros, entraron al aeropuerto, supuestamente para dirigir otra operación encubierta de violación de derechos universales.

 

Solo la recomposición estructural y ética de la nación hará posible que nos sintamos protegidos. Mientras tanto, la Aduana seguirá siendo un reflejo del país.

 

Montesinos3788@gmail.com

Menos trabajo para la Fiscalía y más para la policía

Yaremis Flores

28 de junio de 2013

 

El pasado 25 de junio, la Gaceta Oficial de la República de Cuba finalmente publicó el Decreto Ley 310, con las anunciadas modificaciones al Código Penal y a su Ley de Procedimiento.

 

Según el Consejo de Estado, la necesidad de procurar mayor efectividad en la prevención y el enfrentamiento al delito demanda la actualización de las disposiciones legales vigentes.

 

Sin embargo, esto resulta contradictorio si analizamos el aumento de facultades de los policías, aún y cuando no demuestran en su trabajo diario, ni capacidad ni preparación alguna en materia de derechos humanos; desconocen los principios elementales del derecho y los estándares de conducta de los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley.

 

Con las nuevas disposiciones, los policías están facultados para resolver administrativamente, mediante la imposición de multas, delitos que antes eran tratados por jueces y con penas hasta 3 años de privación de libertad.

 

Tal y como se publicó en la Gaceta Oficial, un policía podrá conocer de esos asuntos siempre que “del hecho se evidencie escasa peligrosidad social, tanto por las condiciones personales del infractor como por las características y consecuencias del delito”. Aunque aclara que en “los delitos sancionables de uno a tres años de privación de libertad, se requiere la aprobación del Fiscal”.

 

En la práctica, la fórmula menos trabajo para la Fiscalía y más para la Policía, no asegura que el requisito de aprobación del Fiscal no sea un “mero trámite”.

 

Entre los delitos más alarmantes que posiblemente no llegarán a conocimiento de los tribunales se encuentran los de lesiones graves, cometidos por conductores de vehículos; la simple tenencia de drogas como cocaína y marihuana, y la tenencia de explosivos y amenazas con armas de fuego.

 

También podrán ser únicamente castigados, con multa, delitos en los que por lo general las víctimas son mujeres, vulnerando sus derechos. Entre ellos, podrán quedar impunes los que ejerzan violencia sobre una embarazada y ocasionen aborto y los que comentan abusos lascivos o tocamientos sexuales en otra persona.

 

Además, los agentes resolverán delitos que afectan directamente los derechos del ciudadano, como el de libre emisión de pensamiento (libertad de expresión y prensa), libertad de cultos (derecho a la libertad religiosa) y discriminación por motivos de raza, sexo, orientación sexual y otros.

 

Modificaciones estimulan la corrupción en uniformados

 

Con la reforma, los uniformados también están facultados para decidir en asuntos en los que existe conflicto de intereses. No se puede asegurar su imparcialidad cuando el infractor es un funcionario público o un propio colega. Así sucede en el supuesto de que un agente no ponga en libertad a un detenido en el plazo legal, o cuando un funcionario abuse del cargo.

 

El Consejo de Estado no enunció, como uno de los motivos de la reforma, la necesidad de “aliviar” la carga de trabajo de los tribunales ante el aumento de competencia dispuesto. Pues ahora los tribunales municipales populares son competentes para conocer, además de los índices de peligro, los delitos sancionables desde tres hasta ocho años de prisión, que antes resolvía el Tribunal Provincial.

 

Al gobierno cubano se le ha recomendado en organismos internacionales, como la ONU y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, que atempere su ley penal con las normas internacionales.

 

No obstante, las modificaciones, lejos de cumplir con expectativas de la disidencia y población en general, estimulan la corrupción en la Policía y la impunidad de hechos graves tipificados como delito. No se hizo ninguna mención a la tardía intervención del abogado en los procesos penales, ni se derogó ningún delito de los que contravienen los estándares internacionales y el respeto de los derechos humanos.

 

Aún el diario Granma, principal medio de prensa en la isla, no ha informado esos cambios, aunque afectan directamente a los ciudadanos.

Ángel Santiesteban cumple hoy 4 meses encerrado

       

Hoy, 28 de junio de 2013, Ángel Santiesteban-Prats cumple 4 meses de encierro en el campo de concentración castrista 1580, El Pitirre, San Miguel del Padrón, La Habana. Han sido 121 días con sus noches en los que no han logrado siquiera hacerle menguar su optimismo.

 

Los mismos 4 meses en que la dictadura del pequeño de los Castro, ha seguido manchando con más sangre su propio prontuario, aquel por el que más temprano que tarde, deberá rendir cuentas a la Justicia. Y a ese examen acudirán desde los más serviles esbirros hasta los más “altos” responsables de la violación sistemática de todos los derechos humanos, civiles y políticos, que mantienen prisioneros a todos los habitantes de la Isla, en sus calles como si fueran libres, en sus campos de concetración, doblemente vulnerados.

 

En estos 4 meses, el sistema carcelario fue “visitado” por una corte de eunucos disfrazados de periodistas, que salieron a decirle al mundo lo bellas, dignas, limpias y felices que son esas mismas prisiones que sirven de hoguera de la libertad, de la dignidad, de la humanidad.

 

La Isla de la Felicidad que secuestraron los hermanos Castro y a la que sometieron como si de su propio feudo se tratara, es en realidad La Isla Cárcel. Nunca en la historia de la humanidad se conoció una geografía tan limitada con semejante concentración de cárceles. ¿Es posible que tan pocos se pregunten a qué se debe que Cuba tenga 545 prisiones en una geografía cuya extensión apenas 110.860 kilómetros cuadrados? A modo de referencia, España tiene 504.645 kilómetros cuadrados y 113 centros penitenciarios

 

Tras ese tour de periodismo “militante” que realizaron a las cárceles el 10 de abril, el sistema penitenciario fue puesto a exámen por el Consejo de Derechos Humanos el 1 Mayo , y a pesar de haber recibido 292 recomendaciones, la embajadora del régimen ante la ONU en Ginebra, Ana Rodríguez Camejo, tuvo el descaro de decir que aceptará “un amplio grupo de recomendaciones” y que las implementará, “según nuestras posibilidades y la evolución de las circunstancias” y que hay un “grupo minoritario (de recomendaciones) inaceptables para Cuba”, por ser “sesgadas y politizadas” y cuyo objetivo central es “desacreditar” el sistema. Por supuesto que se refiere al tema de los presos políticos, cuya existencia se demuestra por sí misma con esa afirmación, y con los datos objetivos sobre los mismos que recogen las organizaciones de derechos humanos que sí dan la talla.

 

Actualmente en Cuba hay 93 presos políticos encerrados, más los 16 que se encuentran con licencia extrapenal. Esta cifra indica que se ha duplicado el número de ellos en el último año. También ha crecido de manera grotesca el número de detenciones arbitrarias- alcanzando un aumento del 50%, ni más ni menos, desde el año anterior.

 

Estos son datos objetivos y demostrados empíricamente, con fotografías y videos que afortunadamente -gracias a las nuevas tecnologías- salen de Cuba para mostrarle al mundo y reafirmar lo que todos sabemos: que Cuba está sumida bajo una cruel dictadura que ya pasó el medio siglo de existencia, pero -y más importante aun- es que cuantos más presos políticos encierran y cuantas más detenciones arbitrarias realizan, es porque mayor es el descontento del pueblo con el tirano y con la vida miserable a la que lo condenó. El aumento de la represión y de los abusos es directamente proporcional a las ansias de justicia, libertad y dignidad que tiene Cuba. Les está pasando como a la Iglesia en el medioevo con las brujas: cuantas más quemaban, más les aparecían. El camino de los cubanos a la libertad es sin retorno, y su llegada está cada día más cerca.

 

Ángel es uno de los tantísimos presos políticos en Cuba; pero también es el único escritor encarcelado en todo el continente americano por razones políticas, lo cual es una vergüenza mayúscula para el régimen castrista.

 

Ángel decidió comprometerse con su patria y defender los más altos valores de la condición humana, regido por los principios martianos. Decidió hacerlo sabiendo que no sólo perdería sus “privilegios” como intelectual de la oficialidad, sino que también sabía que posiblemente perdería su libertad, tal como ocurrió.

 

Hoy vive su encierro con una dignidad que pocos pueden llevar y que sulfura enormemente a sus carceleros.

 

Una vez más responsabilizamos a Raúl Castro Ruz por la integridad de Ángel y de todos sus compañeros que también sufren acoso y castigo por estar cerca y ser solidarios con él. Los ojos del mundo están sobre Ángel y sobre quienes lo acosan, lo intimidan, lo amenazan y lo maltratan. Los tiempos han cambiado y ya no pueden evitar más que la verdad se conozca. Y aquí estamos -sus familiares y amigos- siempre atentos para denunciar por todo lo alto el más mínimo atropello.

 

También le reiteramos a Raúl Castro que Ángel no solo no debería estar preso sino que además está en una prisión de máxima seguridad a la que fue llevado de forma violenta e ilegal. Exigimos que sea restituido a La Lima hasta tanto recobren el sentido común y entiendan que deben concederle un juicio con todas las garantías procesales que jamás tuvo. Deben entender que todas las pruebas del juicio amañado y el expediente completo están a merced del mundo, lo que deja al sistema judicial castrista a nivel del piso ante el concierto de las naciones civilizadas.

 

Y exigimos la libertad para todos los presos políticos. Responsabilizamos a Raúl Castro por la vida e integridad de todos ellos y le recordamos que a él también le dio vida una mujer, que esté donde esté, contempla con vergüenza y asco lo que le está haciendo a la valerosa Dama de Blanco Sonia Garro.

 

Los familiares y amigos de Ángel Santiesteban-Prats

Filmar no es ilegal en Cuba pero…

Daisy Valera

27 de junio de 2013

 

Mis amigos y conocidos españoles tienen una opinión unánime sobre la policía cubana que es aproximadamente: todos tienen cara de buenos en comparación con los maderos.

 

Después de escuchar varias anécdotas estuve bastante de acuerdo.

 

En mi último mal roce con los “agentes del orden público” recordé las noticias sobre la policía de España y el uso de cámaras de vídeo en las manifestaciones.

 

Conversaba con Eddy y algunos amigos en el parque de G y 23, de pronto un muchacho (que parecía estar mentalmente inestable) comenzó a proferir insultos y lanzar patadas posiblemente a un contrincante imaginario.

 

A los pocos segundos una turba entre sorprendida y alegre rodeaba al chico como único entretenimiento disponible. Un joven que parecía conocerlo intentaba calmarlo con bastante éxito.

 

La aglomeración fue interpretada como un ataque por la increíble cantidad de policía que se aburre en G las noches de los fines de semana y que generalmente termina recreándose (y justificando su salario) poniendo multas a los que pisan el césped por accidente.

 

Aunque para detener el espectáculo y ayudar a salir al chico del centro de la calle hubiera bastado seguir dialogando, dos de los policías (evidentemente aburridos) terminaron tirándolo al suelo, sujetándole las manos y poniéndole una rodilla sobre la espalda.

 

Demostración gratis de artes marciales e inicio del desorden público.

 

El chico trataba de zafarse y uno de los policías seguía pegándole la cara al piso desoyendo sus lastimosos gritos de –se lo voy a decir a mi doctor. La multitud también había empezado a gritar a coro –abusadores.

 

Eddy sacó su Ipod e intentó grabar lo que sucedía. Al verlo algunos adolescentes lo animaron a seguir filmando.

 

Casi al instante uno de los policía agarró a Eduardo por el brazo y comenzó a interrogarlo y a amenazarlo con llevárselo detenido.

 

Gracias a que el mismo policía intentaba contener a la multitud que crecía y se estrechaba a su alrededor fue que pudimos arrebatarle a Eddy y apartarnos rápidamente.

 

El año pasado, el ministerio del interior del estado Español intentó aprobar una ley que prohibía filmar a los policías mientras ejercían su labor*.

 

De inmediato se pronunciaron varios sectores de la sociedad civil**, incluyendo diversas asociaciones de juristas*** que la calificaron como inconstitucional o que disuadía el derecho a la manifestación. La iniciativa no cuajó.

 

En el código penal cubano no existe el delito de grabar a la policía pero Eduardo se salvó de dormir en los calabozos de Zapata por pura suerte.

 

Para contener la creciente impunidad de la Policía Nacional Revolucionaria es evidente que se necesita una sociedad civil más fuerte e informada.

 

Los policías cubanos tienen cara de buenos pero demasiada confianza e imaginación: cuando no existe la ley, la inventan, seguros de que no habrá consecuencias por ello.

 

 

*Interior pondrá coto a la difusión en internet de imágenes que dañen a policías Policías sin imágenes, fuente de abusos

 

**15-M: Grabar imágenes de presunta brutalidad policial no es ilegal, sino una obligación cívica respaldada por la ley

 

***La prohibición de difundir imágenes de policías, vista por los jueces

Vigencia

Alejandro Ríos

26 de junio de 2013

 

A poca distancia donde acaba de atracar el crucero en un puerto de Bahamas, numerosos cubanos libres disfrutan de sus bien habidas vacaciones, luego de meses de dura labor, mientras otros compatriotas balseros, apresados por las autoridades de la isla, son pateados impunemente por un individuo con uniforme militar.

 

A los detenidos, tirados en el piso se les ha tapado la cabeza con bolsas de plástico y reciben cubos de agua junto a los golpes.

 

Las imágenes han salido subrepticiamente del centro de detención, cortesía de uno de los detenidos que las ha filmado con su teléfono.

 

El hombre vestido de militar no solo les lacera la piel a los presos indefensos, sino que les grita improperios racistas: “No queremos a los cubanos en la isla y los vamos a seguir maltratando si llegan”. Las autoridades de Bahamas niegan que esto haya ocurrido y prometen investigar.

 

En Cuba hay estudiantes bahameños haciendo carreras y al gobierno no le conviene interceder en el asunto de la violencia que las autoridades de la isla turística vecina desatan, desde hace años, sobre los nacionales que la diplomacia cubana debiera proteger.

 

Los que abandonan el predio de los Castro son apátridas, personas que carecen de nacionalidad, de acuerdo al Diccionario de la Real Academia Española, y el embajador cubano dice que ellos mismos se han propinado los golpes.

 

De hecho, parece haber una suerte de hábito malsano entre ambos gobiernos a la hora de partir cabezas inconformes. En las provincias orientales cubanas, lejos de las agencias de prensa extranjeras establecidas en la capital, las fuerzas represivas están lidiando con las protestas de los disidentes locales a pedradas limpias, como en la Edad Media.

 

Por suerte, ante esta carencia, la Unión Patriótica de Cuba, UNPACU, ha hecho de la grabación en video de las tropelías de la dictadura, uno de sus más eficaces instrumentos de denuncia. Registran, puntualmente, la cara más infausta de las reformas “raulistas”.

 

En otro capítulo de las tinieblas que se ciernen sobre Cuba, llama la atención que uno de los italianos que en el año 2010 estuvo en la orgía de Bayamo donde una menor murió de asfixia al ser trasladada ebria en el maletero de un automóvil y luego abandonada en un sitio intrincado del monte, aún con vida, aparece enfundado en la consabida camiseta que muestra la efigie de Ernesto Guevara.

 

Hecho que coincide con otro monstruo haciendo de las suyas entre la infancia cubana con la impunidad que le brinda su estatus de turista extranjero. Este enfermizo anciano canadiense, pedófilo para más señas, ha sido acusado de hostigar sexualmente a niñas hasta de tres años, en ocasiones con el consentimiento de familiares, y en la foto que circula de sus momentos de franca felicidad en Cuba, donde estuvo en numerosas ocasiones, aparece enarbolando la misma imagen que Korda le hiciera a Guevara. Siniestro conciliábulo este que convoca la protección con que el turismo sexual se mueve en la isla y donde la represión campea por su respeto, bajo la sombra de una figura que tanto daño causara a la fibra social de la nación, desde sus fallidos disparates económicos hasta la supuesta hechura de un hombre nuevo.

 

Ahora que documentos del Che han sido admitidos como “memoria del mundo”, según la UNESCO, y aparece otra vez en mala compañía, voy a dejar que sea el propio Ricardo Alarcón, ex presidente del llamado parlamento cubano, quien señale la actualidad del tristemente célebre guerrillero:

 

“Su vigencia ha sido permanente. Transformada en símbolo su imagen recorre el mundo. Se aferran a ella y la levantan quienes buscan cambiar la realidad.”

 

Pedófilos y represores, entre otros rastrojos humanos.

Fuga perpetua

Héctor Antón

21 de junio de 2013

En prever está el arte de salvar

José Martí

 

El deporte aficionado como estratagema política sucumbió. En el camino quedaron muchos atletas, pero son más los que se preparan para desafiar el nuevo futuro

 

Un mediodía candente de 1993, sentado frente al colchón del Centro Voluntario Deportivo José Martí del Vedado, el exluchador Daniel Pozo reconocía: “El deportista cubano es el más honesto del mundo”. Inquietaba esta sentencia de quien fuera una esperanza del pasado, ya sin privilegios, mientras impartía clases a gladiadores en taparrabos con ansias de montarse en un avión. La charla recreaba una lección de autoengaño para esa pléyade de figuras que debían vivir con poco, dedicar sus triunfos al comandante en jefe y rechazar ofertas millonarias supuestamente incomparables al calor de su gente.

 

En ese entonces, los pilares de la quimera pos59 descansaban en ofrecerle la oportunidad de alcanzar el podio olímpico a diamantes en bruto de origen humilde provenientes de todos los rincones de la Isla. Ya el tenis de campo no era el deporte blanco o hobby de la rancia aristocracia habanera. Los gánsters americanos no podían apostar por la sangre hambrienta encima de un cuadrilátero. Un mundo feliz se diseñaba “con todos y para el bien de todos”.

 

El deporte se había convertido en un derecho del pueblo. La masa podría entrar y desahogarse en salones limpios de vestuarios y prendas lujosas. Los privilegios se limitaban a una cuestión de principios. Todo marchaba al compás del sueño compartido por una multitud agradecida. Hasta que un día los hijos pródigos amanecieron transformados en hijos bastardos de la patria, renunciaron a una fidelidad simbólica y comenzó la estampida.

 

Rompiendo el estambre

 

¿Quién fue el primero en incitar la rebelión de los inconformes maniatados por la tiniebla igualitaria del orden revolucionario? El pesista —devenido en célebre fisiculturista— Sergio Oliva, la tenista negra Aleida Spex, un militante-símbolo de la juventud comunista como el primer latinoamericano plusmarquista mundial en levantamiento de pesas Roberto Urrutia, el pelotero René Arocha… Es difícil sintetizar los factores políticos, económicos y humanos que han permitido establecer una marca insuperable: Cuba ostenta el récord mundial de atletas desertores.

 

La tierra natal del esgrimista Ramón Fonst, el ajedrecista José Raúl Capablanca o el boxeador Eligio Sardiñas (Kid Chocolate) ha visto partir a sus titanes del coliseo apelando a todas las vías posibles de escape: desde el artefacto marítimo hasta ganarse la visa estadounidense en una lotería —guardando prisión en la Base Naval de Guantánamo— o disfrazándose de mujer para burlar a los cancerberos del Aeropuerto Internacional José Martí, evidencia de un bastión tan inexpugnable como vulnerable.

 

Se trata de una épica bochornosa que se evoca con una mezcla de tristeza y admiración. Las trampas ideológicas devienen un signo de la esclavitud moderna. Rebasar la línea del horizonte personifica una transgresión emancipadora, alternativa seguida por millares de cubanos que brillan o sobreviven desperdigados por el mundo.

 

Mil y una razones para estar de acuerdo

 

Basta revisitar el documental clandestino KnockoutKuba (2009) para quedar atrapados entre las cuerdas. Darsi Ferrer Ramírez y Manuel Benito del Valle entrevistaron a once glorias del boxeo (y también a sus familiares) que decidieron quedarse en Cuba. Este material tuvo su premier nacional en la sede del proyecto Estado de Sats, bajo un intenso cordón policial, a raíz de la Olimpiada de Londres-2012.

