La Edad de Oro. José Martí.

A los niños que lean La Edad de Oro
Para los niños es este periódico, y para las niñas, por supuesto. Sin las niñas no se puede vivir, como no puede vivir la tierra sin luz. El niño ha de trabajar, de andar, de estudiar, de ser fuerte, de ser hermoso: el niño puede hacerse hermoso aunque sea feo; un niño bueno, inteligente y aseado es siempre hermoso. Pero nunca es un niño más bello que cuando trae en sus manecitas de hombre fuerte una flor para su amiga, o cuando lleva del brazo a su hermana, para que nadie se la ofenda: el niño crece entonces, y parece un gigante: el niño nace para caballero, y la niña nace para madre.
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Elpidio Valdés contra dólar y cañón

Sinopsis: Este es un film sobre Elpidio Valdés, el personaje más popular de los muñequitos cubanos. A Elpidio Valdés, oficial mambí de la guerra de independencia contra España, le es encomendada la difícil y peligrosa misión de traer desde La Florida, Estados Unidos, un cargamento de armas para el Ejército Libertador de Cuba. Después de enfrentar múltiples dificultades logra cumplir su cometido.

Fue producido en 1983 por el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográfico (ICAIC).

Premio obtenido: 1983, Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, Edición 4º, Animación, Segundo Premio Coral.

 

http://www.youtube.com/watch?v=coL4YxWXryE

Vampiros en La Habana

Sinopsis: El vampiro Berndhart Amadeus Von Drácula, cuya profesión es la de científico, crea el Vampisol que acaba con la vida de su padre el conde Drácula. Este elixir permite a los vampiros exponerse y pasear bajo la luz del sol. Von Drácula decide que se distribuya gratuitamente. La  noticia, todo un hito en el mundo de los vampiros conmociona a dos bandas organizadas de vampiros -Capa Nostra en Estados Unidos y Grupo Vampiro en Europa-, por lo que ambos grupos viajan a La Habana para obtener la fórmula.

La conspiración que llevan a cabo Capa Nostra y Grupo Vampiro acaba con la vida de Berndhart Amadeus Von Drácula. Desde ese momento, su sobrino Joseph Emmanuel Von Drácula -alias Pepito-, custodiará la formula secreta y será objeto de persecución de las mafias de vampiros. Pepito, afanado trompetista, tiene dos frentes abiertos: por un lado su relación con un grupo activista político cuyo objetivo es el tirano Gerardo Machado, que le supone estar en búsqueda y captura también por la policía y, por otro, deberá ingeniárselas para conseguir un objetivo muy loable, que algún día todos lo vampiros puedan tomar el sol en la playa.

 

Premios obtenidos:

- Tercer Premio Coral, VII Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, La Habana, Cuba.

Diploma de Honor, IX Festival Internacional de Cine, Quito, Ecuador. (1986)

- Medalla George Brassans del Festival Cinematográfico de la Casa de la Cultura de Laognan, I Festival de la Cultura Cubana, Francia. (1986)

- Seleccionada en 1989 entre las treinta mejores películas de animación por el Consejo Cultural del Instituto de Cine.

Vampiros en La Habana es el segundo largometraje del cineasta cubano Juan Padrón, creador de Elpidio Valdés, el personaje más popular de las cómicas o muñequitos cubanos.

Fue coproducido en 1985 por el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográfico (ICAIC), Televisión Española (TVE) y Durniock Producciones.