 

El testimonio es amargo. Un espejo de impaciencia que añoran destrozar quienes actualmente demuestran credenciales sobre el ring y ponderan en silencio los éxitos de estrellas fugadas como Joel Casamayor, Guillermo Rigondeaux o Yuriorkis Gamboa, quien antes de escapar llegó a vender a un coleccionista su medalla de oro olímpica ganada en Atenas-2004 para resolver una necesidad familiar.

 

Enrique Regüeiferos batalló contra el cáncer mientras pudo, olvidado en un humilde cuarto de La Habana. Douglas Rodríguez (fallecido en el 2012) vendió los muebles sanitarios de su casa para beber. Ángel Herrera se gana la vida rentando su viejo automóvil a terceros para que se use de taxi ilegal. Tullido de medio cuerpo, el bicampeón olímpico y mundial, entre las cuatro paredes de su apartamento en Alamar, recuerda el tiempo de sus hazañas con orgullo. Mirar hacia atrás es suficiente para evitar una humillación del presente.

 

'Todos aquellos atletas que dieron tantas pruebas de lealtad a su patria ocuparán el lugar digno que les corresponde en la sociedad' (Fidel Castro. La Habana, 4 de mayo de 1999)

 

¿Quiénes tienen la culpa de que estas palabras del “máximo líder” retumben ya como un eco lejano? ¿Quiénes son los que roban, mienten y no aman a Cuba en nombre de convicciones que ocultan en el búnker de su falsa conciencia? ¿Por qué los voceros de la corrupción ajena no informaron sobre la causa de que el Comisionado Nacional de Voleibol Raúl El Mago Diago fuera sustituido de su cargo por supuestas irregularidades financieras? La contracara del deporte cubano es la trayectoria de un rumor que se lee a manera de culebrón detectivesco.

 

Como lo advertía el magíster del absurdo teatral Virgilio Piñera: “Los chismes son más instructivos que la historia almacenada en tomos”.

 

El crimen de una ilusión

 

La caída del Muro de Berlín y el derrumbe del campo socialista marcaron un punto crucial para que el deporte cubano quedara más aislado y solo. El paripé amateur se hizo evidente con la participación de atletas sufragados por el Estado en ligas profesionales. Un amago de apertura que reveló las contradicciones del mecenazgo estatal y su cobro de altos porcientos en las ganancias “personales”. Ello provocó la huida de numerosos voleibolistas rumbo a Europa, donde juegan profesionalmente en Bosnia, España, Rusia o Italia.

 

Sin embargo, existe un porciento notable de atletas que se acogieron al exilio por motivos similares a los del ciudadano común. Querían irse del país, aunque dicha opción les costara abandonar el deporte. Muchos pusieron en peligro sus vidas y las de sus familias cuando la denominada “crisis de los balseros”, en el verano de 1994. No todos abrieron los ojos cuando tenían veinte años, como el lanzador Liván Hernández, ni ostentan hoy cuatro anillos en Series Mundiales de Grandes Ligas como su medio hermano El Duque.

 

Ser víctima de la política no implica transformarse en un político hábil en los ardides del cálculo. Aquí pudieran hallarse los equívocos de quienes ejercen más los músculos que un cerebro maquiavélico. La honestidad (o, mejor dicho, ingenuidad) de una mente ordinaria se revierte en una pistola caliente.

 

Cada paso atrás en el deporte cubano ha venido acompañado del éxodo de sus artífices. Ahí están los ejemplos del baloncesto masculino, el boxeo, el atletismo, la esgrima, la gimnástica o los sobreprotegidos peloteros. Según una estadística oficial: veintiocho lanzadores de la capital han desertado en el último ciclo olímpico. Articular un cuerpo de pitcheo estable se vuelve imposible entre fugas y desencantos. El descalabro de Industriales en la 52 Serie Nacional de Béisbol (2012-2013) no hubiera sido tal de conservar en su nómina a serpentineros como Armando Rivero, Yoán Socarrás, Gerardo Concepción o Antonio Romero.

 

Por su parte, el Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación (INDER) ha establecido un sistema de pago en moneda convertible y estímulos adicionales para quienes lo merezcan por su combatividad política o méritos atléticos. Otra “salida de lujo” es prestar ayuda técnica en terceros países, una negociación controlada por el Estado y vista como tabla de salvación por veteranos “confiables”.

 

Tampoco faltan las estrellas pasajeras o los soplones carismáticos que poseen viviendas decorosas, así como prospectos frustrados sin un garaje donde guardar sus vehículos de la era soviética. A los pejes gordos de la nomenclatura no les interesa el mal de parkinson postpugilístico sufrido por Jorge Luis Romero sin un medio de transporte que lo lleve al hospital. Cinco veces cayó a la lona y cinco veces se levantó Romero ante la pegada demoledora del puertorriqueño Wilfredo Gómez en la final del Campeonato Mundial de La Habana-1974. Qué importa la salud actual de un fidelista consumado por el olvido.

 

En lo que perdura esta agonía, el triunfalismo de los caballeros de la Mesa Redonda no cree en lágrimas. En fecha reciente, el Doctor en Ciencias Pedagógicas Alcides Sagarra presentó en televisión un retablo de “protagonistas mudos” de su legado como entrenador-jefe de la Escuela Cubana de Boxeo. Hicieron acto de presencia el mencionado Ángel Herrera, Félix Savón, Emilio Correa y Armandito Martínez, entre otros. Un muestrario de los avances conseguidos por nuestra robótica en la esfera deportiva.

 

De cara al futuro inmediato

 

Una legión de insignias forjadas en el seno de la revolución se resiste a confiar en impredecibles o tardías rectificación de errores. Resaca de una perestroika materializada en un tonel de vodka añejado por la amnesia.  

 

Con sus audacias y torpezas, los atletas cubanos dan la impresión de corear que la vida es muy corta y el socialismo real (o irreal) demasiado largo. “La gente se cansa” —repite un fanático de la esquina que bebe para olvidar. “Un hombre decepcionado es un posible traidor” —susurra un intelectual de gabinete.

 

Dayron Robles abandonó la selección nacional de atletismo. Su ex-entrenador Santiago Antúnez se acogió al retiro. Luego declaró que Dayron estaba muy disgustado. ¿De qué se resentía el titular olímpico de Beijing-2008? ¿De continuas lesiones o por falta de atención gubernamental hacia su persona? Tal parece una coartada destinada a sobrevolar con fortuna renovados obstáculos. Ojalá que el controvertido vallista y su fiel preparador no terminen ninguneados por el costo de su maniobra, como le ocurrió al saltador de longitud Iván Pedroso, nueve veces monarca del orbe y vencedor en la Olimpiada de Sídney-2000.

 

Un desvío similar al de Robles escogieron los voleibolistas Wilfredo León y Yoandri Díaz, quienes provocaron irritación en las autoridades. Ante el compromiso de la Liga Mundial, les denegaron la baja del equipo y, en represalia, los expulsaron por indisciplina grave. Alguien comentó que todavía no han indemnizado al INDER cuanto se gastó en su formación deportiva.

 

Dayron Robles (Guantánamo, 1986) o Wilfredo El Bebé León (Santiago de Cuba, 1993) encarnan el futuro deseado por jóvenes dispuestos a evadir el soborno emocional de los complejos de culpa, vindicado por sus padres adoptivos o garroteros consecuentes. Ahora deberán sortear los escollos que implica la ejercitación del libre albedrío en el “momento inadecuado” como algo natural, sin considerar el efecto rebote propio de un sistema que calca la relación entre militarismo y deporte en la antigua Grecia.

 

Hay que soltar al talento hecho en Cuba para que se mida en circuitos profesionales y pueda volver sin traumas a casa como lo hacen venezolanos, nicaragüenses o dominicanos. No importa que estos puños y piernas rentadas —y rentables— sientan o no orgullo de representar los colores patrios en campeonatos mundiales y Juegos Olímpicos.

 

Ya no rueda por la garganta esa píldora vencida de que el abrazo de un jefe de Estado o la popularidad se equiparan a millones de dólares capaces de proporcionar una vida y una vejez honorable, nada incompatibles con el cariño de los aficionados. El deporte amateur como estratagema política sucumbió. La Reforma Migratoria implementada por el Gobierno, en vigor desde enero, ofrece un alivio pírrico: los traidores de hoy deberán esperar ocho años para regresar al país como bienvenidos traidólares

Multado con mil pesos el grafitero El Sexto

Ernesto Santana

20 de junio de 2013

 

En comparación con otros actos represivos de las autoridades contra quienes intentan expresarse libremente, lo que le ha ocurrido al grafitero Danilo Maldonado (El Sexto) pudiera parecer “suave”, pero —aparte de que, como sabemos, es difícil calcular el alcance que puede tener la pesada mano del castigo desde que cae sobre alguien que se opone al régimen— siempre será importante oponerse a cualquier violación de la legalidad que esas mismas autoridades, en principio, deben respetar.

 

Claro está que El Sexto no tiene la menor duda de cuáles son sus derechos como artista y como ciudadano, aunque existan leyes para castigar severamente a quienes intenten ejercer su libertad de expresión, pero eso no significa estar dispuesto a aceptar las arbitrariedades que pasan por encima de la propia legalidad establecida y hasta de toda lógica.

 

Danilo Maldonado no fue arrestado siquiera cometiendo el “delito” de exponer sus grafitis por toda la ciudad. Ya eso sería, por supuesto, un asunto defendible de otra manera, aunque partiendo de derechos semejantes. El Sexto fue arrestado por el simple hecho de llevar un spray en un bolsillo. A partir de eso, la policía le hizo un registro en su domicilio y le incautó numerosos materiales y obras. Aunque lo liberaron en poco más que veinticuatro horas, no le devolvieron muchos de los materiales y piezas confiscadas y al final le advirtieron que tenía abierto un proceso cuya causa no revelaron.

 

Ahora, sin especificar el delito cometido, le han impuesto una multa de mil pesos.

 

Antes de eso, no obstante, ya el grafitero había acudido a la Asociación Jurídica Cubana, organización independiente que se dedica, entre otras labores, a asesorar legalmente a los necesitados, no importa si por hallarse bajo acusaciones de índole política o civil, aunque es frecuente que quienes buscan asesoramiento sean personas que no han cometido ningún delito según lo prescrito por la ley, sino que son acusados por la Seguridad del Estado de ciertos “delitos” que los tribunales deben procesar y condenar según les ordenen.

 

En un breve documental realizado recientemente por Claudio Fuentes sobre esta situación de Danilo Maldonado, el abogado Edilio Hernández Herrera, de la mencionada Asociación, explica cómo, dado el hecho de que la multa no procede legalmente, decidieron escoger una opción prevista por la ley: no pagar la multa en el plazo previsto (las setenta y dos horas siguientes) para que entonces las autoridades tengan que llevar a El Sexto ante un tribunal que, como declara el abogado, “es realmente quien, según la legislación cubana, tiene que decidir cuál es el delito y si se le deben devolver sus obras de arte y otros materiales, encausarlo o imponerle una multa”.

 

Pero Hernández Herrera recalca que no existe ninguna definición escrita del supuesto delito cometido por Danilo Maldonado, a quien ni siquiera se le permitió la presencia de un abogado en el momento de la imposición de la multa. No obstante, como advierte el letrado en el video, “lo cierto es que en Cuba hay una disposición legal que es la actitud predelictiva y, con todas esas cosas, ellos pueden ir conformando un expediente predelictivo, que es lo que queremos evitar”.

 

El abogado insiste en que el propósito es “que se cumpla la legalidad, que se haga justicia y que el tribunal sea el que decida si realmente hubo o no delito”, además de que permita la devolución de las obras y los instrumentos incautados sin ninguna justificación legal.

 

Por su parte, en dicho video, Maldonado es explícito en que no paga la multa, ante todo, porque, en caso de pagarla, “yo demostraría que estoy haciendo algo malo, que ser artista es un acto de delincuencia”, y asegura: “Prefiero obligar a los tribunales a que tengan que hacerme un juicio para demostrar en qué y a quién estoy haciendo daño”.

Testimonio de expreso político

sobre infamias de refugiado Raumel Vinajera

El negocio de la exportación de médicos cubanos

Iván García

19 junio 2013

 

En 1988, de manera gratuita, Fernando estuvo año y medio prestando servicios en pleno conflicto civil en Angola, donde para llegar a una consulta en caseríos apartados debía acompañarlo un zapador especializado en desactivar minas terrestres. 25 años después, prepara sus maletas rumbo a Venezuela.

 

Esta vez no hay guerra. El gobierno del General Raúl Castro ha convertido a la medicina cubana en la primera industria de exportación. Un negocio suculento. Los médicos son para Cuba el equivalente al petróleo en Venezuela.

 

Según datos de la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI), en 2011, las desinfladas cajas del Estado ingresaron alrededor de 5 mil millones de dólares solo con el trueque de médicos por petróleo venezolano.

 

En 2003, el gobierno del difunto Hugo Chávez estableció un acuerdo mediante el cual PDVSA envía 105 mil barriles diarios de petróleo. Y La Habana paga con médicos, entrenadores deportivos y asesores militares.

 

Cuando Fernando, médico especialista, viajó en un IL-62M a prestar sus servicios en la selva angolana, el discurso oficial de Fidel Castro era otro. No importaba el dinero. En sus intervenciones, repetía que solo le movía el altruismo y la solidaridad ideológica, conocida por ‘internacionalismo proletario’.

 

Que se sepa, el régimen cubano no empezó a cobrar los servicios médicos hasta después de 1991, cuando el comunismo soviético dijo adiós. Al cortarse el caudal de rublos, petróleo y materias primas que llegaban desde Moscú, Cuba entró en una crisis económica estacionaria.

 

La Unión Soviética sufragaba los gastos militares en la isla. Bastaba hacer una llamada al Kremlin y obtener créditos financieros. Fidel Castro no solo utilizó la subversión para exportar su revolución guerrillera. Un día cualquiera, con el presupuesto nacional, construía una escuela en Kingston, Jamaica. O a Nicaragua le regalaba un central azucarero.

 

Daba igual, el dinero no salía de su bolsillo. Pero con la estruendosa caída del Muro de Berlín y la desaparición de la URSS, la subvencionada Cuba tuvo que adaptarse a los nuevos tiempos.

 

Las exportaciones cayeron en un 40%. La producción de azúcar en un 70%. Solo quedaba el turismo, que genera algo más de 2 mil millones de ganancias. Y las remesas familiares, una industria que entre dinero y paquetes enviados y los gastos de cubanoamericanos en sus viajes a la isla, mueve cerca de 5 mil millones de dólares al año.

 

Pero lo que aporta más billetes verdes al PIB es la exportación de servicios. No se tienen a mano todas las cifras. Carlos, economista, cree que “solo en prestación de servicios médicos a los países del ALBA (Venezuela, Ecuador, Bolivia y Nicaragua), el monto se aproxima a 10 mil millones de dólares anuales”.

 

Se calcula que actualmente unos 40 mil médicos, especialistas, enfermeros y técnicos, entre otros, prestan servicios en 60 países de los cinco continentes. Las facultades de medicina de las universidades cubanas preparan hasta 5 mil galenos anuales. Una producción en cadena. Altamente rentable.

 

A la mayoría de ellos se les paga entre 2 y 3 mil dólares mensuales. Aunque hay naciones como Sudáfrica que doblan esas cifras. El régimen se embolsa el 95% de cada salario.

 

Recientemente, Brasil anunció la contratación de alrededor de 6 mil médicos cubanos para trabajar en zonas rurales y deprimidas del país. En un comunicado, el Consejo Federal Médico brasileño tildó de “irresponsable” la propuesta y cuestionó “la calidad técnica y ética” de los profesionales de la isla.

 

La presión de los galenos brasileños dio marcha atrás a la oferta. Y el gobierno de Dilma Rousseff decidió entonces contratar médicos españoles y portugueses, por considerarlos más calificados.

 

La medicina en Cuba no goza de buena salud. Esta situación, hasta el momento, no ha incidido en las favorables estadísticas. El promedio de vida es de 78 años. Y en 2012 la tasa de mortalidad infantil fue de 4,6 por cada mil nacidos vivos, la más baja de las Américas.

 

Pero muchos hospitales están derruidos, el equipamiento deficiente y el personal mediocre. La política de exportar médicos en serie provoca malestar entre los cubanos. Oneida, ama de casa, dice que los especialistas de nivel escasean. “En el policlínico donde me atiendo, la consulta de dermatología se ha reducido a una vez a la semana, por falta de dermatólogos. Ningún hospital habanero tiene cuerpo de guardia de dermatología. Los que atienden son estudiantes extranjeros, pero su calidad deja que desear. La mayoría de médicos reconocidos están en ‘misiones’ (trabajando en el exterior)”.

 

Según el Consejo Médico brasileño, el 94% de los galenos cubanos y bolivianos graduados en Cuba que en 2012 se sometieron a pruebas de validación de sus títulos para ejercer la medicina en Brasil, suspendieron los exámenes.

 

Más de 5 mil médicos cubanos han desertado de las misiones internacionalistas. Debido al escaso rigor de muchos profesionales de la salud en Cuba, algunos doctores y especialistas que deciden abandonar su patria optan por trabajar de asistentes o enfermeros en Estados Unidos.

 

“Revalidar el título en Estados Unidos es una ardua tarea. Son muy rigurosos. Cuando uno vive allí se da cuenta que nuestra formación médica presenta demasiadas lagunas. A mí no me va mal. Mientras aprendo el inglés, trabajo en una clínica privada de enfermero. Pagan bien”, confiesa Eduardo, residente en Miami hace dos años.

 

Fernando, el médico que hace 25 años estuvo en Angola, reconoce que la calidad ahora no es la mejor. “Los motivos varían. Desde no tener acceso inmediato a las informaciones especializadas, a pesar de la red nacional Infomed, hasta los bajos salarios y falta de tecnología. Pero no creo que en el mundo abunden los doctores dispuestos a trabajar dos años en sitios remotos por una paga miserable”.

 

En 2012, 68 médicos cubanos murieron en Venezuela. El gobierno chavista los homenajeó desvelando una placa en su honor. “A los colaboradores de la salud fallecidos en tierras bolivarianas durante el cumplimiento de su deber”, dice el bronce incrustado en un hospital de Caracas, como si hubiesen caído en combate. La mayoría de ellos fueron asesinados por la violencia callejera, que solo el año pasado había matado a más 12 mil personas en ese país.

 

¿Por qué entonces se van?, le pregunté a Fernando. “Es la única forma de obtener divisas, practicando abortos, involucrándote en negocios de pacotillas o ahorrando el poco dinero que te pagan y cuando regreses, poder arreglar tu casa y mejorar tu existencia y la de tu familia”.

 

Algunos médicos consultados dijeron que la necesidad económica y no el altruismo, los lleva a trabajar en lugares recónditos y peligrosos. Incluso, a riesgo de perder sus vidas.

El preso político Orlando Rodríguez

en huelga de hambre

18 de junio de 2013

¿UNESCO o UNASCO?

18 de junio de 2013

 

El legado de asesinatos, incitación a la violencia y fracasos del ‘Che’ Guevara, en la ‘Memoria del Mundo de la UNESCO’

 

La colección de manuscritos originales de Ernesto ‘Che’ Guevara fue inscrita este martes en el Registro Memoria del Mundo, de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).

 

La colección, presentada por los Gobiernos de Cuba y Bolivia, contiene 1.007 documentos, correspondientes al período de 1928 a 1967.

 

Los textos contienen la “obra revolucionaria, ensayística, periodística, biográfica y personal, así como su correspondencia con diversas personas, incluida su familia”.

 

La Habana y La Paz argumentaron que los escritos de Guevara “apuntaban a profundizar en el desarrollo desigual del capitalismo, su distorsión y deformación de las estructuras económicas, políticas y sociales internas de la mayor parte de los países de Asia, África y América Latina”.

 

Esa obra es la expresión de un pensamiento profundo que le permitió inyectar a la teoría marxista elementos creadores antidogmáticos y humanistas, por medio de una sistematización conceptual”, añadieron los impulsores de la candidatura.

 

La UNESCO pretende desconocer el extenso historial de asesinatos cometidos por orden del argentino Ernesto ‘Che’ Guevara. Hasta un filósofo izquierdista compatriota de ‘Che’ Guevara lo reconoce, Oscar del Barco expresa: “Creo que parte del fracaso de los movimientos ‘revolucionarios’ que produjeron cientos de millones de muertos en Rusia, Rumania, Yugoeslavia, China, Corea, Cuba, etc., se debió principalmente al crimen. Los llamados revolucionarios se convirtieron en asesinos seriales, desde Lenin, Trotzky, Stalin y Mao, hasta Fidel Castro y Ernesto Guevara”.