 

http://www.youtube.com/watch?v=6wJFHjgAd0w

Más Vampiros en La Habana

Sinopsis: Esta película es la continuación de Vampiros en La Habana. En 1923 el científico Berndhart Amadeus Von Drácula inventó el Vampisol, una bebida que permitía a los vampiros vivir al sol. La Capa Nostra de Chicago y el grupo Vampiro Europeo se enfrentaron en La Habana para controlar el Vampisol, pero Pepe, el sobrino de Von Drácula, cantó la fórmula del Vampisol gratis por la Radio Vampiro Internacional. Unos años después, en plena Segunda Guerra Mundial, Pepín el hijo de Pepe, desarrolla un Vampisol mucho mas potente el Vampiyaba. Vampiros yanquis, soviéticos y un comando nazi desembarcan en La Habana para hacerse con el Vampiyaba y su creador. Mientras tanto Pepe tiene la desesperada tarea de salvar a su hijo Pepín del mundo vampiro, su matrimonio con Lola y su club nocturno Pepitos. Todo parece perdido, pero el regreso de ultratumba de Von Drácula reestablece el Nuevo Orden Vampiroco Mundial.

Con guión y dirección de Juan Padrón y realizada en 2004, Más Vampiros en La Habana es un largometraje de dibujos animados producido por el Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográfico (ICAIC), con el apoyo de Iskra, Ibermedia, TVE y Canal Plus.

 

http://www.youtube.com/watch?v=C9D5PoCh_oA

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José Martí: El que se conforma con una situación de villanía, es su cómplice”.

Mi Bandera 

Al volver de distante ribera,

con el alma enlutada y sombría,

afanoso busqué mi bandera

¡y otra he visto además de la mía!

 

¿Dónde está mi bandera cubana,

la bandera más bella que existe?

¡Desde el buque la vi esta mañana,

y no he visto una cosa más triste..!

 

Con la fe de las almas ausentes,

hoy sostengo con honda energía,

que no deben flotar dos banderas

donde basta con una: ¡La mía!

 

En los campos que hoy son un osario

vio a los bravos batiéndose juntos,

y ella ha sido el honroso sudario

de los pobres guerreros difuntos.

 

Orgullosa lució en la pelea,

sin pueril y romántico alarde;

¡al cubano que en ella no crea

se le debe azotar por cobarde!

 

En el fondo de obscuras prisiones

no escuchó ni la queja más leve,

y sus huellas en otras regiones

son letreros de luz en la nieve...

 

¿No la veis? Mi bandera es aquella

que no ha sido jamás mercenaria,

y en la cual resplandece una estrella,

con más luz cuando más solitaria.

 

Del destierro en el alma la traje

entre tantos recuerdos dispersos,

y he sabido rendirle homenaje

al hacerla flotar en mis versos.

 

Aunque lánguida y triste tremola,

mi ambición es que el sol, con su lumbre,

la ilumine a ella sola, ¡a ella sola!

en el llano, en el mar y en la cumbre.

 

Si desecha en menudos pedazos

llega a ser mi bandera algún día...

¡nuestros muertos alzando los brazos

la sabrán defender todavía!...

 

Bonifacio Byrne (1861-1936)

Poeta cubano, nacido y fallecido en la ciudad de Matanzas, provincia de igual nombre, autor de Mi Bandera

José Martí Pérez:

Con todos, y para el bien de todos

José Martí en Tampa
José Martí en Tampa

Es criminal quien sonríe al crimen; quien lo ve y no lo ataca; quien se sienta a la mesa de los que se codean con él o le sacan el sombrero interesado; quienes reciben de él el permiso de vivir.

Escudo de Cuba

Cuando salí de Cuba

Luis Aguilé


Nunca podré morirme,
mi corazón no lo tengo aquí.
Alguien me está esperando,
me está aguardando que vuelva aquí.

Cuando salí de Cuba,
dejé mi vida dejé mi amor.
Cuando salí de Cuba,
dejé enterrado mi corazón.

Late y sigue latiendo
porque la tierra vida le da,
pero llegará un día
en que mi mano te alcanzará.

Cuando salí de Cuba,
dejé mi vida dejé mi amor.
Cuando salí de Cuba,
dejé enterrado mi corazón.

Una triste tormenta
te está azotando sin descansar
pero el sol de tus hijos
pronto la calma te hará alcanzar.

Cuando salí de Cuba,
dejé mi vida dejé mi amor.
Cuando salí de Cuba,
dejé enterrado mi corazón.

La sociedad cerrada que impuso el castrismo se resquebraja ante continuas innovaciones de las comunicaciones digitales, que permiten a activistas cubanos socializar la información a escala local e internacional.


 

Por si acaso no regreso

Celia Cruz


Por si acaso no regreso,

yo me llevo tu bandera;

lamentando que mis ojos,

liberada no te vieran.

 

Porque tuve que marcharme,

todos pueden comprender;

Yo pensé que en cualquer momento

a tu suelo iba a volver.

 

Pero el tiempo va pasando,

y tu sol sigue llorando.

Las cadenas siguen atando,

pero yo sigo esperando,

y al cielo rezando.

 

Y siempre me sentí dichosa,

de haber nacido entre tus brazos.

Y anunque ya no esté,

de mi corazón te dejo un pedazo-

por si acaso,

por si acaso no regreso.

 

Pronto llegará el momento

que se borre el sufrimiento;

guardaremos los rencores - Dios mío,

y compartiremos todos,

un mismo sentimiento.

 

Aunque el tiempo haya pasado,

con orgullo y dignidad,

tu nombre lo he llevado;

a todo mundo entero,

le he contado tu verdad.

 

Pero, tierra ya no sufras,

corazón no te quebrantes;

no hay mal que dure cien años,

ni mi cuerpo que aguante.

 

Y nunca quize abandonarte,

te llevaba en cada paso;

y quedará mi amor,

para siempre como flor de un regazo -

por si acaso,

por si acaso no regreso.

 

Si acaso no regreso,

me matará el dolor;

Y si no vuelvo a mi tierra,

me muero de dolor.

 

Si acaso no regreso

me matará el dolor;

A esa tierra yo la adoro,

con todo el corazón.

 

Si acaso no regreso,

me matará el dolor;

Tierra mía, tierra linda,

te quiero con amor.

 

Si acaso no regreso

me matará el dolor;

Tanto tiempo sin verla,

me duele el corazón.

 

Si acaso no regreso,

cuando me muera,

que en mi tumba pongan mi bandera.

 

Si acaso no regreso,

y que me entierren con la música,

de mi tierra querida.

 

Si acaso no regreso,

si no regreso recuerden,

que la quise con mi vida.

 

Si acaso no regreso,

ay, me muero de dolor;

me estoy muriendo ya.

 

Me matará el dolor;

me matará el dolor.

Me matará el dolor.

 

Ay, ya me está matando ese dolor,

me matará el dolor.

Siempre te quise y te querré;

me matará el dolor.

Me matará el dolor, me matará el dolor.

me matará el dolor.

 

Si no regreso a esa tierra,

me duele el corazón

De las entrañas desgarradas levantemos un amor inextinguible por la patria sin la que ningún hombre vive feliz, ni el bueno, ni el malo. Allí está, de allí nos llama, se la oye gemir, nos la violan y nos la befan y nos la gangrenan a nuestro ojos, nos corrompen y nos despedazan a la madre de nuestro corazón! ¡Pues alcémonos de una vez, de una arremetida última de los corazones, alcémonos de manera que no corra peligro la libertad en el triunfo, por el desorden o por la torpeza o por la impaciencia en prepararla; alcémonos, para la república verdadera, los que por nuestra pasión por el derecho y por nuestro hábito del trabajo sabremos mantenerla; alcémonos para darle tumba a los héroes cuyo espíritu vaga por el mundo avergonzado y solitario; alcémonos para que algún día tengan tumba nuestros hijos! Y pongamos alrededor de la estrella, en la bandera nueva, esta fórmula del amor triunfante: “Con todos, y para el bien de todos”.

Como expresó Oswaldo Payá Sardiñas en el Parlamento Europeo el 17 de diciembre de 2002, con motivo de otorgársele el Premio Sájarov a la Libertad de Conciencia 2002, los cubanos “no podemos, no sabemos y no queremos vivir sin libertad”.