 

La UNESCO pretende desconocer también que Ariel Lima, que era menor de edad, fue fusilado por orden del argentino Ernesto ‘Che’ Guevara.

 

La UNESCO pretende desconocer también que en abril de 1967 el argentino Ernesto ‘Che’ Guevara expresó en su Mensaje a la Tricontinental: “El odio como factor de lucha; el odio intransigente al enemigo, que impulsa más allá de las limitaciones del ser humano y lo convierte en una efectiva, violenta, selectiva y fría máquina de matar”.

 

La UNESCO pretende desconocer también que el reglamento militar del grupo guerrillero que el Che Guevara mandó a Salta, Argentina (1963-1964), castigaba la homosexualidad con la muerte.

 

Si alguien duda que el argentino Ernesto ‘Che’ Guevara fue un asesino en serie, le sugiero que haga clic aquí.

El Movimiento Cristiano Liberación denuncia incremento de la represión
Movimiento Cristiano Liberación denuncia
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Aumenta la guerra de la tiranía

contra el pueblo de Cuba.

Disidentes piden apoyo internacional

tras un incremento de la represión en Cuba

14 de junio de 2013

 

Integrantes de la disidencia interna y el Movimiento Cristiano Liberación (MCL) intensificaron sus denuncias contra las autoridades castristas al tiempo que hicieron un llamado a gobiernos democráticos y organizaciones de derechos humanos para que estos condenen la represión interna.

 

El acoso y la política de cero tolerancia ha afectado recientemente a al menos una docena de activistas y miembros del MCL.

 

En la provincia de Las Tunas, agentes de la Seguridad del Estado cubano arrestaron sorpresivamente a Felipe Abreu y Miguel Lázaro. Ambos apoyan abiertamente el llamado “Proyecto Heredia”, una propuesta que se hizo al gobierno cubano para que la sociedad civil pueda viajar sin restricciones.

 

Otro caso es el de Alexander Tamayo Peña, que ocurrió en la provincia de Holguín. Tamayo estaba apoyando una iniciativa de la disidencia pacífica a fines de mayo para fortalecer la difusión y los alcances de El Camino del Pueblo, documento que pide la liberación de los presos políticos, la restitución de las libertades básicas y la convocatoria a una Asamblea Constituyente.

 

Tamayo, de 28 años de edad, fue sancionado bajo el delito de “peligrosidad pre delictiva”. Luego, las autoridades le conmutaron la pena y le ordenaron realizar trabajos “correccionales”. Poco después la orden fue revocada con el propósito de encarcelarlo en la Prisión Provincial de Holguín.

 

Otra situación preocupante es la de Yosvani Melchor Rodríguez, hijo de la activista Rosa María Rodríguez-Gil, del MCL.

 

Rodríguez está detenido en la Prisión 1580, en La Habana. Fue arrestado, juzgado y encarcelado en el 2010 como una forma de presión contra su madre, disidente y activista pacífica, para que abandone sus actividades en el MCL y haga a un lado sus reclamos contra el oficialismo.

 

El 29 de abril la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la Organización de Estados Americanos otorgó medidas cautelares a favor de Rodríguez. Hasta el momento estas disposiciones no se han cumplido.

 

Las denuncias sobre la ola de detenciones injustificadas e intimidaciones contra las filas del movimiento opositor coinciden con la decisión de la familia del fallecido opositor Oswaldo Payá Sardiñas, fundador del MCL, de establecerse en Miami debido a la falta de garantías en la isla y la persecución del gobierno de Raúl Castro.

 

La hija de Payá, Rosa María, retornó a Cuba el 16 de abril tras cumplir una gira internacional. Durante el viaje de dos meses, denunció la muerte de su padre. Asimismo pidió investigaciones independientes ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos en Washington.

 

Mientras tanto, las autoridades cubanas siguen sin dar una solución al caso de Sonia Garro Alfonso, integrante de las Damas de Blanco. Garro, de 42 años, fue detenida violentamente por las autoridades cubanas el 18 de marzo del 2012 junto con su esposo, el activista Ramón Alejandro Muñoz González.

 

Garro fue trasladada recientemente a una celda de castigo en la cárcel de mujeres El Guatao, en La Habana. Tiene problemas renales y requiere atención médica especializada. Su esposo está preso en el Combinado del Este.

 

José Daniel Ferrer García, ex preso de conciencia y portavoz de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), dijo que la represión generalizada, lejos de disminuir, se agrava diariamente.

 

“Aumenta la guerra de la tiranía”, dijo Ferrer.

Santiago Canton,

exsecretario de la CIDH, habla de Cuba

Una ciudadana

Yoani Sánchez

 González pide libertad para cubanos

Rigo Cervantez

7 de junio de 2013

 

Fredi González desea que el gobierne cubano deje llegar a los peloteros a grandes ligas

 

El manager de los Bravos de Atlanta, Fredi González, manifestó este viernes, su deseo de que el régimen que impera en su país natal, Cuba, conceda la libertad para que los beisbolistas puedan, por las vías convencionales, llegar a las grandes ligas a demostrar su talento.

 

“Yo vine de Cuba a los dos años de edad, en 1966, y me gustaría que un día, se pudieran abrir las puertas, que se acabe el comunismo, para que la gente pueda salir, pueda progresar y que todo el talento beisbolístico, pueda llegar a grandes ligas, por la vía legal y que la isla obtenga su libertad”, dijo González a ESPNDeportesLosAngeles.com, en entrevista, antes del segundo duelo de los Bravos ante los Dodgers de Los Ángeles, en Chávez Ravine.

 

El espinoso tema apareció en forma espontánea, cuando el dirigente veterano de siete temporadas como manager en la gran carpa, con Atlanta y con los Marlins de Miami, comentaba sobre las virtudes del novato jardinero de los Dodgers, el cubano Yasiel Puig, uno de los responsables por el descalabro de su equipo, la noche anterior.

 

“Con un solo juego que le he visto en persona, porque en los otros, fue a través del vídeo, el muchacho me ha convencido con sus tremendas cualidades. Batea, tiene poder, buen brazo y va a hacer un buen papel en grandes ligas”, anticipó el timonel de 49 años de edad, quien conduce a los Bravos desde la temporada 2011.

 

González, quien acumula 459 triunfos, y ha sufrido 420 tropiezos como manager de grandes ligas, tiene a los Bravos con una de las mejores marcas del béisbol, 37-23, cómodamente instalados en el tope de la División del Este, en la Liga Nacional.

 

“En principio, hay que decir que los Nacionales han tenido muchas lesiones. Es algo que nosotros hemos aprovechado, ganando juegos”, explicó el sucesor del histórico Bobby Cox, que busca su primer título divisional.

 

“El secreto de nosotros no es ningún secreto, es el pitcheo. Contamos con un magnífico grupo de lanzadores, uno de los mejores de la Liga Nacional”, agregó González, reconociendo, según su propias palabras, algunas de las flaquezas de su novena.

 

“El bateo de nosotros, la verdad, no está espantando a nadie. Pero, si algunos de mis muchachos, que sé que pueden hacer algo mejor, se enrachan, cuidado con los Bravos”, amenazó.

 

Consideró también el oriundo de La Habana, que él, como manager, es el menos responsable del buen momento del equipo. “No, el manager nunca tiene qué ver en los triunfos. Cuando ganamos, me gusta que los muchachos reciban los elogios. Los managers estamos para que nos den de palos, cuando pierde el equipo”, puntualizó.

 

Y para seguir en la parte de arriba de su sector, con todas las pretensiones intactas de poder alcanzar la postemporada, por la vía directa y no vestido de comodín, como lo hicieran los Bravos en el 2012, hay una clave para González:

 

“Lo primero, es poder estar libres de lesiones, porque eso es algo impredecible, que te puede cambiar todo si un día se te lesionan tres abridores a la vez”, destacó.

 

En cuanto a las contrataciones realizadas por la organización para esta temporada, hay una que, ante los ojos del timonel, ha cumplido con las expectativas.

 

“Hemos traído a varios muchachos, pero el mejor es Evan Gattis, alguien a quien nadie conocía, ni en su propia casa. Y míralo, ya tiene 13 cuadrangulares y 33 carreras impulsadas. El esta cachando, pero también lo utilizo como jardinero, de primera base, de lo que sea, con tal de que tenga cuatro turnos al bate”, concluyó el manager de los Bravos.

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Llegó para quedarse

Guillermo Celis

ESPN.com

4 de junio de 2013

 

Yasiel Puig debutó con fuerza con los Dodgers de Los Angeles

 

Aficionados y Fanáticos al “Rey de los Deportes”: Hace casi un año, en una visita a Los Angeles para un Domingo de Grandes Ligas de ESPN, entrevistamos al veteranisimo cazatalentos Mike Brito, quien sin temor a equivocarse afirmaba que su flamante contratación tenía todo para convertirse en uno de los mejores peloteros de todos los tiempos.

 

Tras el debut de Yasiel Puig el lunes por la noche ante los Padres, en un encuentro en el que se fue de 4-2, demostró velocidad y técnica corriendo las bases, y terminó el juego con un tirazo desde la franja de advertencia hasta la primera base para completar una doble matanza espectacular, las palabras de Brito en aquel entonces regresaron a mi mente de forma automática, pues el famoso buscador nos mostró además su propio reporte de escucha, en el que quedaba claro que el cubano era, sin ninguna duda, un pelotero de cinco herramientas.

 

Fue en el 2008 y con el equipo nacional de Cuba en el mundial juvenil, que Puig apareció por primera vez a nivel internacional, llamando inmediatamente la atención de propios y extraños, en un equipo que terminó por ganar la medalla de bronce y en donde, con apenas 17 años de edad, comenzó a demostrar que tenía un potencial enorme por desarrollar.

 

Tras esa especial presentación a nivel internacional, Jasiel tendría una discreta primera temporada en la Serie Nacional cubana con el Cienfuegos, en la que bateó para .276 con 5 cuadrangulares, pero su explosión no tardaría en presentarse, ya que para la campaña 2009-10, terminaría con .330, 17 batazos para la calle, 47 carreras prducidas y 78 anotadas, confirmando ya, desde muy temprano, que era material para Estados Unidos.

 

Lamentablemente, por motivos extra deportivos, la carrera de Puig tuvo que tomar una pausa obligada de dos años, el castigo impuesto por las autoridades de su país una vez que intentó escapar sin éxito de la isla. Pero la sanción de dos años sin jugar (2011 y 2012), no amedrentó al cubano, que lograría finalmente su cometido, instalándose en México, pero con la mira bien puesta en el beisbol de las Grandes Ligas.

 

Y mientras su objetivo era ese, varios equipos, incluídos los dos de Chicago, le tenían ya como candidato en su lista de prioridades, pero fueron al final los Dodgers quienes, ofreciéndole un contrato de 7 años y 42 millones de dólares, se quedaron con sus servicios.

 

A poco menos de un año de esa firma, ya el cubano debutó con el equipo grande y dando muestras de todas sus facultades en su primer partido en las mayores. Puig tuvo un entrenamiento primaveral sensacional, pero evidentemente los Dodgers pensaban que necesitaba al menos una temporada más de “sasonamiento” en las sucursales. Sin embargo, ante la crisis actual del equipo de Don Mattingly, no había otra opción. El año pasado, en la Liga de Novatos de Arizona, bateó para .400 con 4 cuadrangulares en 9 juegos, y en Clase A avanzada, terminó con .327.

 

El 2013 lo inició en AA, pero tras números de .313, 8 para la calle y 37 remolques en apenas 40 juegos, las puertas del equipo grande se le abrieron y ha llegado decidido a quedarse y a causar nuevamente una gran impresión.

 

En Dodger Stadium, los foráneos de calidad suelen causar fenómenos en el público beisbolero. El más grande de todos, la “Fernandomanía” de Fernando Valenzuela en 1981, pero otros importantes como el fenómeno del “Tornado” Hideo Nomo en 1995, la llegada de Manny Ramirez y su “Mannywood” en el 2008, y la todavía reciente invasión coreana de Hyun-Jin Ryu, que ha resultado todo un fenómeno entre la numerosa comunidad de ese país que radica en Los Angeles.

 

Y si ya un mexicano, un japonés, un dominicano y un coreano han puesto de cabeza, beisboleramente hablando, a la ciudad más importante del sur de California, porqué no pensar ahora en un fenómeno cubano con un Yasiel Puig que, al parecer, llegó para quedarse.

Yasiel Puig, jugador de la semana en la Liga Nacional

11 de junio de 2013

 

El novato cubano es declarado Jugador de la Semana en la Liga Nacional tras su histórico debut con los Dodgers.

 

Se sabía que el cubano Yasiel Puig tenía las mejores cualidades para jugar en las Grandes Ligas, pero los hechos tras su debut han superado todas las expectativas que los Dodgers de Los Ángeles tenían puestas en él, reporta EFE.

 

Puig, de 22 años, es la sensación del momento tras una primera semana memorable con los Dodgers después de lograr .464 de promedio de bateo, 964 de porcentaje de slugging, pegar 13 imparables en 28 turnos, cuatro jonrones y 10 carreras impulsadas en siete partidos que le hicieron merecedor del premio de Jugador de la Semana en la Liga Nacional.

 

Su accionar al pegar dos jonrones en un juego y un grand slam en otro, ayudaron a que los Dodgers, que marchan últimos en su división pese a una nómina de 215 millones de dólares, la más alta de las Grandes Ligas, ganasen cuatro de siete juegos.

 

“He llegado para ayudar al equipo y si lo he conseguido, me alegro de ser parte de esa recuperación”, declaró Puig, que se siente más cómodo con el bate en las manos que ante los periodistas.

 

Además aprecia que también haya sido acogido con gran entusiasmo por los seguidores de los Dodgers, que comienzan a verlo como su ídolo.

 

“Estoy contento porque los aficionados usan mi camiseta y dicen mi nombre”, expresó Puig. “Creo que ahora debo hacer todavía mucho mejor las cosas”.

 

El piloto de los Dodgers, Don Mattingly, no tiene problemas en reconocer que le encantan la personalidad y el entusiasmo de Puig, que se hace evidente cuando corre detrás de una bola, se posiciona en el jardín derecho o en la forma en que circula por las bases.

 

“Tiene una forma de jugar contagiosa”, señaló Mattingly. “Disfruta el juego. Como debe ser”.

 

“Este muchacho es distinto”

 

El impacto que está teniendo el joven pelotero cubano ha hecho que se lo compare con el que tuvo el dominicano Manny Ramírez cuando llegó a Los Ángeles en julio de 2008.

 

En su primer mes, Ramírez bateó de .415 con 25 carreras producidas, nueve jonrones y 21 anotadas. Pronto a un sector de la tribuna se le empezó a decir “Mannywood”, haciendo un juego de palabras con Hollywood. El dominicano terminó cuarto en la votación para elegir al Jugador Más Valioso (MVP) de esa temporada.

 

“Había visto jugar a Manny y sabía lo que podía hacer”, declaró Mattingly, quien por entonces era entrenador de bateo con los Dodgers. “Pero este muchacho es distinto. Cuanto más lo observas, más fe le tienes”.

 

Con el jardinero central Matt Kemp y el guardabosque izquierdo lesionados, los Dodgers se decidieron por Puig y lo subieron del equipo de Chattanooga de la Doble A.

 

Mattingly lo puso en el jardín derecho y primero en el orden al bate.

 

Puig llamó la atención con un tiro sorprendente en el noveno episodio de su primer partido. Atrapó la pelota cerca del muro y realizó un lanzamiento a primera que dio lugar a una doble matanza que terminó el juego, que los Dodgers ganaron 2-1 ante los Padres de San Diego.

 

La noche siguiente bateó dos cuadrangulares en un triunfo 9-7. El miércoles pasado bajó a tierra y se fue en blanco en cuatro turnos, incluidos dos ponches.

 

Pero en su siguiente partido bateó un jonrón con el bote lleno que hizo que el renombrado narrador Vin Scully se quedara en silencio durante más de un minuto.

 

Puig es apenas el tercer jugador desde 1900 con tres jonrones en sus primeros cuatro partidos, de acuerdo a la información ofrecida por los Dodgers.

 

Pero la joven promesa cubana siguió encendida y el pasado viernes también botó la pelota fuera del parque.

 

Puig habla poco inglés y cuando se le preguntó a Mattingly cómo hace para comunicarse con él, el piloto respondió: “No tengo que decirle nada. Solo 'haga lo que sabe' y como hemos podido comprobar es mucho y bien”.

 

El rendimiento de Puig se ha convertido en el motivo de conversación que más entusiasmo genera en Los Ángeles, además que en el campo los fanáticos siempre le piden que salga a saludar fuera del “dogout”.

 

Su compatriota, el actor Andy García, fue a conocerlo personalmente junto a su esposa Marivi, y los Dodgers ordenaron una cantidad de casacas con su número 66 que pusieron a la venta durante el pasado fin de semana con un éxito completo.

 

“El cubano proyecta otro tipo de energía”, comentó el segunda base Skip Schumaker. “Es sorprendente. Cada vez que sale a batear te da la sensación de que algo va a suceder”.

 

Difícil de controlar

 

Puig deslumbró a la afición con su velocidad, su potencia y la fuerza de su brazo. Sus turnos al bate son algo que nadie se puede perder, sin importar el resultado.

 

Es uno de esos jugadores que le tiran a todo y por lo tanto una amenaza permanente para los lanzadores.

 

“Sale con la intención de hacer daño”, declaró el lanzador Ted Lilly. “Es muy difícil de controlar”.

 

Cada vez que sale a batear, Puig se para donde empieza el césped y con su bate hace una cruz en la tierra.

 

“Le agradezco a Dios por todas las cosas buenas que está haciendo por mí”, explicó Puig. “Todo lo que tengo se lo debo a él y estoy muy contento de poder estar viviendo mi sueño aquí en Los Ángeles”.

 

Una semana es poco tiempo para decir si tendrá un impacto duradero, pero el comienzo no podía ser más esperanzador y productivo.

 

“Habrá que ver qué pasa después de seis u ocho semanas, cómo se adaptan los rivales a él y cómo se ajusta él a ellos”, manifestó el lanzador de los Bravos de Atlanta, Tim Hudson. “Pero tiene grandes cualidades”.

 

Los novatos generalmente batean menos cuando enfrentan a los lanzadores por segunda o tercera vez en la temporada.

 

“Es muy pronto para saber si esto sigue”, advirtió el abridor estelar de los Dodgers, Zack Greinke. “No hay que darle demasiado crédito a la gente muy rápido”.

 

Los Dodgers, aunque apenas habían visto a Puig accionar en el campo, en junio de 2012 lo firmaron por siete años y 42 millones de dólares, el mayor contrato firmado por un cubano.

 

Puig recibió una bonificación de 12 millones de dólares por firmar y esta temporada tiene un salario de dos millones de dólares.

 

El joven pelotero cubano vive en Miami, donde compró una casa para sus padres y su hermana de 17 años. Todos asistieron a su debut en las mayores la semana pasada.

 

Sus proezas pueden haber tomado por sorpresa a la afición, pero los Dodgers sabían de lo que era capaz. Si bien lo mandaron a las menores, durante la pretemporada se entrenó con el equipo y vieron su talento durante el campo de entrenamientos.

 

Puig aparentemente se adaptó bien al clubhouse, donde su armario está entre los de dos peloteros que hablan español, los mexicanos Luis Cruz y Adrián González, quien le recomendó que “sea él mismo”.

 

“Es un tipo vital, que desea salir al terreno. Le encanta el béisbol y siempre tiene una sonrisa en la boca”, dijo González. “Esto es algo para lo que estaba preparado”.

Aumentaron las detenciones políticas en mayo

La CCDHRN asegura que en el mes pasado

se produjeron 375 detenciones cortas

“por motivos netamente políticos”

EUROPA PRESS

6 de junio de 2013

 

   La Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN) ha informado de que durante el pasado mes de mayo se produjeron al menos 375 detenciones de corta duración “por motivos netamente políticos” en la isla caribeña.

 

   La CCDHRN ha explicado que esta cifra evidencia “un aumento moderado de la registrada en el mes de abril, pero confirma la tendencia dominante en cuanto a un alto número de personas afectadas como resultado de esta forma de represión”.

 

   Además, ha indicado que el mes pasado “continuaron ocurriendo, a niveles semejantes a los precedentes, diversas acciones de violencia física o verbal así como otras acciones intimidatorias contra pacíficos disidentes”.

 

   Por otro lado, la organización opositora ha denunciado que “en el enorme sistema carcelario existente en Cuba siguen predominando las condiciones crueles, inhumanas y degradantes que le han caracterizado durante décadas”.

 

   “El Gobierno continúa negándose a aceptar la cooperación del Comité Internacional de Cruz Roja y de otros organismos humanitarios que ayudarían a las propias autoridades a mejorar o modernizar las condiciones de internamiento carcelario y, lo que es más importante, a reducir la enorme masa de personas encarceladas”, ha señalado.

 

   A este respecto, ha destacado la adopción por parte de la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) de una resolución sobre “la violación sistemática de los derechos civiles y políticos en Cuba, en la que se exhorta al Gobierno a dar pasos verdaderamente significativos para superar la desfavorable situación que sigue prevaleciendo en Cuba”.

 

REFORMA MIGRATORIA

 

   Por otro lado, la CCDHRN se ha referido a la aplicación de la reforma migratoria que las autoridades cubanas pusieron en marcha el pasado mes de enero flexibilizando los permisos de salida y entrada al país, hasta ahora sometidas a un férreo control político.

 

   “Al cierre del mes de mayo, alrededor de treinta disidentes cubanos pudieron viajar al exterior, a pesar de lo cual un número indeterminado de ciudadanos no obtuvieron permiso de las autoridades cubanas para viajar al exterior con derecho a regresar”, ha indicado.

 

   Además, ha criticado que “el Gobierno sigue imponiendo odiosas restricciones, alegando meros pretextos ideológicos, en cuanto a la posibilidad de miles y miles de cubanos que viven en el exterior para que puedan visitar su país natal”.

Amistades peligrosas en Cuba

Fernando Ravsberg

6 de junio de 2013

 

Algunos de los más importantes hombres de negocios instalados en Cuba desde hace décadas están siendo presentados ante los tribunales de la isla para responder a graves acusaciones de corrupción. Son la cara visible de una campaña de limpieza mucho más amplia.

 

Lo sorprendente no es que el gobierno cerrara estas compañías sino que hayan tardado tanto tiempo en investigarlas cuando todo el ambiente empresarial conocía cómo hacían sus negocios, la forma en que operaban y hasta los mecanismos para repartir las prebendas.

 

La creación de la Contraloría General de la República provocó un cambio radical en la lucha contra la corrupción porque permitió que se elevara el punto de mira hacia las alturas, donde nadan los peces gordos, generalmente intocables aunque sean el origen del delito.

 

Recuerdo que cuando Raúl Castro anunció que la Sra. Gladys Bejerano sería la Contralora mencionó que a algunos dirigentes no les había gustado la propuesta. Tal vez ya sospechaban que esa mujer no se detendría ante ministros, “hijos de papá” o empresarios extranjeros.

 

Y estaban en lo cierto. Por lo menos en los últimos 20 años no se había impulsado en Cuba una campaña anticorrupción que fuera tan amplia, tan profunda y, sobre todo, tan sostenida en el tiempo. Me aseguran que los tribunales no dan abasto para procesar a tantos implicados.

 

Conozco a algunos empresarios cubanos que, tras el descubrimiento de una trama de corrupción, pasaron más de un año sin que los molestaran. Sin embargo, cuando ya creían que se habían librado los llamaron a juicio y los condenaron a varios años de prisión.

 

En las granjas de trabajo hay tantos corruptos presos que uno de los jefes del sistema penitenciario me aseguró que está cambiando el componente racial de los internos, con la llegada de estos dirigentes empresariales o políticos, mayoritariamente blancos.

 

Algunos se lamentan del encarcelamiento de estos funcionarios aduciendo que se vieron obligados a corromperse por los bajos salarios que perciben. Eso puede ser verdad para un obrero o para un maestro pero no lo es para esta élite empresarial.

 

En general ellos viven muy por encima del resto de sus compatriotas, habitan en buenas casas, manejan automóviles, tienen cuota de gasolina, teléfono celular pagado, reciben viáticos para sus viajes al extranjero. Son los que menos necesidad de corromperse tienen.

 

Pero ahora hay mucho más revuelo porque no solo están procesando en los tribunales los empresarios corruptos cubanos sino también los extranjeros, aunque estos tengan ciudadanías de países tan influyentes como Canadá o el Reino Unido.

 

En realidad no debería sorprender a nadie que, cuando aparece un caso de corrupción empresarial, se detenga no solo al que recibe el dinero sino también a quien lo entrega por debajo de la mesa para obtener privilegios sobre sus competidores en una negociación comercial.

 

Al gobierno cubano no se le puede criticar que se defienda de los halcones que planean por los cielos del mundo en busca de presas dispuestas a vender a sus compatriotas por un poco de dinero, pero se le podría pedir sí una mayor transparencia.

 

La necesidad de informar sobre los procesos judiciales es útil para que los cubanos conozcan los éxitos que se logran en la lucha contra la corrupción y que los empresarios, tanto nacionales como extranjeros, sepan el precio que se paga por los sobornos.

 

Un experto del Brookings Institution decía a la agencia Reuter que “si el Gobierno cubano pretende que las sanciones sirvan como una disuasión eficaz a la corrupción -y no como disuasión a la inversión extranjera legítima- debería aclarar la naturaleza exacta de las supuestas infracciones y hacer el proceso legal más transparente”.

 

La diferencia entre eliminar la corrupción empresarial y desalentar la inversión radica justamente en la transparencia. Por ejemplo, sería interesante conocer si las acciones judiciales se corresponden a delitos que también serían sancionados en cualquier otro país.

 

En Cuba la pasión por el secretismo sigue siendo un boomerang que retorna peligrosamente contra quien lo lanzó. En este tema, como en muchos otros, el silencio sigue siendo la peor de las respuestas.

El PCC y la CTC

Dimas Castellanos

3 de junio de 2013

 

La posposición del XX Congreso de la Central de Trabajadores de Cuba está ligada a los objetivos específicos del Partico Comunista.

 

El Pleno XCIII del Consejo Nacional de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), reunido recientemente bajo la presidencia del Segundo Secretario del Partido Comunista (PCC), acordó posponer la celebración del XX Congreso, crear una Comisión Organizadora y designar a Ulises Guilarte de Nacimiento al frente de la misma.

 

La posposición se realiza, según se informó, para que la recién creada Comisión disponga de más tiempo para los preparativos del evento, el cual tiene pendiente la discusión con los trabajadores del Anteproyecto de Ley de Código de Trabajo y el documento Base del Congreso.

 

Teniendo en cuenta que hace apenas un mes se celebró otro Pleno del Consejo Nacional de la CTC en el que se evaluó la marcha de los preparativos del Congreso, surgen las siguientes preguntas: ¿Por qué en ese momento no se pospuso la fecha? ¿Por qué se ratificó a Carmen Rosa López al frente de la CTC hasta la celebración del XX Congreso? ¿Por qué la Comisión Organizadora no se creó cuando se hizo la convocatoria, o en el Pleno del pasado mes?

 

Las respuestas parecen estar relacionadas con las dificultades surgidas en las asambleas preparatorias. De ser así, las dudas apuntan hacia una mala preparación y hacia la incapacidad de la segunda secretaria de la CTC para cumplir con el mandato del PCC.

 

Tal suposición se fundamenta en que Carmen Rosa López había sido designada al frente de esa labor hasta la celebración del evento y electa Miembro del Consejo de Estado, lo que indicaba que estaba destinada a ser “elegida” en el Congreso como Secretaria General. Sin embargo, de forma sorpresiva acaba de ser sustituida por Ulises Guilarte de Nacimiento, quien dos semanas atrás era el Secretario General del PCC en la provincia de Artemisa.

 

Los temas a discutir, según la convocatoria al XX Congreso, “estarán vinculados a la economía y constituyen un deber ineludible para la CTC y sus sindicatos para lograr la movilización y participación consciente de los trabajadores en el cumplimiento de la política económica y Social aprobada en el VI Congreso”.

 

No obstante, en las asambleas preparatorias se pusieron de manifiesto las insuficiencias que conspiran contra lo que el PCC espera del movimiento sindical. Me refiero a mantener a la CTC como la única asociación sindical bajo su control para garantizar el apoyo a la implementación de los Lineamientos, para cuyo fin resulta ineludible afiliar a todos los trabajadores, especialmente al sector de los cuentapropistas, que tiende a crecer y contar con una fuerza sin la cual resulta imposible obtener los resultados esperados.

 

Algunos criterios emitidos durante el proceso arrojan luz sobre lo sucedido. Salvador Valdés Mesa explicó en Matanzas, el 8 de marzo, que aunque los jubilados, los estatales y no estatales constituyen tres fuentes de afiliación con distintos intereses, son los cuentapropista los demandantes de especial seguimiento por la novedad que ellos representan en el movimiento sindical. Luego, a fines de ese mes, en el informe al XCII Pleno, el propio Mesa enfatizó en las deficiencias que se afrontan en el funcionamiento sindical, en la afiliación de los trabajadores, y llamó a combatir el delito, las ilegalidades, las indisciplinas, y a perfeccionar la guardia obrera.

 

Por su parte, Carmen Rosa López, en una entrevista publicada en Granma el 27 de abril, expresó: “Todavía encontramos con frecuencia en los colectivos a trabajadores que no han sido afiliados por insuficiencias en nuestra labor”, y agregó que en todos los procesos de análisis efectuados este año son recurrentes los planteamientos de los asambleístas respecto al salario; lo que demuestra que los objetivos trazados andan por un rumbo y la preocupación de los asalariados por otro.

 

La conducta de los trabajadores expresa el no reconocimiento de los sindicatos como representante de sus intereses, sobre todo después del Pronunciamiento que hizo la Central de Trabajadores en septiembre de 2010 cuando apoyó los despidos laborales, una medida que afectaba directamente a los trabajadores y sus familias. Ese documento decía: “Nuestro Estado no pude ni debe continuar manteniendo empresas, entidades productivas, de servicios y presupuestadas con plantillas infladas, y pérdidas que lastran la economía, resultan contraproducentes, generan malos hábitos y deforman la conducta de los trabajadores”.

 

En resumen, que el objetivo principal del Congreso es garantizar el papel que el PCC espera de los trabajadores en la implementación de los Lineamientos y no tratar sus problemas específicos, como son, entre otros, la insuficiencia de los salarios y de las jubilaciones en relación con el costo de la vida, lo que ha conducido a los cubanos a sobrevivir al margen de la ley y de espaldas a los llamados ideológicos, a la vez que se ha conformado una moral negativa, que obstaculiza la realización de cualquier proyecto social.

 

La solución, la libertad de asociación

 

Hay que recordar que los sindicatos en Cuba surgieron para defender los intereses de los trabajadores cuando el trabajo asalariado comenzó a sustituir la mano de obra esclava; que ese movimiento obrero se generalizó con la Ley General de Asociaciones de 1888 y luego con las libertades y derechos reconocidos en la Carta Magna de 1901; que demostró su fuerza con la fundación de la Confederación Nacional Obrera de Cuba en 1925 y con la huelga de 1933 que derribó el régimen de Gerardo Machado; que logró se aprobaran diversas leyes obreras hasta el Decreto 798 del año 1938 —el más importante en la legislación laboral cubana—, el cual fue refrendado posteriormente en la Constitución de la República; que ese desarrollo condujo al nacimiento de la CTC en 1939; y que se crearon comisiones mixtas para la fijación de salarios mínimos, derecho de negociación colectiva y otras medidas acorde con lo establecido por la Organización Internacional del Trabajo.

 

Por todo ello, los sindicatos se convirtieron en un sector importante de la sociedad civil nacional, al punto que en 1945 la CTC llegó a ser la segunda central sindical más grande de la región, con medio millón de afiliados.

 

La moraleja consiste en que la participación de los trabajadores en tareas del Estado o de un partido político, de producirse, tiene que partir del interés, la necesidad y la decisión de los propios trabajadores, lo que constituye una premisa vital para la defensa de sus propios intereses.

 

Por tanto, la posposición de la fecha del Congreso, de noviembre del presente año al primer trimestre de 2014, tiene su causa más remota en la conversión de la CTC en una organización auxiliar de los fines del PCC, es decir en una pérdida de su independencia que ha llevado a su desnaturalización. Una situación que está por encima de las capacidades de Salvador Valdés Mesa, de Carmen Rosa López, de Ulises Guilarte de Nacimiento o de cualquier persona que se designe al frente del sindicalismo cubano.

 

La única salida, que depende de una voluntad política hasta ahora inexistente, no está en los cambios de cuadros ni en hacerle añadiduras a los documentos pendientes de discusión, sino en la libertad de asociación. Con ella el PCC podía mantener a la CTC como auxiliar suya y permitir a los trabajadores que no quieran pertenecer a ella crear otras asociaciones obreras y afiliarse libremente a ellas. Sería además una respuesta a los señalamientos y recomendaciones que le hicieron a Cuba en la reciente evaluación en el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas.

Represión y culeros

Alejandro Armengol

3 de junio de 2013

 

No hay que hacerse ilusión alguna sobre un relajamiento del control político bajo el gobierno de Raúl Castro. El régimen busca sembrar el desaliento junto al miedo. Los argumentos pueden no ser convincentes y los recursos empleados se caracterizan por su falta de originalidad. Pero al policía no le interesa convencer sino persuadir y la falta de imaginación es una de las reglas del oficio.

 

Si en Cuba existiera un atisbo de democracia, desde hace años los hermanos Castro hubieran sido eliminados del poder. En primer lugar, por ineptos. Repetirlo es un lugar común, pero la repetición no nos salva del asombro.

 

Una información aparecida en el sitio digital Havana Times da a conocer, al menos para los que vivimos en el exilio, que las madres cubanas se ven obligadas a volver a utilizar los culeros desechables o pampers.

 

“Casi toda la canastilla del bebé se compra en las tiendas en divisas a un precio exorbitante teniendo en cuenta que el sueldo básico es de 250 pesos (10 CUC)”, explica Mercedes González Amade.

 

Mientras el bebé es pequeño, cabe la posibilidad de que puedan utilizarse los culeros desechables, ya que la información de Havana Times especifica que cuando la talla es chica el paquete trae de 20 a 30 culeros. Pero según aumenta la talla aumenta el precio y disminuye la calidad. Por lo tanto las madres tienen que recurrir a coger los culeros usados, quitarles el relleno, lavar lo que queda y ponerlos a secar.

 

“Una vez seco, por donde se le sacó lo que comúnmente también llamamos “tripa” (el relleno), se introducen dos culeros de tela doblados en cuatro y, si por casualidad la parte que antes tenía el pegolín pierde su efecto, usamos dos alfileres”, explica González Amade.

 

Tener que recurrir a esta solución es algo típico de una cultura de la pobreza, donde la necesidad obliga a una adaptación de las mercancías de acuerdo a una situación de miseria. No hay “bloqueo imperialista” que justifique este uso. Cualquier pretexto ideológico no es más que cinismo. Por décadas el régimen cubano se aferró al argumento del futuro para desviar cualquier mirada crítica sobre el presente. Ahora todo se reduce a un “sálvese el que pueda”.

 

Si Fidel Castro proclamó que el Estado se haría cargo de todo, desde la enseñanza superior hasta la fabricación de helados, lo que persiste en la actualidad es un desbarajuste total, en que coinciden sedes universitarias en provincias artificialmente construidas con ancianos vendiendo cucuruchos de maní, niños que piden a turistas —en internet hay más de un video que lo muestra— y hombres y mujeres que sobreviven con oficios de hambre.


Cuando resultó demasiado evidente que el gobierno cubano no era capaz de satisfacer las necesidades más elementales, no se optó por otra solución que el trasladar el problema a la familia.

 

Este es, en última instancia, uno de los “triunfos políticos” del régimen en los últimos años: que los familiares —sobre todo los que vive en el exterior— se encarguen del sostenimiento de los menos favorecidos, en especial niños y ancianos. No solo se tiró por el caño una igualdad y una cacareada justicia social defendida por años, sino también todo el entramado económico y social propio de cualquier país, desde el sistema de pensiones hasta la oferta de trabajo.

 

La diferencia con Cuba es que quienes causaron el destrozo se presentan ahora como los capacitados para enmendar el desastre, con concesiones a cuenta gotas y decretos leyes a paso de tortuga: la función de gobierno en manos de gente que actúan como componedores de bateas, arregladores de bastidores y vendedores de latas, con la particularidad de que, a diferencia de quienes en el pasado recorrían las calles ofreciendo estos servicios menesterosos, ellos se enriquecen.

 

Claro que para actuar con la impunidad que siguen desplegando, no basta el engaño: necesitan reprimir realidades y quejas, alentar la envidia y mantener el desamparo.

 

El régimen cambia las leyes y normas con el objetivo de perpetuarse. Estos cambios son fundamentalmente en esferas de la vida cotidiana. Lo que en cierta época fue delito en Cuba, ahora es permitido. Durante el gobierno de Fidel Castro se impuso el criterio de no guiarse por una mentalidad empresarial, preocupada por el rendimiento y las ganancias, sino lograr ventajas económicas como resultado de los objetivos políticos. Raúl Castro parece ser todo lo contrario: el hombre que quiere que “las cosas funcionen”. Sólo que nadie sabe cómo va a lograrlo y la eficiencia continúa siendo una frontera y no una conquista.

 

Pero en esencia, la capacidad o el derecho a expresar el deseo de cambiar ciertas leyes, así como aspectos y condiciones sociales, o a la sociedad y el gobierno en su conjunto, sigue siendo tan refrenado en Cuba como cuando esta persecución se vestía del ropaje de la lucha de clases.

Volviendo al país

Eliécer Ávila

30 de mayo de 2013


Después de una estancia en el extranjero que lo llevó a una docena de países, el autor narra su regreso al país, el paso por la aduana y el reencuentro con los suyos.

 

Un abrazo fuerte a todos los amigos que se han mantenido preocupados por mi llegada. Hoy por primera vez pongo mis manos en un teclado. Desde que abordé el avión en el PCG (París-Charles de Gaulle) de París, después de 5 minutos de wifi gratis, no he sabido nada más de cómo anda el mundo.

 

Durante el viaje tuve tiempo de pensar en muchas cosas. Los recuerdos de los momentos vividos en un viaje que me llevó a doce países pasaron por mi mente con especial dramatismo. Sentía que había conocido la civilización contemporánea, la Era Moderna, el desarrollo hasta donde la humanidad conoce y entiende, y estaba a bordo de un vuelo que me sacaba de esa realidad recién descubierta para llevarme de regreso años atrás. Pero estaba absolutamente seguro de qué era lo que quería; los lazos sentimentales que dejé en Cuba y un sentido de responsabilidad con el futuro eran razones demasiado poderosas.

 

Incluso no me sentía triste, estaba feliz de regresar.

 

Mi aterrizaje fue tranquilo, pero ya desde el aire algo no estaba bien. La imagen que vi a través de la ventanilla cuando la nave descendía me causó un raro escalofrío. Ya me habían advertido sobre eso algunos amigos con experiencia de salir y entrar. Me habían contado del choque que sentiría cuando, involuntariamente, mi cerebro empezara a comparar detalles, formas, colores, luz, vida. Y así fue, no se equivocaron ni en una palabra.

 

Una vez en el aeropuerto, sabiendo que mi padre y mi novia estaban al otro lado de la tela de araña, solo tenía en mi mente hacer las cosas de la mejor forma para salir rápido. Llegué de los primeros a la espera del equipaje y, como no vi moros en la costa, quise creerme que las cosas podrían salir de forma natural y, a pesar del inmenso cansancio físico y mental, la idea de encontrar rápido el abrazo del viejo y los besos de Raquel me hizo recuperar algo de fuerza.

 

Las maletas se demoraron un buen rato. No había tenido la precaución de sellarlas o, al menos, poner un candadito en ellas. Temía que alguien metiera las manos, cualquier cosa que sacaran lo sentiría profundamente. Cada regalo, desde una memoria flash hasta alguna ropa de uso, tenía un destino y resolvería o aliviaría un problema.

 

Finalmente mis cosas llegaron y emprendí, esperanzado, mis pasos hacia un cartel que decía “Exit”, por donde observaba estaban saliendo todos los que arribaron en mi vuelo. No caminé mucho, enseguida una joven oficial de aduanas me sacó de la fila y explicándome que me dirigiera a un espacio abierto, en un costado del pasillo que contaba con unas mesas grandes, la señorita me dijo que se trataba de un “chequeo de rutina”.

 

Yo solo atiné a responder: “Haga lo que quiera, pero por favor hágalo rápido, estoy realmente cansado”.

 

Otro joven oficial, pero con más rango visible, le dijo algo a la que me atendía y esta me indicó que la siguiera, que debíamos ir a otro lugar. Entonces empecé a caer en cuenta de que las cosas no serían normales; en mi caso, desgraciadamente, sería anormal.

 

Llegamos a otro salón donde solo había cubanos. Allí pude comprobar la veracidad de todas las historias increíbles que me habían contado sobre los aeropuertos cubanos para los cubanos. Adonde quiera que miraba veía gente discutiendo, enojados, cansancio, indolencia, desesperación y envidia. En este salón, y a la vista de todos, mis equipajes fueron desmenuzados uno por uno, pieza por pieza, detalle por detalle, con minuciosidad de cirujanos.

 

Todo cuanto les resultaba interesante se lo llevaban por un buen rato a analizarlo a otro lugar, luego lo trajeron y lo fotografiaron. Específicamente teléfonos, memorias o cualquier tipo de tecnología o cables.

 

El tema más conflictivo resultó la literatura. Según el oficial que se llevaba las cosas, “los temas parecen inapropiados, los analistas se quedarán con esos libros y, si quieres, puedes reclamarlos después y si la reclamación da a lugar, puede venir a buscarlos”.

 

Le dije que no iría desde Puerto Padre hasta La Habana para reclamarlos por gusto.

 

Y, ¿cuáles eran los temas de esos libros? ¿Se trataba en algún caso de un manual para armar una bomba? No, solo libros sobre cultura crítica, democracia, derechos humanos… Pero bueno, parece que aquí esto es lo mismo que una bomba.

 

En todas estas gestiones pasaron cuatro largas horas, ya incluso habían salido las personas de otros vuelos posteriores. Para ese entonces aún me faltaba hacer la inmensa cola para pesar los equipajes y pagar los impuestos. En ese proceso se me acercó una señora a decirme: “Tu padre está allá fuera, bien cabrón ya”. Supe que, efectivamente, las cosas se podrían poner feas si no salía pronto, pues mi padre, que me enseñó a no soportar la humillación, entraría de cualquier forma a buscarme.

 

Yo tampoco aguantaba un minuto más, ya no me interesaba nada, tenía relativamente cerca a unos de los “agentes desclasificados” que trabajan en la aduana y a ese mismo le iba a descargar todo lo que tenía deseos de decir. Pero al parecer ellos saben dónde está el punto crítico y, en ese momento, apareció un jefe que, después de pagar, me dejó salir.

 

Dios, qué emoción, estaba medio desmayado pero volví a sacar el extra para apretar con fuerza a los míos. También a ese gran amigo que es Reinaldo Escobar, Agustín y otro muchacho que tomó algunas fotos.

 

Camino a la casa donde haría estancia esa noche no dejaba de mirar a los costados, las casas, las calles, la gente. Ahí comenzó en mi cerebro otro ejercicio fuerte que todavía me tiene mareado y que les contaré después, cuando haya descansado un poco. Pronto llegará la inmensa Yoani, todos mis sentidos están puestos en ella.

Algunas observaciones al informe de Cuba al CDH

Roberto Quiñones Haces

23 de mayo de 2003

 

El pasado 1 de mayo, el gobierno cubano presentó su informe al Consejo de los Derechos Humanos, con sede en la ciudad suiza de Ginebra. Ese mismo día, Cubadebate lo publicó siendo la primera vez que esto ocurre desde 1959.

 

Partiendo del discurso del canciller Bruno Rodríguez Parrilla ante el mencionado organismo, es evidente que desde el primer capítulo, titulado “Metodología y proceso de consultas”, el gobierno cubano se contradice, pues el canciller dijo que Cuba trabaja por todos los derechos humanos para todos los cubanos y, si fuera así, la lógica indica que las consultas para la elaboración de dicho informe deberían haber tenido en cuenta la opinión de los cubanos agrupados en numerosas organizaciones de la sociedad civil a las que el propio gobierno impide su legalización, por tanto, ese sector ha sido obviado en este proceso de consultas a pesar de ser un importante sector a tener en cuenta. Lo cierto es que todo cubano que discrepa del gobierno públicamente es discriminado por ello, lo cual constituye una flagrante violación de los artículos 19 y 20 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos que proclaman el derecho de todo individuo a la libertad de expresión y a la libertad de reunión y asociación pacífica. Este sector de la población cubana tiene derecho a que en informes de esta naturaleza se consignen sus opiniones y ha sido excluido.

 

En el capítulo II, titulado “Marco jurídico e institucional para la promoción y protección de los derechos humanos en Cuba”, epígrafe 5, el informe afirma que “ el país ha continuado fortaleciendo el carácter democrático de su institucionalidad, con leyes, políticas y programas de clara naturaleza popular y participativa, conforme a las más altas aspiraciones del pueblo”, sin embargo no se menciona qué leyes ha discutido el pueblo cubano en estos últimos años pues la última discusión pública fue con respecto al Proyecto de Lineamientos para el 6to congreso del PCC y sabemos que la técnica empleada en dichas discusiones fue la de disolver las responsabilidades gubernamentales entre la masa de oidores carentes de un poder de transformación de nuestra realidad. ¿Cómo puede afirmarse que se ha continuado fortaleciendo el carácter democrático de nuestra institucionalidad cuando en la asamblea nacional del poder popular no se discuten asuntos esenciales que preocupan a nuestro pueblo, cuando a éste se le continúan imponiendo cual ucases las decisiones tomadas previamente por el Buró Político del PCC y los Consejos de Estado y de Ministros , cuando todavía no tiene la posibilidad de elegir siquiera al presidente de una asamblea municipal del poder popular de forma directa, ni tampoco a los jueces, fiscales ni a ninguna otra persona que ocupa cargos públicos y sobre todo, cuando aún carece de mecanismos para controlar la ejecución de sus funciones y revocarlos?

 

En el epígrafe 6 de este propio capítulo el informe señala que entre el 2009 y el 2012 se ha continuado robusteciendo el marco jurídico e institucional en materia de derechos humanos y que se trabaja por introducir nuevas modificaciones, pero nada se informa sobre la incorporación total a nuestra legislación de importantes instrumentos jurídicos, esenciales para la materia, y no existe tampoco la más mínima evidencia de que si esto llega a ocurrir existirá un respeto total e incondicional a esos derechos inalienables del hombre. Igualmente resulta significativo el epígrafe 9, donde el informe dice que se trabaja por alcanzar un desempeño cualitativamente superior en la impartición de justicia en momentos en que se ha hecho una norma mantener encerrados por varios meses sin cargos en contra a los disidentes y luego ponerlos en libertad sin que medie juicio alguno ni pronunciamiento público acerca de la inocencia de esas personas detenidas de forma arbitraria e ilegal.

 

Tampoco señala el informe si se trabaja para hacer que las revisiones de las sentencias judiciales se conviertan en un recurso efectivo de los ciudadanos y se despojen del burocratismo, insensibilidad, injusticia y politización que hoy las permean.

 

En el capítulo III, titulado “Logros y desafíos en la promoción y protección de los derechos humanos en Cuba”, epígrafe 11, se afirma que en los últimos cuatro años el país ha impulsado numerosas medidas e iniciativas en su empeño por alcanzar el más amplio disfrute de todos los derechos humanos y las libertades fundamentales para todos. Es evidente el cinismo de esta expresión, a no ser que para quienes elaboraron este informe las personas que disienten del gobierno no son cubanos. Igualmente en el epígrafe 12 se afirma que en Cuba existe una materialización efectiva de los derechos fundamentales refrendados en la Constitución, sin embargo, nada se señala en el informe sobre la discriminación política que de forma permanente y sistemática el gobierno ha ejercido en contra de los cubanos que se han atrevido a oponérsele, práctica que se ha concretado en la expulsión de los centros de trabajo, en la prohibición de ascender en la estructura laboral o social, en acosarlos de forma violenta, en detenerlos y hasta privarlos de libertad ilegalmente, lo cual viola lo establecido en los artículos 41,42,44,45,53,54,55,56 y 58 de la propia Constitución cubana.

 

En el apartado referido al acceso a las tecnologías de la información y las comunicaciones se afirma que aumentó la calidad en el uso y acceso social a las mismas, pero para los cubanos esto se traduce únicamente en que hay más espacios públicos con ordenadores y nada más, porque no se dice que en ellos se carece de la posibilidad de acceder a Internet y cuando en algunos sí se puede el acceso está restringido únicamente a los sitios que el gobierno permite que sean consultados. Tampoco se dice que es casi inexistente la venta de ordenadores en las tiendas y que cuando esto ocurre, al igual que en el caso de la telefonía móvil, los precios de los equipos o del servicio son fijados en CUC, una moneda en la que la mayoría de los cubanos no recibe su salario y que tiene un valor 25 veces superior al de la moneda corriente. Con respecto al crecimiento de la capacidad de ancho de banda ello no ha beneficiado en nada al cubano común.

 

En el acápite dedicado a la pena de muerte el gobierno hace énfasis en la moratoria existente y afirma que esa sanción está destinada únicamente a un grupo reducido de delitos. Sin embargo, quien revise el Código Penal cubano comprobará que dicha pena existe para 22 delitos, la mayoría de ellos de clara connotación política.

 

En lo concerniente a la libertad religiosa no se dice que todavía se priva a los creyentes cubanos del derecho a que sus hijos sean educados en escuelas religiosas y que tampoco se permite a la Iglesia contar con medios de comunicación masiva para trasmitir el Evangelio y participar activamente en el debate público sobre todos los asuntos que preocupan a la sociedad cubana actual. La libertad religiosa en Cuba está constreñida a los templos y a alguna que otra salida pública previamente autorizada por el departamento de asuntos religiosos del partido.

 

Nuevamente el gobierno cubano ha enfatizado en los derechos económicos, sociales y culturales y ha minimizado los derechos civiles y políticos. Un gazapo lamentable en dicho informe es sin lugar a dudas que al mencionar el cuerpo legislativo vigente se haya hecho mención a la Ley No. 24 de 1979 como Ley de Seguridad Social cuando la misma fue derogada por la Ley No. 105 del 27 de diciembre del 2008. Pero este gazapo no es nada con el manifiesto interés de ocultar ciertas aristas de nuestra realidad política y social, algo que sí es un distintivo permanente en ese informe.

Amnistía Internacional

denuncia aumento de la represión en Cuba

 

El informe del año 2012 de la organización defensora de derechos humanos, Amnistía Internacional, denuncia un aumento de la represión en Cuba.

 

El Gobierno cubano aumentó la “represión” contra periodistas independientes, dirigentes de oposición y activistas de derechos humanos en 2012, según el informe anual de Amnistía Internacional (AI), informa la agencia de prensa EFE.

 

La organización no gubernamental destaca que, según los informes que ha recibido, “cada mes se practicaba una media de 40 detenciones de corta duración, y eran frecuentes las detenciones de activistas que viajaban a La Habana desde las provincias”.

 

Continúa la prisión preventiva

 

Amnistía Internacional, que recuerda que las autoridades cubanas no permiten su acceso al país desde 1990, denuncia que en Cuba “se siguió condenando por cargos falsos o sometiendo a prisión preventiva” a personas que esa organización considera “presos de conciencia”.

 

Con respecto a la libertad de expresión, asociación, circulación y reunión, AI afirma que las autoridades detuvieron “de manera habitual” a manifestantes pacíficos, periodistas independientes y activistas de derechos humanos por ejercer ese derecho. “Muchos permanecían detenidos, y otros eran objeto de actos de repudio por parte de simpatizantes del Gobierno”, subraya.

 

Recuerda que en marzo hubo una oleada de detenciones de activistas de derechos humanos, y que las organizaciones locales denunciaron que se habían practicado 1.137 arrestos arbitrarios antes y después de la visita del papa Benedicto XVI.

 

Según Amnistía Internacional, las autoridades adoptaron una serie de medidas contra activistas, como rodear su vivienda y desconectarles el teléfono, para impedir que informasen sobre la situación de los derechos humanos.



 

A prisión periodistas independientes

 

Añade que fueron perseguidas organizaciones cuyas actividades habían sido toleradas por las autoridades anteriormente, como la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), y que se detuvo a periodistas independientes que informaban sobre actividades de la disidencia.

 

El Gobierno, además, siguió controlando todos los medios de comunicación, y el acceso a información en Internet siguió siendo difícil por las limitaciones técnicas y las restricciones de contenidos, de acuerdo con la ONG.   AI reseña que varios periodistas y blogueros estuvieron detenidos varias horas por informar de una vista judicial sobre el accidente en el que falleció Oswaldo Payá, al que considera uno de los activistas en favor de los derechos humanos y la democracia ms respetados de Cuba.

 

Con respecto a la oposición política, señala que las autoridades adoptaron medidas para detener o castigar sus actividades, al afirmar que muchas personas que intentaban asistir a reuniones o manifestaciones eran detenidas y a otras se les impedía salir de sus casas.

 

Además, afirma que a los opositores políticos, periodistas independientes y activistas de derechos humanos se les negaron “sistemáticamente” los visados para viajar al extranjero.   Asimismo, destaca que unas 50 integrantes de la organización Damas de Blanco fueron detenidas en septiembre cuando se dirigían a La Habana para asistir a una manifestación, de las que 19 “pasaron varios das recluidas en régimen de incomunicación”.

 

Recuerda el informe de AI que en octubre el Gobierno cubano anunció cambios en la Ley de Migración que facilitaban los viajes al extranjero, como la eliminación de la obligatoriedad de los visados de salida.Ley de Comercio con el enemigo

 

Amnistía Internacional informa que en 2012 adoptó a siete nuevos presos y presas de conciencia, de los que tres quedaron en libertad sin cargos. De ellos, Antonio Michel Lima Cruz dice que quedó en libertad tras cumplir dos años de cárcel, mientras que su hermano Marcos Maiquel permanecía encarcelado al terminar el año y fue liberado recientemente, mediante una licencia extrapenal, debido a su delicado estado de salud.

 

Asimismo, quedaron libres Ivonne Malleza Galano, Ignacio Martínez Montejo e Isabel Haydee Álvarez, tras ser recluidos los tres 52 días sin cargos después de participar en una manifestación en 2011. Yasmin Conyedo Riveron, periodista y representante de las Damas de Blanco en la provincia de Santa Clara, y su esposo, Yusmani Rafael Álvarez Esmori, quedaron en libertad bajo fianza tras pasar casi tres meses en prisión.

 

Amnistía Internacional subraya que en 2012 las autoridades cubanas responsables de la atención de la salud y los organismos de la ONU no tuvieron acceso a equipos médicos, medicinas ni materiales de laboratorio fabricados bajo patente estadounidense.

 

Recuerda el informe que en septiembre Estados Unidos renovó la Ley sobre Comercio con el Enemigo, que impone sanciones económicas y financieras a Cuba y prohíbe que los ciudadanos estadounidenses viajasen a la isla y participen en actividades económicas con ese país.

 

Añade que en noviembre, por vigésimo primer año consecutivo la Asamblea General de la ONU adoptó una resolución que pide a Estados Unidos que levante el embargo unilateral.

Vía libre a la impunidad

Jorge Olivera Castillo

15 de mayo de 2013

 

Muy poco se puede esperar de lo sucedido recientemente en el Consejo de Derechos Humanos, respecto al examen periódico de varios países, entre ellos, Cuba.

 

Con la posposición hasta septiembre de las respuestas a las recomendaciones elaboradas por la instancia internacional, el gobierno de la Isla vuelve a mostrar sus reticencias al acatamiento de las exhortaciones para que mejore en asuntos relacionados con el respeto al libre ejercicio de las libertades fundamentales.

 

El hecho de que tomara notas y escuchara impasible las críticas de los representantes de otras naciones, apenas significa un procedimiento formal que pasará al olvido en un tiempo relativamente breve.

 

No existe una genuina voluntad de cooperación. Todavía está lejos el día en que cesen o disminuyan los actos de repudio, los arrestos arbitrarios, los encarcelamientos por motivos políticos y los juicios sin las debidas garantías procesales.

 

La situación sobre este tópico de la realidad nacional apunta a un mayor deterioro en lo que resta del 2013. Basta repasar los acontecimientos para cerciorarse de que apenas queda espacio para la esperanza.

 

El aumento de los presos políticos y de las golpizas por parte de las turbas organizadas contra cualquier manifestación de protesta pública, reflejan una tendencia que podría incluso sobrepasar los pronósticos más conservadores. Por razones de supervivencia, el régimen no va desestimar los métodos con los cuales garantiza el control social.

 

Con una hábil combinación de técnicas, que van del chequeo personalizado y el corte del servicio telefónico hasta el arresto temporal, el confinamiento prolongado o las palizas, los secuaces del Ministerio del Interior y sus colaboradores, consiguen mantener los niveles adecuados de terror que actúan como aislantes entre los opositores y el resto de la población.

 

Es casi imposible ganar prosélitos, al menos en cantidades notables, ante una represión que se actualiza cada día en función de las necesidades. No importan los costos políticos u otros problemas colaterales.

 

Lo más que sucede frente a las sistemáticas y flagrantes violaciones a los derechos ciudadanos por parte de las autoridades cubanas, son denuncias de organizaciones no gubernamentales y ocasionalmente algún que otro señalamiento crítico no vinculante de parte de entidades pertenecientes al sistema de las Naciones Unidas, como el Consejo de Derechos Humanos.

 

Raúl Castro ha mostrado sus credenciales de represor implacable, tal y como lo hizo su hermano durante los 47 años que estuvo como gobernante absoluto del país.

 

Aunque se le atribuye algún mérito en cuanto a las leves aperturas económicas que ha promovido desde que sustituyó a Fidel en la presidencia, es indiscutible su consagración a mantener el orden y la unanimidad ideológica en torno a las directrices del partido comunista.

 

La insurrección popular que acreditan algunos analistas a partir del cúmulo de problemas existenciales y la indiscriminada aplicación de la fuerza sin detenerse en las consecuencias, es sólo una teoría que en el contexto cubano se desmorona más rápido que un castillo de naipes.

 

El gobierno ha logrado salir airoso con sus tropelías. Sus actos represivos terminan diluyéndose en un mundo que concentra su atención en asuntos de mayor importancia estratégica. El Medio Oriente o Corea del Norte copan el interés político y mediático. Cuba sigue siendo un problema menor en el tablero mundial.

 

Por tanto, las 292 recomendaciones del Consejo de Derechos Humanos no tendrán ningún impacto relevante. La situación interna seguirá siendo grave y sujeta a una ampliación de las incidencias. Raúl Castro sabe que las posibilidades de afrontar castigos de envergadura son nulas. Por eso actúa sin que le tiemble el pulso.

 

oliverajorge75@yahoo.com 

Derechos Humanos. Una segunda evaluación

Dimas Castellanos

14 de mayo de 2013

 

La ONU vuelve a examinar al castrismo mientras en el país sigue sin alcanzarse el nivel de respeto a los derechos humanos que existió desde la segunda mitad del siglo XIX.

 

El pasado 1 de mayo el gobierno de Cuba fue objeto por segunda ocasión del Examen Periódico Universal (EPU), una herramienta del Consejo de Derechos Humanos (CDH) de la Organización de las Naciones Unidas encargado de revisar las obligaciones y compromisos contraídos por los Estados miembros en esa materia.

 

Cuando esa función la ejercía la desaparecida Comisión de Derechos Humanos, subordinada al Consejo Económico y Social de la ONU, el diferendo entre los gobiernos de Cuba y Estados Unidos condujo a una creciente politización del tema hasta su total atascamiento. Cada año se repetía el mismo guión: cabildeo antes y durante las sesiones, debates ofensivos, intercambio de acusaciones, votación de una resolución y finalmente el anuncio del gobierno cubano de la derrota propinada al imperialismo. Desde ese momento hasta la próxima sesión nada cambiaba en Cuba, pues al tratarse de “falsas” y “groseras” acusaciones del enemigo, nada había que cambiar.

 

Para los cubanos lo que ocurría en Ginebra no tenía ningún efecto en sus vidas, porque los conflictos entre Estados tienden a solapar, y por tanto a desmovilizar, los conflictos al interior de los Estados, mucho más cuando la contradicción externa es elevada a primer plano. Esa situación fue utilizada por las autoridades cubanas para fundamentar un nacionalismo ideologizado y “demostrar” al mundo que en Cuba no había violaciones de los derechos humanos, sino mentiras fabricadas por los enemigos.

 

Por ejemplo, en el año 2002, en el mes de enero, el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba acusó al gobierno norteamericano de gestionar con las cancillerías latinoamericanas la presentación de una resolución sobre “supuestas” violaciones de los derechos humanos. En consecuencia la polémica suscitada se trasladó del debate de las violaciones en Cuba a la conducta norteamericana. Tres meses después, el diario Juventud Rebelde reprodujo un despiadado ataque contra el presidente Vicente Fox, publicado por el órgano mexicano La Jornada, a causa del voto mexicano emitido en Ginebra contra Cuba, en el cual se calificó al presidente Fox de “incapaz de defender los intereses de los mexicanos y de vergüenza para América Latina”.

 

Como los derechos humanos preceden y trascienden a la política, para situar las cosas en su lugar se imponía la despolitización del tema y sobre esa base promover un debate sosegado y constructivo, encaminado a mejorar el estado real de esos derechos en la mayor de las Antillas. Para ello bastaba con limitarse a responder interrogantes tan sencillas como las siguientes:

 

¿Pueden los cubanos salir y entrar a su país sin permiso del Gobierno? ¿Pueden asociarse de forma independiente del Estado? ¿Pueden elegir el tipo de educación que quieren para sus hijos? ¿Pueden participar como sujetos en la economía de su nación? ¿Pueden disentir públicamente del Gobierno o del Partido Comunista sin correr riesgos? ¿Pueden conectarse libremente a internet? ¿Pueden seguir la pelota de las Grandes Ligas por la televisión como se hace con el futbol? La respuesta era una sola y también sencilla: No. Respuesta suficiente para poner luz sobre los derechos humanos al interior del país y sacar del foco de atención las acusaciones contra Argentina, México, Estados Unidos o cualquier otro Estado por “entrometerse” en los asuntos internos y/o carecer de moral para juzgar al gobierno cubano. Preguntas y respuesta que delimitan el problema a discutir y dirigen la atención a la voluntad política y a la responsabilidad del gobierno cubano para con su pueblo.

 

La cuestión ahora

 

El EPU, a diferencia de la desaparecida Comisión de Derechos Humanos, es un órgano intergubernamental de las Naciones Unidas, integrado por 47 países miembros, los que encabezados por una troika de relatores y en presencia los Estados observadores, examina periódicamente el estado de los derechos humanos de los países miembros de la ONU. El país examinado presenta ante el grupo un informe a partir del cual se inicia un diálogo del cual emergen las recomendaciones. De acuerdo a ese procedimiento, Cuba recibió 88 recomendaciones en el primer examen realizado en el año 2009. Y sobre la base de ese dictamen la mayor de las Antillas acaba de ser sometida nuevamente a evaluación.

 

El canciller cubano de turno, en el informe correspondiente, repitió la retórica contra el bloqueo impuesto por Estados Unidos, contra la política dirigida a imponer un “cambio de régimen” y enumeró los cambios significativos producidos en la economía y la sociedad en los últimos dos años. Aseveró, que “Cuba ha continuado fortaleciendo el carácter democrático de su institucionalidad y que las libertades de opinión, de expresión, de información y de prensa son reconocidas a todos los ciudadanos”, sin aclarar que esas libertades están limitadas constitucionalmente a la defensa de los postulados del partido gobernante, lo que explica que en Cuba solo pueden existir legalmente las asociaciones creadas o subordinadas a ese fin.

 

Durante la evaluación la mayoría de los países participantes en el EPU elogiaron a la Isla por sus “avances” con respecto a los Objetivos de Desarrollo del Milenio, especialmente en lo que se refiere a la educación y el acceso a los servicios de salud, así como a los cambios en la política migratoria y al derecho de los cubanos a trabajar por cuenta propia en un conjunto, aún limitado, de actividades. Pero al mismo tiempo instaron al Gobierno, entre otras cosas, a poner alto a la detenciones cortas, acoso y otras medidas represivas de activistas y periodistas independientes, a reducir el control gubernamental sobre internet, a que los delegados del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) puedan visitar las cárceles sin restricciones, a ratificar los Pactos de Derechos Civiles y Políticos y de Derechos Económicos, Sociales y Culturales que Cuba firmó desde el año 2008.

 

Como resultado de la evaluación, el CDH realizó 204 recomendaciones y sugerencias más que en el año 2009, es decir, un total de 292. Los señalamientos responden al deplorable estado de los derechos humanos en Cuba y se corresponden con las denuncias realizadas por la oposición cubana dentro y fuera del país, antes y después de la creación del CDH, lo que demuestra fehacientemente que la ausencia de libertades cívicas y derechos fundamentales en Cuba poco tienen que ver el diferendo o con las “patrañas” del enemigo. No se puede negar que se han producido algunos cambios en materia de derechos humanos, pero de lo que se trata es que en un país occidental, con una rica historia en libertades, el estado actual es deplorable e insostenible, pues esas pequeñas medidas implementadas aún no alcanzan ni el nivel de respeto de los derechos humanos que existió en Cuba desde la segunda mitad del siglo XIX.

 

Un paso de importancia sería comenzar por ratificar los pactos que Cuba firmó hace cinco años, los cuales, por su carácter vinculante, podrían ser una verdadera señal de cambio.

 

Sin embargo, hay que reconocer que la respuesta de la embajadora de la Isla ante la ONU, al plantear que de esas recomendaciones se aceptará “un amplio grupo” y se implementarán “según nuestras posibilidades y la evolución de las circunstancias”, al menos toma distancia de aquellos discursos inflamados cada vez que se le hacía un señalamiento a la Isla.

En otro país es “brutal desalojo”, pero en Cuba el eufemismo castrista le llama “extracción de ilegales”.

 

Protestas, desalojos y abusos de poder en Guanabo

William Cácer Díaz

14 de mayo de 2013

 

Veintisiete familias pierden sus casas en medio de un fuerte operativo policial con tropas especiales.

 

Más de 80 personas, incluyendo niños vestidos de uniforme escolar, fueron interceptados por la Policía Nacional Revolucionaria (PNR), en la mañana del pasado día 6 de mayo, para impedir que realizaran una protesta frente a la Plaza de la Revolución, donde radica el Consejo de Estado.

 

La intercepción ocurrió en el Punto de Control de la PNR de Bacuranao cuando las personas se dirigían, en un ómnibus de la ruta 400 que cubre el tramo Guanabo-La Habana, al Consejo de Estado para protestar por un desalojo masivo del que fueron víctimas.

 

“La policía desvió la guagua hacia la sede del Poder Popular de Guanabo donde nos dieron una charla que no nos convenció, pero nos prometieron que se iba a analizar el caso del desalojo, y que en los próximos días nos legalizarían las viviendas”, dijo Rosa Ortega.

 

Dos días antes, estas personas, que residían en el caserío Los Tanques, ubicado en calle 17, entre 412 y final del reparto Peñas Altas, en Guanabo, habían sido desalojadas por la PNR, que obró bajo las órdenes del Gobierno y la Dirección Municipal de la Vivienda de Habana del Este, y sus viviendas fueron demolidas con buldócer.

 

Los desalojados, que forman 27 familias, despertaron en la mañana del día 4 de mayo sorprendidos por un gran despliegue policial.

 

Según vecinos del lugar, el caserío amaneció cercado por más de 120 policías y militares de las tropas élites del ejército, llamados Avispas Negras, en camiones y carros patrulleros; una brigada de demoliciones con tres buldócer y carros grúas; médicos y enfermeras en ambulancias, el personal de la Vivienda y dirigentes del Gobierno, entre otros.

 

“Cuando amaneció, comenzó ante la vista de los indefensos pobladores uno de los más crueles y despiadados desalojos que yo haya visto”, destacó Rigoberto Cutiño, vecino del lugar.

 

Al delegado: “¡Vayáse de aquí, usted no es nadie!”

 

La demolición comenzó por las casas de madera de las familias más pobres. Luego las buldócer pasaron a arrasar los cimientos de las que aún estaban en construcción y, por último, derribaron aquellas que ya estaban a la altura de arquitrabe o terminadas.

 

Todas estas viviendas fueron construidas con esfuerzo propio, según testimonios de los vecinos.

 

Las líneas telefónicas fueron interrumpidas y se les prohibió a los presentes tomar imágenes.

 

“Cuando saqué mi teléfono celular para llamar a un vecino que estaba para La Habana y le estaban demoliendo su casa, me percaté de que mi teléfono estaba sin servicio. Las demás personas también estaban sin comunicación. No pudimos llamar a nadie, y al que sacara una cámara fotográfica se lo llevaban preso”, dijo entre lágrimas una de las afectadas.

 

Aunque muchos de los desalojados llevaban más de 10 años viviendo en esos hogares, una de las trabajadoras de Vivienda, que participó en el desalojo, dijo que “hacia más de 15 días que estas personas habían sido alertadas para que retornaran a su lugar de origen, porque esas construcciones eran ilegales y serían demolidas”.

 

Mientras se desarrollaba el desalojo, el delegado del Poder Popular de la localidad, llamado Abraham, trató de llegar al lugar para impedir lo que estaba sucediendo, pero fue interceptado por oficiales del ejército que le gritaron: “¡Vayáse de aquí, que usted no es nadie!”.

 

“¿Por qué nos sacan de aquí?”

 

Varios vecinos y curiosos que llegaron para presenciar lo que ocurría criticaron la actitud de la primera secretaria del Partido Comunista de Cuba (PCC) del municipio que, de manera muy grotesca, les gritaba a los vecinos que se fueran del lugar.

 

“Este poblado está rodeado de marabú y sobre el diente de perro, a más de 30 kilómetros de la ciudad más cercana y de cualquier hospital. ¿Por qué nos sacan de aquí? ¿Adónde vamos a ir con nuestros niños pequeños? ¿Por qué nos hacen esto?”, se preguntaba una joven.

 

Aunque el Gobierno alega que en Cuba no hay desalojo, y a estas acciones les llaman “extracciones” y forman parte de las nuevas reformas del general Raúl Castro, la agencia independiente Hablemos Press ha reportado en lo que va de año, más de 700 desalojos.

 

En vallas colocadas a orillas de las carreteras pueden leerse letreros que dicen: “Nuestros cambios son para más socialismo”, por lo que no pocos cubanos piensan que no hay esperanza de prosperidad en la Cuba de los hermanos Castro.

 

Distribuido por Hablemos Press

Exteniente coronel cubano

envía carta abierta a Barack Obama

14 de mayo de 2013

 

Nota de Manuel Castro Rodríguez: Publico esta carta tal como le fue enviada al presidente de Estados Unidos. Como se observa, la carta muestra varios errores ortográficos y gramaticales.

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Carta abierta

del exTte Coronel Ing. Máximo Omar Ruiz Matoses

FFAA de Cuba

 

Respetable Presidente:

 

Si esta carta es abierta, es por la sencilla razón de que mi deseo ferviente es que algo le llegue aunque sea de soslayo.

 

El motivo en cuestión, álgido por cierto, es el siguiente:

 

Deseo pedirle que dedique algún minuto extraviado de su precioso tiempo para ver porque a ningún militar cubano que haya abrazado el camino de la democracia a sabiendas que podía ser fusilado y que por tal paso cumplieron largos años de prisión en las condiciones mas onerosas posibles por el solo hecho de haber servido en las Fuerzas Armadas cubanas, se les ha brindado refugio político en EEUU, como debiera ser. Se alega por vuestro funcionarios que fueron militantes del PCC, cosa cierta pues ningún oficial llega a serlo si no detenta este carnet, pero no se tiene en cuenta el paso radical dado por todos los que han estado en las prisiones castristas de decirle un NO al tirano que medra nuestras tierras.

 

Lamentablemente este sacrificio no ha prendado con una respuesta rápida como hubiésemos querido pero si, y no le quepa la menor duda que en las conciencias de muchos de nuestros oficiales si se han sembrado muchas interrogantes. ¡Ese ha sido nuestro primer grano de arena en la lucha por emancipar a Cuba de la tiranía actual!

 

Mas sin embargo debe Usted tener conocimiento del Coronel cubano, militante del PCC, funcionario de Cárceles y Prisiones de Cuba y de su esposa, también militante y oficial de la misma entidad, que, después de haber cometido múltiples violaciones contra los derechos humanos y haberse retirado con todas las de la ley del servicio activo descansaban tranquilamente en vuestra tierra como dos “angelitos”.

 

Y que decir Sr. Presidente de la hija de Raúl Castro que visita a los EEUU cuando le viene en ganas, o la nieta de estos detestables fósiles que aún carga sobre sus hombros, cual verdaderos parásitos el noble pueblo cubano y que son militantes del PCC y a lo que van, todos, es a subvertir, como quiera que usted lo mire, el orden interno de vuestro país.

 

Establezco esta comparación porque es muy clara y porque a raíz de haber solicitado mi esposa, la Dra. María Josefa Cabezas, que está en Cuba, una visa de entrada a su gran país a visitar al hermano expreso político que hace mas de 30 años allá vive quizás antes de morir y que bajo ningún concepto se hubiese “quedado” pues tenemos una pequeña aún en Cuba, médico por cierto también le fue denegada. ¡Qué culpa tiene esta mujer de ser mi esposa!

 

Debe usted saber señor Presidente, que, cuando salí de prisión quise recorrer el mismo camino de mis anteriores compañeros de armas denegados y en mi caso, después de cumplir una larga condena de 20 años también fue así. Como se me cerraron todos los caminos en Cuba para trabajar y sostener a mi familia, tuve que salir para España, ya viejo y con traumas producidos por la injusta prisión, gracias al tremendo gesto de solidaridad de el Reino de España, claro, con la consiguiente separación de la familia, quizás por la mala interpretación que han hecho algunos de vuestros funcionarios de inmigración y del HSD.

 

Le pongo en conocimiento de estos hechos porque dudo mucho que usted sea partícipe de tan nefasta política y que quizás pueda ser enmendada y solicito se le conceda visa de entrada a vuestro país a mi esposa.

 

Disculpe el atrevimiento y pido disculpas si en algo he faltado.

 

Respetuosamente:

Máximo Omar Ruiz Matoses.

Ex Tte Coronel Ing. FAR de Cuba.

¿Quién responde por

la situación de los presos políticos cubanos

deportados a España?

Alberto Santiago Dubouchet,

preso político cubano deportado a España,

se suicidó en abril de 2012

Entrevista al periodista Normando Hernández,

preso político cubano deportado a España

Entrevista al médico José Luís García Paneque,

preso político cubano deportado a España

Nota de Manuel Castro Rodríguez: El presidente de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), Elizardo Sánchez Santacruz -exprofesor universitario y expreso político-, ha lamentado las “situaciones conflictivas” que atraviesan algunos de los presos políticos cubanos que fueron  desterrados a España y ha culpado de estos problemas a la “especie de chapuza” que coordinaron en 2011 los Gobiernos de Cuba y España y la jerarquía católica cubana.

 

Según Sánchez Santacruz: “Los responsables de estos conflictos son quienes diseñaron fórmulas desacertadas para traer a los cubanos hacia el destierro en España sin valorar debidamente la composición de los núcleos familiares o incluso, a veces, la identidad de las personas”.

 

Para Sánchez Santacruz, “aquellos polvos han traído estos lodos”.

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Presos de las buenas intenciones

Jerónimo Andreu / Ezequiel Moltó

12 de mayo de 2013

 

España acogió 700 cubanos en 2011 como refugiados políticos

Ahora muchos viven en la pobreza y penan por conseguir un empleo

“Nos prometieron una casa y ayudas, y no tenemos nada”, dice un disidente

Muchos han emigrado a EE UU al no encontrar trabajo ni apoyos

 

Tras 23 años, 7 meses y 11 días de cárcel, Arturo Suárez era considerado el preso de conciencia más antiguo de Cuba. Su primera condena le llegó en los años ochenta por unas pintadas contra la dictadura; la última, por el secuestro de un avión para escapar de la Isla, fue de 30 años. Desde su celda, Suárez, hijo de una Dama de Blanco y defensor del pacifismo de Martin Luther King, se convirtió en un reputado defensor de los derechos humanos, relatando en sus cartas a los observadores internacionales los abusos en las cárceles del régimen.

 

En nombre de casos como el de Suárez, para quien Juan Pablo II pidió la libertad en 1998, el último Gobierno del PSOE negoció a través de la Iglesia cubana una excarcelación colectiva. Se desarrolló entre 2010 y 2011, cuando 115 presos llegaron a España junto a 650 familiares. Las gestiones del entonces ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, y del cardenal de La Habana, Jaime Ortega, fueron alabadas como ejemplo de diplomacia y gestión humanitaria. Ramón Jáuregui atribuyó al Gobierno socialista “el orgullo de decir al mundo que ha sacado a los presos de conciencia de las cárceles cubanas”: mientras, por parte del PP, Esperanza Aguirre y José María Aznar acogieron a los presos como héroes de la democracia.

 

Fueron días de flashes y rosas. Tres años después, el balance de la operación es una metáfora de los males de la acción humanitaria: grandes intenciones, deficiente planificación, demasiados imprevistos y muy pocos recursos. Este martes el desahucio en Alicante del cubano Gilberto Martínez ha devuelto a los disidentes a los focos. Martínez, que asegura que fue detenido y condenado a tres años de cárcel por haberse hecho “amistades opositoras”, no tenía dinero ni para el alquiler desde que en julio le retiraron las ayudas: 400 euros de Cruz Roja y 595 del Gobierno. “Nos trajeron engañados a España: nos prometieron trabajo, una casa y ayudas, y no tenemos nada”, protesta. Sus hijos de 8, 15 y 22 años se alojan con otra familia cubana que el día 26 se enfrenta a un lanzamiento. “Si me dicen en Cuba la crisis que había en este país, me hubiera quedado allí”, se lamenta.

 

Como corresponde a una operación de gran peso mediático, la acogida de los cubanos se resolvió de forma más rápida que la de la mayoría de refugiados, y automáticamente todos obtuvieron permisos de residencia y trabajo. Sin embargo, el dinero y el interés escampó a los 18 meses, plazo que contemplaban los convenios firmados entre España y los acogidos. Coincidiendo con la llegada al poder de Mariano Rajoy, las ONG Accem, CEAR y Cruz Roja, que gestionaban el programa, dejaron de recibir subvenciones por los excarcelados. El nuevo ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, solo se comprometió a acelerar las homologaciones de títulos y la inserción laboral, de la que no se tiene noticia. Los disidentes más vulnerables (enfermos, familias monoparentales...) han recibido ayudas durante tres años; el resto han sido tratados como “emigrantes normales”, explican desde el ministerio de Empleo, responsable del seguimiento de los cubanos que se han beneficiado de programas sociales. Fuentes del actual equipo de Exteriores aseguran que el PSOE pecó de optimismo trayendo una cantidad desorbitada de familiares y no exponiéndoles la situación con realismo.

 

Un sector de los expresidiarios reclama al PP que cumpla con las responsabilidades heredadas. Para recordárselas a Margallo, desde hace 397 días, 10 cubanos se turnan para dormir frente a la sede de Exteriores. Uno de ellos es Miguel Fernández, de 50 años, ebanista de brazos fuertes y tatuados que vivía en La Víbora (La Habana). Aterrizó en Madrid con su mujer, y desde allí los derivaron a Málaga a unas instalaciones de la Cruz Roja. “Nosotros vinimos en cueros, con lo puesto de la cárcel”, relata. Mientras come arroz en un tupper, explica que protestan porque el Gobierno no ha invertido en ellos dinero del Fondo Europeo para los Refugiados que aseguran que puso a disposición de España la UE, aunque desde Trabajo aclaren que ese fondo se reparte entre todos los refugiados del país y que no había ninguna partida específica para los cubanos. “Nuestra inserción estaba aparentemente organizada, pero luego chocamos con esto”, protesta Miguel: “Ahora querían que nos echáramos atrás, pero sabemos resistir”.

 

Otro de los acampados es el hijo de 21 años del expresidiario Alberto Santiago Dubouchet. El que fuera director de la agencia de noticias Habana Press se colgó en su casa de Las Palmas de Gran Canaria en abril de 2012 para poner fin a una profunda depresión. Los exiliados no han querido acusar al Gobierno de la muerte de Dubouchet, un hombre destrozado por la prisión, pero recuerdan que el periodista falleció literalmente sin un euro, mientras desesperaba por no conseguir una ayuda con que viajar de Canarias a Móstoles, donde le esperaban sus hijos.

 

Grupo disperso

 

Una de las peculiaridades más espinosas a la hora de tratar con el colectivo de expresidiarios es su heterogeneidad. No porque abarque de médicos a obreros; sino, sobre todo, porque incluye desde presos de conciencia del Grupo de los 75 a balseros y tipos duros sin excesivas convicciones políticas. En algunos casos el motivo del encarcelamiento es difuso. Por ejemplo, Miguel Fernández prefiere no explicar por qué pasó cinco años en prisión. “Los Castro son muy listos”, profundiza en la polémica otro de los cubanos más críticos sin dar su nombre: “Aprovecharon que el PSOE no puso filtros y, entre los presos les metieron lo mismo col que lechuga”.

 

Las grietas dentro del grupo impiden trazar el destino que han seguido muchos de sus miembros. El Gobierno tampoco ofrece muchos datos. Sí está claro que una cantidad considerable ha abandonado España, preferentemente por EE UU, donde ya tenían familiares que han servido de puente. Otros trataron de entrar al país a través de su frontera sur, México, con éxito dispar. “Nosotros lo intentamos el 3 de marzo, pero no nos dejaron y tuvimos que regresar a España”, cuenta Miguel Fernández.

 

Mientras que los acampados de Madrid piden al Gobierno que les ayude a cambiar de país si aquí no les puede ayudar, algunos de sus compañeros censuran esta línea reivindicativa. “Llevamos dos años y medio aquí: el que quiso integrarse ha tenido tiempo”, explica uno de ellos: “España pasa una crisis terrible y no puedes agarrarte a promesas”.

 

En todo el vuelo de Cuba a España, Arturo Suárez no quiso soltar a su bebé, al que había visto una sola vez. Ahora vive de las ayudas de la Comunidad de Madrid. “Tengo una renta mínima de 534 euros y me apoyan algunos familiares, pero estoy agradecido. Vengo de una tiranía. Hay que reubicarse y esperar. Lo mismo descargo cajas que trabajo de jardinero”, cuenta. Espera ilusionado el nacimiento de su segundo hijo, pero no oculta que lo que no consiguió la dictadura lo han logrado los años, las circunstancias y los compañeros de viaje: “Aquí, políticamente no hacemos nada. Fui un líder de los derechos humanos, pero mi prioridad ahora es mi familia”.

La foto que podría salvarle la vida a Berta Soler

El papa Francisco saluda a Berta Soler

en la audiencia general del 8 de mayo de 2013

La Habana en blanco y negro

Mary Anastasia O'grady

6 de mayo de 2013

 

Después que la policía la sometiera a un interrogatorio de 11 horas en 2011, Berta Soler, una de las fundadoras del grupo disidente cubano conocido como las Damas de Blanco, recibió un ultimátum.

 

Durante una entrevista en las oficinas de The Wall Street Journal en Nueva York, Soler me dijo que el funcionario del Ministerio del Interior que la escoltó hasta su hogar le dijo que ella y Laura Pollán (otra fundadora del grupo) debían irse de Cuba “porque por nosotras es que se mantenían las Damas de Blanco”. Su respuesta no se hizo esperar, según contó. Si “hay alguien que tiene que irse del país son los Castro” contestó.

 

Los cubanos han sido puestos contra el paredón y fusilados por menos, pero la valentía de Soler no es de extrañar para el régimen. Durante siete años, a partir de 2003, las Damas, vestidas de blanco de pies a cabeza, fueron juntas a misa en la iglesia de Santa Rita para luego recorrer pacíficamente las calles y exigir la liberación de sus familiares que eran presos políticos.

 

A menudo, eran atacadas por agentes de Castro, con rasguños, golpes de puño y patadas. Pero nunca se amilanaron, incluso después de que el régimen endureciera sus tácticas al subirlas a autobuses, llevarlas lejos de sus hogares y abandonarlas en el camino para que regresasen por su cuenta.

 

Para 2010, las fotografías de la brutalidad de la que eran sujeto tomadas con teléfonos celulares se convirtieron en una vergüenza internacional lo suficientemente grande para la dictadura, que comenzó a deportar a los prisioneros y sus familiares más cercanos a España. Era una estrategia clásica de los Castro: durante más de medio siglo, los líderes más fuertes de la disidencia, los que no podían ser sometidos eran asesinados o exiliados.

 

El esposo de Pollán, Héctor Maseda, y el esposo de Soler, Ángel Moya, fueron parte de un pequeño grupo de prisioneros de conciencia que se negaron a abandonar la isla. A la larga, Castro les dio la libertad condicional, pero las Damas no se desintegraron sino que, por el contrario, empezaron a luchar por la liberación de todos los prisioneros políticos y por los derechos humanos.

 

El grupo crecía y se expandía por toda la isla cuando, en 2011, le dijeron a Soler que se fuera de Cuba. Diecisiete días después, el 14 de octubre de 2011, Pollán murió misteriosamente en un hospital de La Habana, rodeada de agentes de seguridad.

 

Pollán habría estado relativamente bien de salud apenas unas semanas antes cuando, como lo describe su amiga Soler, los agentes de Castro la atacaron, mordieron, arañaron su brazo y le pasaron un pañuelo sobre las heridas abiertas. Si esa fue una manera de colocar algo en su sangre, nunca lo sabremos. Pero una semana después, Pollán empezó a tener escalofríos y a vomitar y el 7 de octubre, cuando fue internada con problemas para respirar.

 

Soler alega que Pollán podría haber recibido oxígeno pero, en cambio, “la entuban y la dopan” y poco después “perdimos a Laura”. Como lo informé en su momento, no hubo autopsia y el cuerpo de Pollán fue cremado rápidamente.

 

Raúl Castro habrá pensado que las Damas de Blanco se desintegrarían pronto. Se equivocó. Soler dice que las muertes bajo circunstancias sospechosas de su amiga y del disidente Oswaldo Payá, en julio de 2012, supuestamente en un accidente vehicular en el que, según testigos, no hubo un choque, ha fortalecido el movimiento.

 

Soler está aprovechando la nueva política de la dictadura —que por primera vez en medio siglo permite a los cubanos viajar al exterior— para pedirle a la comunidad internacional “apoyo moral y espiritual” para el pueblo cubano en su lucha contra la dictadura.

 

Quiere que el mundo sepa del racismo de los Castro. Los negros, dice, están sumamente sub representados en las universidades y sobre representados en las cárceles.

 

Los mendigos en Cuba son negros, no blancos. Los que viven en lugares marginales, son negros, no blancos”, acusa. Añade: “Me dicen '¡negra!, ¿qué tú haces allí?, ¡tienes que agradecer mucho a la revolución!”.

 

La represión está en aumento y, ante la ausencia de una condena internacional, el régimen se siente libre de golpear públicamente a las Damas de Blanco para demostrar quién manda en el país. El régimen solía enviar solo mujeres para atacar a las Damas, pero ahora también manda a hombres. Las golpean con la clara intención de hacerles daño. Algunas veces les rompen los huesos.

 

Soler dice que estos atacantes “nunca han sido personas del barrio” que salen a defender espontáneamente la gloriosa revolución. Son profesionales que trabajan para el Ministerio del Interior o civiles que obedecen el régimen para mantener sus empleos o sus cupos en las universidades. Soler dice que en los últimos dos años, muchas de “las mismas caras” han aparecido repetidamente para atacar al grupo. La mujer que mordió a Pollán es conocida por las Damas porque es una presencia constante en las golpizas y trabaja para el ministerio.

 

Es escalofriante pensar qué podría pasar con la políticamente incorrecta Soler cuando regrese a Cuba, motivo por el cual su viaje esta semana a Roma adquiere una importancia crítica. Ha pedido una audiencia con el papa Francisco. Si él la acepta, la visita podría protegerla. De lo contrario, y en ausencia de otras voces internacionales influyentes que la defiendan, su futuro es más incierto.

Un drama con final feliz

René Gómez Manzano

8 de mayo de 2013

 

El pasado martes, al filo de la media noche, recibimos una noticia excelente: fue liberado en Oriente el preso de conciencia Luis Enrique Lozada Igarza. Como resultado de ello, pusieron fin a la huelga de hambre que realizaron durante semanas el propio cautivo, sus familiares y veintenas de activistas de la gloriosa Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), encabezados por el preso político (en licencia extrapenal) José Daniel Ferrer García.

 

Se trata —a no dudarlo— de una gran victoria de esos aguerridos compatriotas, que no vacilaron en poner en riesgo su salud y aun sus vidas para conjurar la injusticia que se perpetraba contra su pariente y amigo. Particularmente patéticas resultaron las declaraciones del hijo adolescente del ahora liberado, quien en un conmovedor video expresaba al mundo que, ante la realidad confrontada por su progenitor, él y sus restantes seres queridos veían la muerte como único fin posible a su abstinencia de alimentos.

 

Unas horas antes del feliz anuncio de la liberación de Lozada Igarza, en una reunión del grupo plural de análisis ALDECU (Alianza Democrática Cubana), escuchábamos la información brindada por Félix Navarro, quien narraba las incidencias del viaje que Ángel Moya Acosta y él mismo —ambos cautivos de conciencia pertenecientes al Grupo de los 75 — hicieron a la antigua provincia de Oriente a fin de solidarizarse con los huelguistas.

 

Ellos conocieron de primera mano el espíritu de admirable firmeza que identificaba a todos los ayunantes, incluyendo aquellos que, por tener ya su salud más deteriorada, habían sido ingresados en el Hospital Provincial Saturnino Lora, de la ciudad de Santiago de Cuba.

 

El primero de mayo, los miembros de ALDECU hubimos de emitir una declaración de solidaridad con los huelguistas. Manifestamos nuestra indignación con el diario Granma, que ese día se declaraba preocupado por el peligro de muerte que —según sus editores— corren los presuntos terroristas encerrados por autoridades extranjeras en la Base Naval de Guantánamo, al tiempo que guardaba total silencio sobre la amenaza análoga que pendía sobre veintenas de pacíficos cubanos sometidos a la jurisdicción del gobierno castrista.

 

En el párrafo final del mismo documento, hubimos de expresar nuestras expectativas: “Esperamos que primen la compasión y la comprensión, y demandamos del gobierno de La Habana que atienda y dé una solución justa y rápida a las peticiones formuladas por los participantes en la huelga de hambre”.

 

Como firmante de la Declaración, sólo me cabe declararme complacido por la solución constructiva dada a este asunto por el régimen castrista. Para empezar, ya sabemos que no había razones para arrestar a Lozada Igarza, y menos aún para hacerlo en la forma violenta en que tuvo lugar su detención. Por supuesto que tampoco había argumentos válidos para que un fiscal decretase la prisión provisional.

 

Pero ya que esas arbitrariedades fueron perpetradas, al menos experimentamos ahora el alivio de que el activista prodemocrático inocente haya salido en libertad y de que sus hermanos de luchas pudieran cesar el difícil acto de protesta que se vieron obligados a realizar para lograr la subsanación del atropello.

 

Ojalá que esta excarcelación, al igual que la del periodista Calixto Ramón Martínez Arias días atrás, sirva para que se implemente una nueva política del régimen cubano, que implique que los ciudadanos dejen de ser perseguidos y arrestados por el solo hecho de discrepar.

Sara Martha Fonseca denuncia más represión

realizada por los fascistas rojos castristas

8 de mayo de 2013

http://www.hablalosinmiedo.com/2013/05/fuerte-acto-de-repudio-opositores-en.html?utm_medium=twitter&utm_source=twitterfeed

Bandas castristas y la policía política

asaltan la vivienda de matrimonio opositor

en Antillas, Holguín

8 de mayo de 2013

Denuncias de Luis Enrique Lozada Igarza

al ser liberado

El opositor pacífico Luis Enrique Lozada Igarza, liberado el martes -sin que le hubiesen formulados cargos- tras una huelga de hambre de casi un mes, denunció golpizas, humillaciones y otros maltratos en prisión.

 

Fue un “encarcelamiento arbitrario e injusto”, dijo Lozada Igarza.

 

Según la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), las autoridades buscaron acusar a Lozada Igarza de un delito de “amenazas”, aunque el opositor ha sufrido el allanamiento de su vivienda, golpizas y robos por parte de bandas fascistas enviadas por el régimen.

 

El activista de la UNPACU calificó de “vandalismo” los actos contra su casa y su familia, “incluso comprometiendo la vida de todos”. Relató que tras su detención, pasó seis días en una unidad policial y luego fue trasladado a la prisión de Boniato, “envuelto en cadenas como un criminal” e internado en una celda de castigo.

 

“Me quitaron la ropa a la fuerza y me tiraron en una celda desnudo. Tuve que dormir esa noche en el suelo, hasta el otro día que me sacaron de la celda y me vistieron a la fuerza. En el forcejeo se rompió una camisa y por eso me dieron una golpiza”, dijo.

 

“No acepté el uniforme, porque no había razón para que yo estuviese preso sin estar sancionado y sin haber cometido delito”, añadió. Por ello, “rompí el uniforme (…) y me dieron otra paliza con un bastón. Todavía tengo los hematomas en el cuerpo”, afirmó.

 

Lozada Igarza declaró que de Boniato fue trasladado a la cárcel de Aguadores, donde lo cambiaban diariamente de celda.

 

“Me daban un colchón totalmente hediondo a las seis de la tarde y a las seis de la mañana me lo quitaban. El resto del tiempo tenía que permanecer sentado en el suelo o acostado en el suelo engurruñado, porque dentro de la celda hay una litera que no permite estirarse”, agregó. “Todo el tiempo fue castigo para que yo desistiera”.

 

Debilitado por la huelga de hambre, Lozada Igarza fue trasladado el día tres de mayo al Hospital Provincial Saturnino Lora. El pasado domingo fue internado en la sala de terapia intensiva.

 

La protesta del disidente fue secundada durante más de 20 días por decenas de activistas de la UNPACU, entre ellos Enrique Lozada, su hijo de 17 años. Varios opositores necesitaron hospitalización.

 

De su paso por las prisiones de Boniato y Aguadores, Lozada Igarsa denunció además casos de intento de suicidio y muertes no aclaradas.

 

“El Gobierno silencia estas cosas. Esto no lo sabe nadie, solo el familiar que lo sufre”, dijo.

 

“Las golpizas son constantes, los atropellos, las amenazas”, afirmó.

 

Alertó que en esas cárceles “en estos momentos todavía quedan presos que están plantados por palizas que les han dado (…) pidiendo que se abra un proceso judicial” contra los carceleros.

 

“Algunos están distróficos, que yo lo vi”, dijo Lozada Igarza.

Liberado Luis E. Lozada

Finaliza la huelga de hambre.

7 de mayo de 2013

Carta de libertad de Lozada es entregada a su padre.

La huelga continúa.

7 de mayo de 2013

En grave estado dos huelguistas

víctimas de la violencia castrista

En terapia intensiva Luis Enrique Lozada,

preso político en huelga de hambre

7 de mayo de 2013

 

El prisionero político Luis Enrique Lozada Igarza, en huelga de hambre desde el pasado 9 de abril para exigir su liberación, está internado en la sala de terapia intensiva del hospital Saturnino Lora desde el domingo por la noche, informó el exprisionero político del Grupo de los 75 José Daniel Ferrer, coordinador nacional de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU).

 

Su esposa y su hija pudieron verlo y está muy deteriorado físicamente, pero dijo que mantenía su postura de que lo liberan o se muere, porque no va a cumplir sanción por un delito que no cometió”, declaró Ferrer.

 

Lozada Igarza fue trasladado al hospital desde la cárcel de Aguadores el pasado sábado, explicó el disidente, quien junto a decenas de miembros de la UNPACU realiza también una huelga de hambre en solidaridad con el preso político y por el cese de la violencia contra los opositores.

 

Ferrer dijo que más de 70 activistas protestan desde este lunes frente al hospital y se niegan a abandonar el luegar hasta que Lozada Igarza sea liberado.

 

Hay un despliegue de fuerzas del Ministerio del Interior y de estas brigadas que ellos llaman ‘de respuesta rápida’”, alrededor del Saturnino Lora, pero los activistas continuaban allí este martes por la mañana, indicó Ferrer.

 

El líder de la UNPACU señaló que las autoridades han intentado, con promesas de “solución”, que Lozada Igarza termine su huelga y los disidentes levanten su protesta.

 

Entretanto, siete miembros de la UNPACU continúan internados en el hospital Juan Bruno Zayas. De ellos, cinco han advertido que no aceptarán más sueros.

 

Ante la dilación y las promesas que van incumpliendo los oficiales de la policía política, dicen que o se mueren o ven a Luis Enrique en libertad”, alertó Ferrer.

 

Según el líder disidente, las autoridades han tratado de acusar a Lozada Igarza de un supuesto delito de “amenazas”, pese a que el opositor ha sufrido el allanamiento de su vivienda por parte de turbas enviadas por el régimen, golpizas e incluso robos.

 

Expulsados del hospital

 

Mientras tanto, en horas de la tarde del martes, la policía expulsó a siete huelguistas que se encontraban ingresados en el hospital Juan Bruno Zayas.

 

Se los han llevado violentamente, aun en su estado. Algunos han sido llevados para sus viviendas”, denunció Ferrer.

 

La Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN) expresó “profunda preocupación” por la huelga de hambre de los activistas en el oriente del país.

 

La CCDHRNhace un llamado a las autoridades a que a la mayor brevedad ponga en libertad a Lozada Igarza y así poner fin a esta desafortunada situación. También recabamos de todos aquellos que puedan imponer sus buenos oficios que así lo hagan para impedir que estos hechos tengan resultados lamentables”, dijo la organización en un comunicado.

Policía política asalta el hospital

y se lleva a los huelguistas aplicando la fuerza bruta

Huelguistas golpeados

en el hospital de Santiago de Cuba

Comisión de Derechos Humanos

denuncia decenas de golpizas

y actos vandálicos contra opositores

7 de mayo de 2013

 

Durante el pasado mes de abril se produjeron en Cuba “por lo menos 366 detenciones arbitrarias por motivos políticos”, la segunda cifra más alta en los cuatro primeros meses de 2013, informa la opositora Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN) en su informe mensual sobre la represión en la Isla.

 

La cifra más alta hasta el momento es la de febrero, cuando se registraron 504 arrestos de disidentes, según la Comisión.

 

El Gobierno de Cuba continúa ocupando el primer lugar en todo el Hemisferio Occidental por la cantidad de detenciones sistemáticas de corta duración (varias horas, días o semanas) ejecutadas por motivos netamente políticos”, dijo la CCDHRN.

 

De manera paralela, registramos los casos de al menos 52 disidentes agredidos físicamente por agentes policiales o parapoliciales, 18 víctimas de actos vandálicos (tales como apedreamientos de hogares y daños a la propiedad) y 8 ‘actos de repudio’, denunció.

 

Los datos correspondientes al mes de abril “ratifican el cuadro general de violaciones sistemáticas de todos los derechos civiles y políticos y otros derechos esenciales” en Cuba, consideró la organización.

 

Advirtió que al cierre de su informe, “varias decenas de pacíficos opositores (alrededor de 60), en su mayoría integrantes de la Unión Patriótica de Cuba, encabezados por José Daniel Ferrer García, permanecían en huelga de hambre en protesta con el aumento de los actos de brutalidad policial contra disidentes de la región oriental y por el injusto encarcelamiento, sin cargos formales, desde el 9 de abril, del opositor Luis Enrique Lozada Igarza”.

Un canciller «desinformado»

Marlene Azor Hernández

6 de mayo de 2013

 

El canciller cubano aparenta estar muy preocupado por la prisión existente en la Base Naval y Aérea de EEUU en Guantánamo, pero no parece interesado por la situación en las cárceles de la Isla

 

La primera mentira del canciller Bruno Rodríguez en su Informe a la Comisión de Derechos Humanos es la siguiente: “Lo hace orgullosa de su obra humanista y de su ejecutoria en la garantía del ejercicio de todos los derechos humanos por todos sus ciudadanos”. Creo que ningún político se atrevería a dar un diagnóstico tan absolutamente positivo, ni siquiera de los países más avanzados en los derechos humanos en el mundo. Pero nuestro canciller, ni se sonroja al decirlo.

 

El derecho al salario digno es una demanda pedida desde 2007 por la abrumadora mayoría de la población, que no puede suplir la canasta básica del mes. Este derecho está en la Constitución de la República pero al Canciller se le “olvidó”. Los derechos a la educación y a la salud pública son ciertos pero la calidad de los mismos no puede ser peor. Pero el canciller no tiene tiempo para leer los testimonios de los ciudadanos, ni los resultados del Debate de los Lineamientos. Mucha inversión y ningún resultado. Del derecho a una vivienda, consagrado en la Constitución, ni hablar, es un “no derecho” acumulado por décadas y aumentan los desalojos y los derrumbes o riesgos de derrumbe y al ciudadano, si bien le va, vive en un “albergue” de por vida cuyas condiciones de hacinamiento e insalubridad son similares a las de las cárceles cubanas o a las de cualquier favela tercermundista.

 

Los derechos cívicos y políticos inexistentes, sino, atrévase a hacer una gestión con algún tribunal civil y/o penal y recibirá el trato y la solución que se le puede dar a un “enemigo”. ¿A quien reclamar? No se inquiete, no puede reclamar porque nadie es responsable. Eso sí, las calles de las ciudades y los poblados son las más seguras del mundo, porque en cualquier momento los ciudadanos caen presos sin ninguna razón. Puede estar 24 horas, seis meses, o algún año sin que le presenten causa alguna, pero nuestro canciller no se ha enterado. El maltrato y la prepotencia de la policía tampoco aparecen en el Informe.


Los niños reciben una educación de calidad. Aquí el término calidad parece no corresponder con la lengua española, pero habría que ver con quién está haciendo la comparación. No hay ancianos abandonados a su suerte, aunque se les lleve presos por vender los cigarrillos de la “cuota mensual”, porque el retiro no les alcance para comer, no hay pordioseros en las calles. En fin, la protección de la que habla nuestro canciller a los sectores más vulnerables, es un bonito cuento de hadas.

 

Dice el canciller que EEUU no ha podido “impedir la participación activa, democrática y directa de sus ciudadanos en la edificación del orden constitucional, en las decisiones de Gobierno ni en la elección de sus autoridades”. ¿Desconoce el canciller que las “elecciones” son periódicas, pero ni secretas ni libres?, ¿que las “elecciones” son designaciones de candidatos de unas comisiones seleccionadas por la cúpula del poder y que rinden cuenta sólo a esa cúpula? ¿Y qué me dice el canciller de un sistema de justicia que no cuenta ni con un Tribunal de Garantías Constitucionales de manera tal que la ley y su aplicación es un asunto discrecional, por no decir arbitrario?

 

No recuerdo haber participado en la edificación de ningún orden constitucional en Cuba, pero entiendo que es una frase bonita para presentar en público. Eso sí, introducir a EEUU como la variable más importante de la política interna es ya una “muletilla plattista” del discurso oficial cubano.

 

En cuanto al resultado de los Debates de los Lineamientos, debate acotado a los temas económicos y sociales, hay 50.000 demandas que no fueron publicadas, y la primera y más votada demanda de los salarios, sigue esperando por una “productividad” que no llega y que el gobierno pospone esperando “un milagro que caerá del cielo” como el arreglo de un transporte público decente. Pero estos son sólo detalles para el Canciller que seguro “olvidó”, o no forman parte de los derechos humanos según el gobierno cubano.

 

Dice el canciller que Cuba es “un Estado sin un solo ejecutado extrajudicialmente, torturado ni desaparecido, sin secuestros ni cárceles secretas” Lamento esta desinformación del canciller. Los “juicios sumarios” que se han practicado en Cuba, han sido por decisiones políticas extrajudiciales y con el manejo político de la ley, la arbitrariedad de su aplicación es flagrante y para dar escarmientos ejemplarizantes. Pero más allá de los juicios sumarios absolutamente subordinados a la política del momento, existen testimonios de torturas hoy en la cárceles cubanas y los secuestros pueden durar 24 horas pero se realizan en la calle a opositores pacíficos que salen de sus casas a hacer alguna gestión y son apresados a plena luz del día. Y lo de cárceles secretas, parece ser cierto porque eso de permitir a la prensa nacional y extranjera visitar cuatro cárceles “preparadas” al efecto, cuando hay más de 200 centros penitenciarios en el país, es mantener en secreto para la opinión pública nacional y para los relatores oficiales de las Naciones Unidas para el tema de los derechos humanos en Cuba, la situación real de las mismas. Pero el canciller “desconoce” el nivel de impunidad que reina en las cárceles cubanas.

 

Una política “secreta” frente a los ciudadanos

 

Cito al canciller cuando dice, “Se han adoptado nuevas normas que amplían la base legislativa de los derechos humanos, como las relativas a la seguridad social, la vivienda, el empleo y el trabajo por cuenta exclusivamente personal, la entrega de tierras en usufructo, entre otras. A su vez, se viene avanzando en el perfeccionamiento y actualización del sistema jurídico del país, a través de la aplicación de un grupo de modificaciones que se corresponden con las necesidades de la sociedad cubana y los más elevados estándares internacionales en la materia”.

 

El párrafo anterior debe ser un asunto de seguridad nacional, porque salvo el cuentapropismo, y la entrega de tierras en usufructo, ambos asfixiados por los impuestos y con mercados mayoristas con productos más caros que los mercados minoristas, el resto de las supuestas nuevas normas son “secretas”: las relativas a la seguridad social, la vivienda, el empleo y la actualización del sistema jurídico. ¿Qué ampliación de derechos se han abierto en estos rubros? El canciller sufre de la misma enfermedad que critica el Presidente: el secretismo.

 

Quedé profundamente impactada con la preocupación del canciller sobre la cárcel de Guantánamo. Si el asunto no fuera trágico me hubiera proporcionado una carcajada porque competimos con la Base de Guantánamo en las condiciones de limbo jurídico de los presos políticos cubanos. Las condiciones de hacinamiento e insalubridad y la espantosa comida en las cárceles cubanas superan con creces esos mismos rubros en la cárcel de Guantánamo. En eso las cárceles cubanas ganan ampliamente la competencia. Pero nuestro canciller está preocupado por un pedazo de país adonde el Gobierno no tiene jurisdicción, sin embargo sobre el resto de territorio que sí le compete, nos hace un cuento de hadas. Desde hace varios días, se mantiene la huelga de hambre de 60 opositores pacíficos en la zona oriental del país, justo a unos pocos kilómetros de la cárcel que preocupa a nuestro canciller. Sin embargo, hay más de tres en inminente peligro de muerte, y sus compañeros se rotan para mantener la exigencia de liberación de un preso político, pero eso no aparece en el Informe.

 

El limbo jurídico de los presos de Guantánamo es el mismo en el que están los presos políticos cubanos, alrededor de 90 personas, pero de eso no habla Bruno Rodríguez en su Informe.

 

Pobre nuestro canciller, definitivamente está desinformado.

Denuncia de las Damas de Blanco

en la Iglesia Nuestra Señora del Rosario

28 de abril de 2013

 

Varias Damas de Blanco recibieron una fuerte golpiza este domingo cuando intentaban asistir a misa en la Iglesia Nuestra Señora del Rosario, en Palma Soriano, Santiago de Cuba

 

Entre las golpeadas estuvo Belkis Cantillo, líder de las Damas de Blanco en Santiago de Cuba, quien acaba de regresar a la Isla tras recoger en Bruselas, junto a otras líderes del grupo, el Premio Sajarov que la Eurocámara les concedió en 2005.

 

Me dijeron que yo no podía entrar (a la iglesia) porque denuncié mucho al Gobierno de los Castro en el Parlamento” Europeo, denunció Cantillo, quien durante su estancia en Bruselas relató la situación en Cuba y la represión contra Damas de Blanco y opositores.

 

Tanto ella como las otras agredidas afirmaron que fueron golpeadas por hombres.

 

Me dieron un piñazo en un seno, una patada en las costillas. Los hombres fueron los que nos golpearon”, dijo Cantillo.

 

Nos agredieron hombres vestidos de civil, que no se quisieron identificar”, indicó por su parte Denia Fernández.

 

Nosotros lo que hicimos fue levantar las manos y decir que éramos pacíficas. Aún así nos fueron dando golpes desde la loma que íbamos subiendo hasta la guagua (del Ministerio del Interior). Allí nos cayeron mujeres —que ellos dicen que son del pueblo, pero son policías también (…)—. Nos arrastraron por el suelo, nos arañaron, nos dieron golpes con sombrillas”, relató.

 

Las Damas de Blanco que lograron llegar a la iglesia de Palma Soriano se encontraron con un “acto de repudio” organizado por el Gobierno frente al templo.

 

Una de ellas, Yenisel Rodríguez, dijo que la policía política estaba allí “desde temprano” con “bastante represores, paramilitares”, esperándolas.

 

Algunas fueron arrestadas y luego liberadas. A Taimí Vega “la policía política le dijo que la soltaba para que la reventara el pueblo”, afirmó Yenisel Rodríguez.

 

Otras estuvieron detenidas desde el sábado por la tarde hasta el domingo para impedirles asistir a misa.

 

Vega pudo llegar a la iglesia, pero pasando por los “empujones y golpes” de la turba convocada por el régimen, indicó Rodríguez. Un video difundido por la UNPACU mostró ese incidente.

 

Tanto Rodríguez como Vega dijeron que algunos de los represores se situaron dentro del templo.

 

Entraron a golpearnos dentro de la iglesia. Estaban sentados en los bancos ofendiéndonos”, señaló Vega.

 

Personas dentro de la iglesia nos apoyaron (…) el padre de Palma estuvo todo el tiempo con nosotras (…) incluso se montó en la guagua que los represores nos tenían preparada para sacarnos de allí”, indicó Rodríguez.

 

Otras agredidas fueron Yaima Naranjo, Mariela Rodríguez, Niurka Carmona, Madelaine Santos, Yasnay y Yanela Ferrer.

Otras Damas de Blanco que fueron detenidas

para que no asistieran a misa

Reporteros sin Fronteras pide rápida liberación de

Ángel Santiesteban-Prats y Luis Antonio Torres

Llamado a la liberación del bloguero Ángel Santiesteban-Prats, encarcelado desde hace dos meses

Publicado el Lunes 29 de abril de 2013.

 

Reporteros sin Fronteras pide a las autoridades cubanas que pongan en libertad lo antes posible a Ángel Santiesteban-Prats, escritor y autor del blog Los hijos que nadie quiso, quien se encuentra encarcelado desde el 28 de febrero de 2013. El prisionero, actualmente en huelga de hambre, fue ubicado en una celda de aislamiento cuando fue traslado a la cárcel, a inicios del mes de abril.

 

“El mismo día en que las autoridades accedieron a poner en libertad al periodista disidente Calixto Ramón Martínez Arias, Ángel Santiesteban-Prats fue trasladado a la prisión 1850 y sometido a un régimen de máxima severidad. Esta detención es a la vez absurda y cruel. Las autoridades, que creen que esto servirá de ejemplo, nunca podrán impedir la expresión pluralista entre la población. Ángel Santiesteban-Prats debe ser liberado sin demora”, declaró Reporteros sin Fronteras, que no deja de incitar al bloguero a que cese su huelga de hambre.

 

“El gobierno cubano, que en enero de 2013 asumió la presidencia pro tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), tarda en cumplir sus compromisos internacionales en materia de derechos humanos y de las libertades fundamentales. Los países miembros de la CELAC deben recordarle esta exigencia”, agregó la organización.

 

El bloguero, que fue trasladado el 9 de abril pasado a la prisión 1850 de San Miguel del Padrón (La Habana), inició una huelga de hambre poco después de que llegó a la prisión, antes de que lo ubicaran en una celda de aislamiento, sin luz ni agua. Sólo se le autoriza hablar por teléfono unos minutos al día. El 22 abril Ángel Santiesteban-Prats denunció que fue agredido por los guardias de la prisión. Inmovilizándolo, lo obligaron a que tragara un líquido pestilente que lo hizo enfermar.

 

Ángel Santiesteban-Prats fue condenado a cinco años de prisión el 8 de diciembre de 2012, oficialmente por “violación de domicilio y lesiones”, tras un proceso expeditivo. El escritor, que ha recibido varios premios literarios importantes, ya había sido detenido varias veces antes de esta última comparecencia, debido a su postura política. Se le persiguió de manera redoblada desde que creó su blog, independiente y crítico del gobierno.

 

Además de Ángel Santiesteban-Prats, en Cuba hay otro actor de la información encarcelado, se trata de Luis Antonio Torres, empleado del diario oficial Granma, quien fue detenido en 2011 y condenado en julio pasado a catorce años de prisión por “espionaje”, cargo que nunca se comprobó. Reporteros sin Fronteras también pide su rápida liberación.

¿Quién defiende los derechos de los cubanos?

Oswaldo Payá

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José Martí: El que se conforma con una situación de villanía, es su cómplice”.

Mi Bandera 

Al volver de distante ribera,

con el alma enlutada y sombría,

afanoso busqué mi bandera

¡y otra he visto además de la mía!

 

¿Dónde está mi bandera cubana,

la bandera más bella que existe?

¡Desde el buque la vi esta mañana,

y no he visto una cosa más triste..!

 

Con la fe de las almas ausentes,

hoy sostengo con honda energía,

que no deben flotar dos banderas

donde basta con una: ¡La mía!

 

En los campos que hoy son un osario

vio a los bravos batiéndose juntos,

y ella ha sido el honroso sudario

de los pobres guerreros difuntos.

 

Orgullosa lució en la pelea,

sin pueril y romántico alarde;

¡al cubano que en ella no crea

se le debe azotar por cobarde!

 

En el fondo de obscuras prisiones

no escuchó ni la queja más leve,

y sus huellas en otras regiones

son letreros de luz en la nieve...

 

¿No la veis? Mi bandera es aquella

que no ha sido jamás mercenaria,

y en la cual resplandece una estrella,

con más luz cuando más solitaria.

 

Del destierro en el alma la traje

entre tantos recuerdos dispersos,

y he sabido rendirle homenaje

al hacerla flotar en mis versos.

 

Aunque lánguida y triste tremola,

mi ambición es que el sol, con su lumbre,

la ilumine a ella sola, ¡a ella sola!

en el llano, en el mar y en la cumbre.

 

Si desecha en menudos pedazos

llega a ser mi bandera algún día...

¡nuestros muertos alzando los brazos

la sabrán defender todavía!...

 

Bonifacio Byrne (1861-1936)

Poeta cubano, nacido y fallecido en la ciudad de Matanzas, provincia de igual nombre, autor de Mi Bandera

José Martí Pérez:

Con todos, y para el bien de todos

José Martí en Tampa
José Martí en Tampa

Es criminal quien sonríe al crimen; quien lo ve y no lo ataca; quien se sienta a la mesa de los que se codean con él o le sacan el sombrero interesado; quienes reciben de él el permiso de vivir.

Escudo de Cuba

Cuando salí de Cuba

Luis Aguilé


Nunca podré morirme,
mi corazón no lo tengo aquí.
Alguien me está esperando,
me está aguardando que vuelva aquí.

Cuando salí de Cuba,
dejé mi vida dejé mi amor.
Cuando salí de Cuba,
dejé enterrado mi corazón.

Late y sigue latiendo
porque la tierra vida le da,
pero llegará un día
en que mi mano te alcanzará.

Cuando salí de Cuba,
dejé mi vida dejé mi amor.
Cuando salí de Cuba,
dejé enterrado mi corazón.

Una triste tormenta
te está azotando sin descansar
pero el sol de tus hijos
pronto la calma te hará alcanzar.

Cuando salí de Cuba,
dejé mi vida dejé mi amor.
Cuando salí de Cuba,
dejé enterrado mi corazón.

La sociedad cerrada que impuso el castrismo se resquebraja ante continuas innovaciones de las comunicaciones digitales, que permiten a activistas cubanos socializar la información a escala local e internacional.


 

Por si acaso no regreso

Celia Cruz


Por si acaso no regreso,

yo me llevo tu bandera;

lamentando que mis ojos,

liberada no te vieran.

 

Porque tuve que marcharme,

todos pueden comprender;

Yo pensé que en cualquer momento

a tu suelo iba a volver.

 

Pero el tiempo va pasando,

y tu sol sigue llorando.

Las cadenas siguen atando,

pero yo sigo esperando,

y al cielo rezando.

 

Y siempre me sentí dichosa,

de haber nacido entre tus brazos.

Y anunque ya no esté,

de mi corazón te dejo un pedazo-

por si acaso,

por si acaso no regreso.

 

Pronto llegará el momento

que se borre el sufrimiento;

guardaremos los rencores - Dios mío,

y compartiremos todos,

un mismo sentimiento.

 

Aunque el tiempo haya pasado,

con orgullo y dignidad,

tu nombre lo he llevado;

a todo mundo entero,

le he contado tu verdad.

 

Pero, tierra ya no sufras,

corazón no te quebrantes;

no hay mal que dure cien años,

ni mi cuerpo que aguante.

 

Y nunca quize abandonarte,

te llevaba en cada paso;

y quedará mi amor,

para siempre como flor de un regazo -

por si acaso,

por si acaso no regreso.

 

Si acaso no regreso,

me matará el dolor;

Y si no vuelvo a mi tierra,

me muero de dolor.

 

Si acaso no regreso

me matará el dolor;

A esa tierra yo la adoro,

con todo el corazón.

 

Si acaso no regreso,

me matará el dolor;

Tierra mía, tierra linda,

te quiero con amor.

 

Si acaso no regreso

me matará el dolor;

Tanto tiempo sin verla,

me duele el corazón.

 

Si acaso no regreso,

cuando me muera,

que en mi tumba pongan mi bandera.

 

Si acaso no regreso,

y que me entierren con la música,

de mi tierra querida.

 

Si acaso no regreso,

si no regreso recuerden,

que la quise con mi vida.

 

Si acaso no regreso,

ay, me muero de dolor;

me estoy muriendo ya.

 

Me matará el dolor;

me matará el dolor.

Me matará el dolor.

 

Ay, ya me está matando ese dolor,

me matará el dolor.

Siempre te quise y te querré;

me matará el dolor.

Me matará el dolor, me matará el dolor.

me matará el dolor.

 

Si no regreso a esa tierra,

me duele el corazón

De las entrañas desgarradas levantemos un amor inextinguible por la patria sin la que ningún hombre vive feliz, ni el bueno, ni el malo. Allí está, de allí nos llama, se la oye gemir, nos la violan y nos la befan y nos la gangrenan a nuestro ojos, nos corrompen y nos despedazan a la madre de nuestro corazón! ¡Pues alcémonos de una vez, de una arremetida última de los corazones, alcémonos de manera que no corra peligro la libertad en el triunfo, por el desorden o por la torpeza o por la impaciencia en prepararla; alcémonos, para la república verdadera, los que por nuestra pasión por el derecho y por nuestro hábito del trabajo sabremos mantenerla; alcémonos para darle tumba a los héroes cuyo espíritu vaga por el mundo avergonzado y solitario; alcémonos para que algún día tengan tumba nuestros hijos! Y pongamos alrededor de la estrella, en la bandera nueva, esta fórmula del amor triunfante: “Con todos, y para el bien de todos”.

Como expresó Oswaldo Payá Sardiñas en el Parlamento Europeo el 17 de diciembre de 2002, con motivo de otorgársele el Premio Sájarov a la Libertad de Conciencia 2002, los cubanos “no podemos, no sabemos y no queremos vivir sin libertad”.